Cristina Reyes y Patrick Mittaz, un noviazgo en plena pandemia que terminó en boda; la ceremonia eclesiástica será en Quito

Se conocieron en 2016, en Quito, pero no hubo química en ese momento. Cada uno siguió su camino por separado, sin contemplar la idea de reencontrarse algún día y construir una vida juntos. No estaba en sus planes. Ella, una abogada sumergida en su carrera política. Él, un empresario dedicado por entero a sus negocios.

Pasaron cuatro años sin saber uno del otro. Pero, como se dice popularmente, “la vida da sorpresas”. Un día antes de que la pandemia se instalara en el país y obligara al confinamiento de la población, en marzo de 2020, volvieron a tener contacto por casualidad, sin proponérselo. Desde ahí no se separaron más.

Hace una semana, el 19 de febrero de 2022, contrajeron matrimonio en Manta, frente al mar, en una boda idílica, donde ella lució un deslumbrante vestido rojo, símbolo del amor y pasión que los une.

La parlamentaria andina Cristina Reyes cuenta así, llena de emoción, cómo ha sido la historia con su ahora esposo Patrick Mittaz, quien es un ejecutivo que ha estado involucrado en el sector privado, lejos de la farándula y la política.

Por eso, la parlamentaria cuida no compartir muchos detalles sobre su esposo, porque él prefiere mantenerse distante de los reflectores.

Cristina Reyes dio el “sí” al empresario quiteño Patrick Mittaz en Manta

“Para él, esto de las cámaras, de la exposición, entrevistas, no le gusta. Y eso hay que respetarlo. El personaje público soy yo y en eso debemos ser respetuosos”, explica Reyes.

No obstante, cuenta brevemente que Mittaz es un ingeniero agroindustrial. Parte de su actividad actual está relacionada con esa rama. Es quiteño. Su padre es suizo y su madre de Machala.

“Encontrar el amor, en este mundo caótico, es maravilloso. Es lo que nos da sentido. No he sido una persona que ha priorizado el matrimonio, he sido una mujer que se ha dedicado a aspiraciones profesionales, siempre estudiando, trabajando, explorando la vida. Pero cuando el amor llega, como dice Julio Cortázar, es como un rayo que te parte en la mitad de un patio. Si me he tomado mi tiempo es porque este es el momento correcto, es la persona correcta con la quiero continuar construyendo mi vida”, dice la parlamentaria con la seguridad de haber encontrado en Patrick a su complemento ideal.

La boda civil se hizo en Manabí porque para los dos esa provincia es especial y buscaban un lugar “neutral”, ya que ella es de Guayaquil y él de Quito. Fue un momento inolvidable, oficiado por el alcalde de Manta, Agustín Intriago. Llegaron amigos y familiares de varias ciudades del país y del exterior para celebrar su unión.

Después de ese fin de semana, Cristina y Patrick retomaron sus agitadas actividades profesionales. La luna de miel todavía tendrá que esperar. Aún no hay día ni un lugar escogido, aunque a la parlamentaria le gustaría que fuera en agosto.

Ese mes es especial para la pareja, ya que fue en agosto de 2021 cuando Patrick le pidió matrimonio, durante el festejo del cumpleaños de Cristina.

Ahora, también está en planes el enlace eclesiástico. Será en una pequeña capilla, en Quito, en una ceremonia muy íntima, adelanta Reyes. Aunque tampoco han definido cuándo se realizará, posiblemente sea en este mismo año. (I)