A la hora de ir al descanso nocturno se deben cumplir con varios pasos y tratar de no llevar preocupaciones a la cama. Lograr el sueño reparador para que amanecer activos al otro día no se consigue solo con apoyar la cabeza en la almohada o colchón. No es tan automático.

De nada vale ir a dormir si antes incurriste, sin saberlo, en unas prácticas “inofensivas” que atenten contra el sueño y pase factura –por si fuera poco- a otra zona de tu cuerpo: el abdomen, donde se va acumulando la grasa.

No podrás creer que sean, al menos cinco, hábitos los que hay que ir dándole la espalda para mantener la figura y dormir.

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Cuida muy bien tus hábitos antes de ir a dormir. Foto: Pexels

Hábitos nocturnos que te hacen engordar

1. ¿Cenas muy tarde?

Ha sido un consejo recurrente la expresión: “Cena unas dos o tres horas antes de ir a dormir”. En Semana señalan que “expertos aconsejan cenar entre las siete y las ocho de la noche, esto con el fin de que, además de poder reposar previo a dormir, el cuerpo no tienda a engordar”.

El qué comer también influye. Y hay recomendaciones como estas que ofrece Business Insider.

Toma nota: “Las cenas abundantes, ricas en grasa o con ingredientes como el queso, la carne roja o los alimentos fritos pueden provocar problemas digestivos, reflujo gastroesofágico, pesadillas, ansiedad y una peor calidad de sueño”.

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Es mejor dejar el café para beberlo en la oficina y que no sea su primera bebida al despertar.

2. Consumo de café

Hay quienes no concilian el sueño si consumen café por las tardes. Otros, no tienen ese problema y por más que lo tomen una hora antes de ir a la cama, no conocen el desvelo.

Para los primeros, Business Insider aconseja no probar café pasado el mediodía. Citan un estudio en la revista Journal of Clinical Sleep Medicine y señalan que el café puede causar “estragos en tu descanso, afecta a los patrones de sueño y al aumento de peso”.

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3. ¿Leche, para ir a dormir?

Hay un tema fuerte, como ves, con lo que consumes. Si eres de los que bebes “leche entera por las noches, añadirás bastantes calorías extra a tu dieta, lo que podría repercutir en un incremento de la grasa rebelde acumulada en tu vientre”.

Olvídate de chatear y de revisar fotos, videos o redes cuando estés camino a los brazos de Morfeo, el dios del sueño. Foto: Istock

4. Qué hacer con el teléfono celular

Según Seguros La Caja, varios estudios coinciden en plantear “que la luz que emiten las pantallas interrumpe el funcionamiento correcto de la hormona llamada melatonina, que es la encargada de regular el ciclo diario del sueño”.

Esta hormona se libera en la oscuridad, afirman. En ese momento, se altera el reloj biológico. Y, de acuerdo con Business Insider, “el cerebro despierto suele pedir azúcar e hidratos de carbono refinados (…), mientras que también se producen desequilibrios hormonales y metabólicos”.

En muchas partes del mundo, pasar horas sentado frente a la televisión se ha convertido en una de las principales actividades de la vida diaria.

5. ¿Apagar la tele?

Ver series o telenovelas hasta el amanecer es práctica de muchos, en especial los fines de semana. Mirar producciones televisivas te lleva “a comer snacks poco saludables y con eso sumas calorías y grasas saturadas a tu dieta”, recuerda Business Insider.

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¿Haces algo de esto al ir a dormir o estando ya en la cama? Analiza estas sugerencias si notas alteraciones en tu sueño y consecuente descanso… un abdomen más abultado también te pondrá en alerta.

(I)

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