Creció rodeada de joyas. En sus manos, los cuarzos y piedras naturales se transforman en piezas exclusivas en las que convergen lujo, técnica e historias personales. A sus 37 años, Carolina Valencia ha construido una marca a través de su nombre, en la que presenta diseños juveniles, únicos, elegantes y versátiles.
“El diseño siempre ha estado en mi familia. Crecí rodeada de joyería, y al tener una podía estar en contacto con las piedras y técnicas”, detalla la guayaquileña.
Antes de especializarse en la joyería, también diseñó accesorios, zapatos, carteras y trajes de baño. Dueña de una cautivadora personalidad, Carolina relata historias en cada una de sus creaciones.
Publicidad
“La creatividad fluye cuando estoy en mi taller, con todos los materiales que voy a usar, y mi estado de ánimo”, refiere.
Herencia creativa
“A lo largo del tiempo he adquirido conocimientos de joyería gracias a mi mamá (Teresa Zambrano Fischer) y el trabajo familiar (con joyerías por más de 60 años). Estudié Diseño Industrial y de Interiores, en algunos institutos de la ciudad, pero me gradué con el tiempo y la experiencia”, indica Carolina, quien se dedica al diseño de joyas de forma profesional desde el 2014.
Hermana de la también diseñadora Teresa Valencia, afirma que la trayectoria que ella posee en la industria de la moda siempre ha sido un apoyo para el desarrollo de su carrera. “Ahora tenemos la suerte de poder seguir trabajando juntas y compartir creando colecciones”, señala.
Publicidad
Actualmente parte de los diseños de Teresa también se exhiben en el atelier de Carolina, ubicado en Arcos Plaza (torre 2B, quinto piso #523).
Ese soporte que la acompaña desde que decidió emprender en esta profesión ha logrado que conforme un equipo irreemplazable. “Mi familia y todos mis seres queridos aportan muchísimo para que yo pueda ser lo que soy”, agrega.
Publicidad
Su propio sello
Carolina describe sus primeros años de diseñadora como una etapa de autoexploración, en todo sentido, hasta que encontró la definición de su esencia.
“Me encantan las piedras semipreciosas y preciosas y lo que me hacen sentir. Y me definí en eso. En crear piezas únicas que puedan durar para toda la vida y que al usarlas sientas el poder de la energía”, sostiene sobre el proceso creativo de cada pieza.
Lujo versátil
Carolina trabaja con plata bañada en oro de 18 kilates, plata 925 y todo tipo de cuarzos y piedras naturales. Sus creaciones no las presenta como coseries o líneas, ya que prefiere desarrollarlas por temporadas. Por ello, ninguna de las joyas tiene similitud entre sí.
“Siempre las colecciones van por los colores de temporada. En esta última colección tengo un poco más de tonos verdes, azules como el lapislázuli y las turquesas”, detalla.
Publicidad
Arte en expansión
Según revela, trabaja en proyectos para que sus diseños lleguen a otros países. “El mundo está a nuestro alcance por medio de redes sociales y plataformas creadas para poder vender worldwide y estamos enfocados en eso. Así todos pueden tener a Carolina Valencia Jewelry”, sostiene. (I)
