Un equipo de investigadores navegó alrededor del archipiélago con el objetivo de obtener información actualizada sobre el estado poblacional y de salud de varias especies emblemáticas de las islas.

La expedición estuvo conformada por científicos de la Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG), la Universidad San Francisco de Quito (USFQ) y la Universidad Carolina del Norte en Chapel Hill (UNC) por medio del Galapagos Science Center (GSC).

Las islas Galápagos son famosas por su biodiversidad y han sido objeto de estudio científico desde la época de Charles Darwin en la década de 1830. Esta extraordinaria biodiversidad se debe a que se ubican en la convergencia de tres corrientes marinas que generan condiciones ecológicas únicas dentro y fuera del archipiélago, informa la USFQ.

Publicidad

Los resultados preliminares indican que el monitoreo oceanográfico determinó que el agua se encontró más fría que en años anteriores, con un rango de temperatura varios grados por debajo del promedio para la época del año en que se hizo la exploración, que fue en noviembre último.

Los resultados del censo poblacional de lobos marinos y finos mostraron un mayor número de crías en las islas San Cristóbal y Floreana, y en las islas Fernandina e Isabela, en su orden.

Además, el censo de iguanas marinas registró un total aproximado de 36.000 individuos, de los cuales se monitoreó el estado de salud de 70 ejemplares con resultados positivos.

Publicidad

Desde el 2014, la DPNG, USFQ y la Universidad Carolina del Norte en Chapel Hill (UNC), por medio del Galapagos Science Center (GSC), realizan conjuntamente un proyecto con el objetivo de navegar alrededor del archipiélago.

En el periplo se obtiene información actualizada sobre el estado poblacional y de salud de varias especies emblemáticas, como los lobos marinos, lobos finos, iguanas y tortugas marinas, además de evidenciar los efectos de la variabilidad climática dentro de la Reserva Marina de Galápagos (RMG).

Publicidad

“Durante los años 2020 y 2021, si bien el trabajo interinstitucional fue pausado a causa de la pandemia por COVID-19, la DPNG continuó con el monitoreo, generando información valiosa para el manejo y la conservación de las islas”, indica un boletín de la USFQ.

La exploración incluyó el uso de drones en el monitoreo de las especies. Foto: CORTESÍA ANDY TORRES

El trabajo cooperativo entre instituciones e investigadores permitió que a finales del 2022 se realice una nueva expedición de investigación y monitoreo científico, en la que se aplicaron las mismas metodologías que años anteriores, pero esta vez bajo condiciones climáticas relacionadas con La Niña.

“Este evento climático es opuesto a El Niño, es decir, el mar se enfría debido a una mayor cantidad de afloramientos y se especula que existe mayor productividad marina, aumentando la disponibilidad de alimento y brindando condiciones más favorables para varias especies. Con el agua fría, hay más nutrientes, por lo tanto, se espera ver una mayor productividad primaria, lo que a su vez lleva a un cambio en las especies de fitoplancton, de pequeñas a más grandes”, agrega Adrián Marchetti, investigador del GSC y profesor de UNC.

Estos cruceros de investigación y monitoreo científico se han realizado anualmente desde el 2014 hasta el 2019, obteniéndose importantes resultados sobre las adaptaciones que adquieren estas especies durante y después de periodos de calentamiento como El Niño. Este evento climático se caracteriza, en cambio, por generar un calentamiento en el océano que disminuye la productividad marina de la región, generando condiciones que conllevan a una menor disponibilidad de alimento para los consumidores marino/costeros.

Publicidad

“El evento El Niño hace que se genere un estrés alimentario en varias de las especies emblemáticas de la RMG, exponiéndolas a la mortalidad o cambios en su comportamiento ecológico”, afirma Diego Páez-Rosas, investigador del GSC y profesor de la USFQ.

Los científicos de la Dirección del Parque Nacional Galápagos, Universidad San Francisco de Quito (USFQ) y de la Universidad Carolina del Norte en Chapel Hill (UNC) recorrieron la reserva marina a bordo de la embarcación Sierra Negra. Foto: CORTESÍA KARINA VIVANCO

En noviembre del 2022, el equipo de doce investigadores de la USFQ, UNC y DPNG, junto con ocho tripulantes de la embarcación Sierra Negra, recorrieron durante 16 días un total de 14 islas y 30 sitios específicos, distribuidos alrededor de la RMG.

La finalidad de la investigación fue medir los numerosos parámetros oceanográficos, como temperatura, salinidad, concentración de nutrientes, productividad primaria y composición de la comunidad de plancton, que podrían ser impactados por las condiciones de La Niña.

Además, el monitoreo de las especies emblemáticas de Galápagos, incluyendo lobos marinos, lobos finos, iguanas y tortugas marinas, y la evaluación del impacto del plástico y el microplástico en el ambiente marino.

Esta información será utilizada por los investigadores y el equipo de la DPNG para comprender el estado de salud de varias de estas especies consideradas centinelas o bioindicadoras del ecosistema, con el fin de evaluar los efectos del cambio climático en los ecosistemas de Galápagos y potencialmente ayudar con la toma de decisiones sobre cómo preservar la reserva.

Cumplir con estos objetivos suele ser complicado, por lo que los científicos emplearon metodologías y técnicas innovadoras, como monitoreos poblacionales con ayuda de drones, señala el comunicado de la USFQ.

“Debido a que el acceso a las colonias reproductivas de estas especies es muy difícil y a veces imposible, la idea de cubrir estas áreas con sobrevuelos es una oportunidad para generar más información”, indica Jennifer Suárez Moncada, guardaparque de la DPNG.

Los científicos están analizando los datos obtenidos en sus laboratorios para crear información científica que será entregada a la DPNG y presentada al mundo en forma de artículos científicos que se espera sean publicados durante el 2023, señala la USFQ. (I)

La exploración incluyó especialistas de la Dirección del Parque Nacional Galápagos, Universidad San Francisco de Quito (USFQ) y de la Universidad Carolina del Norte en Chapel Hill (UNC). Foto: CORTESÍA ANDY TORRES