“En la isla Isabela, en Galápagos, hay quienes están matando tortugas gigantes para luego consumir su carne. Inicié esta petición para que las autoridades actúen inmediatamente ante estos hechos atroces”, es el comentario de Jenny Lucas, quien empezó con una recolección de firmas en la plataforma Change.org para exigir que se encuentre a los culpables de las matanzas de tortugas que se habrían realizado en la isla del archipiélago entre 2021 y 2022.

En septiembre de 2021 guardaparques de la Unidad Técnica de Isabela (UTI), de la Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG), encontraron los restos de quince tortugas gigantes asesinadas en el sector de La Gorra, una zona rural al este del volcán Sierra Negra, a 16 kilómetros de Puerto Villamil. Estas muertes obedecerían al consumo clandestino de carne de tortuga gigante por parte de una minoría de la población isabeleña.

Al menos 19 tortugas gigantes fueron faenadas para consumo humano en Isabela, Galápagos, entre 2021 y 2022. Autoridades investigan denuncias

En tanto, ayer, 29 de agosto, la Fiscalía General del Estado anunció, vía Twitter, que abrió una investigación previa para indagar los hechos relacionados con la presunta caza y faenamiento de cuatro tortugas terrestres gigantes en el complejo de humedales ubicado también en Isabela.

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Según fuentes consultadas por EL UNIVERSO, que prefirieron omitir sus nombres, habría al menos siete denuncias oficiales sobre faenamiento de tortugas en Isabela. La carne de tortuga, para despistar a las autoridades, también es mezclada con carne de cerdo o de burro. El consumo de quelonios solo se estaría realizando en Isabela, en donde incluso se ofrece la carne a domicilio.

La población de tortugas de Isabela ahora suma un problema más, ya que ha sido afectada por la introducción de especies invasoras y el tráfico internacional. En 2018, más de cien tortugas terrestres bebés fueron robadas del centro de crianza Arnaldo Tupiza. (I)