Kimberly Cedeño, Ángela Orellana, Juan del Valle y Joselyn Encalada pasaron a la final del reality de baile Soy el mejor (TC Televisión), mientras que Renier Izquierdo y Julián Campos quedaron eliminados, algo que los dos sospechaban de antemano y mencionaron en los minutos que tuvieron el micrófono después de presentarse.

El show, que tendrá un fin de temporada dividido entre el lunes 9 y el martes 10 de enero, no se dará un respiro, sino que arrancará con una nueva etapa el miércoles 11. Este viernes, la locutora Andrea Ortiz, la Fresa, se unió al elenco y aseguró que si vino desde Quito, fue para ganar. Su especialidad es el twerking, e hizo una demostración apenas llegar.

“Hola, jefe”, le dijo a Francisco Pinoargotti, con quien ha trabajado antes. Este aseguró que la Fresa será “un espectáculo”.  “¿Te vas a quedar callada?”, le preguntó Carlos Menéndez. “Nunca”, respondió la concursante, para regocijo del jurado.

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A pesar de ese alarde de libre expresión, en este episodio, dos de los concursantes trataron de reprimir sus comentarios (no lo lograron) y a otra la jueza Yadira Ramón le ordenó callarse.

Renier Izquierdo fue el primero. “No tengo nada que decir”, dijo, acompañado de la bailarina Antonella Moscoso, pero luego le  dedicó a ella su actuación, mientras se despedía del concurso, pues asumió que no pasaría a la final.

Fue elocuente en sus agradecimientos al público, coach, pareja de baile y familiares, y en sus disculpas por sus comportamientos en episodios anteriores. Izquierdo fue el reemplazo de Jorge Heredia, el anterior partner de Moscoso. Esta lloró al admitir que Heredia salió por equivocaciones de ella en la pista. “No soy de hacer polémica con el jurado ni con nadie, sin ganar, ya gané”.

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Los jueces resaltaron la actitud de Izquierdo a pesar de las dificultades en el desempeño, el haber resistido hasta el final de la coreografía en vez de desertar al primer error. “Estás en un proceso de crecimiento, puedes dar más”, le dijo Samantha Grey, el voto secreto de esta semifinal.

Francisco Pinoargotti alabó la coreografía y también el trabajo de Izquierdo. “No le debes nada a nadie (incluso si no te salieron las cargadas), has hecho un gran trabajo”.  Carlos Menéndez confirmó que la baja nota de Heredia se debió a Moscoso, y le pidió que no se rinda, pues en adelante seguirá haciéndole “la vida imposible”.

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Julián Campos recibió críticas mixtas. “Yo vi a alguien de más”, dijo Yadira Ramón, “sin autorización alguna, y esto es una desventaja para ustedes”, y por eso les quitó puntaje. Campos sufrió para encontrar palabras, y finalmente se quejó de que su equipo nunca estuvo completo para ensayar, pues no le dieron tiempo con los bailarines que necesitaba, hasta el mismo día de la presentación. “No puedo esperar que alguien resuelva, necesitaba cubrir esto”, así justificó haber invitado al set a un bailarín de su confianza, lo cual está prohibido.

“Las reglas son claras para todos”, le comunicó Angulo de parte de la producción. “Los equipos tienen que compartirse, no porque quieran perjudicarte, es parte de la competencia”. Pinoargotti reconoció el trabajo del competidor y la presentación en general, pero le recordó que debe respetar las reglas. “Me fui bailando, y mejor que algunos que se van a quedar”, sentenció Campos.

Su rival en el escenario, Ángela Orellana, se sumó a la queja de Campos. “Me duele la calificación (un 7 de Ramón) porque no me la merecía, eran las once y media de la noche y no teníamos a los bailarines”.

“Ángela, cierra la boca”, le ordenó Yadira Ramón. Carlos Menéndez trató de cambiar el ambiente alabando la energía de la coreografía, y en cambio, les otorgó un 10. “La ley es para todos”, sentenció Pinoargotti, y les restó un punto por no salir con todo el equipo asignado. Los presentadores, Angulo y Ronald Fariña, enfatizaron la importancia de cumplir las reglas, y en cuanto a los reclamos de los concursantes, solo repitieron que “así es la competencia”. (E)

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