Preste mucha atención a su alimentación si a usted le han informado que tiene riesgo de enfermedad renal o si desea prevenir la insuficiencia renal a temprana edad. Al saber que sus riñones están fallando, múltiples funciones se verán alteradas, se acumulan desechos en el organismo, se eleva la presión arterial, el cuerpo retiene excesos de líquidos y adicionalmente existe la posibilidad de que no pueda producir suficientes glóbulos rojos.

Es necesario que valoremos el rol que desempeñan nuestros riñones. Se sabe que mediante la filtración de la sangre estos eliminan las sustancias de desecho y reciclan aquellas que son necesarias. Por otra parte, se encargan del equilibrio ácido-base, forman parte de la regulación del calcio y el fósforo y producen hormonas como la responsable de la producción de los glóbulos rojos (eritropoyetina).

Es recomendable que al menos una vez al año supervise su función renal, por lo que en su próxima consulta médica de control recuerde preguntar sobre la salud de sus riñones para prevenir una falla renal; la cual en estadio inicial no presenta síntomas, de manera que hacerse un chequeo que incluya un análisis bioquímico puede ser la única manera de conocer si sus riñones están sanos y evitar la insuficiencia renal.

Publicidad

Sabía usted que tiene más probabilidades de desarrollar enfermedad renal si presenta:

  • Diabetes mellitus
  • Presión arterial elevada
  • Enfermedad cardíaca
  • Antecedentes familiares de enfermedad renal (padres o abuelos)

En caso de que ya presente alguna de las condiciones antes descritas, la mejor manera de proteger sus riñones es:

Mantener las cifras de glucemia en su objetivo control. Revisar su nivel de azúcar en sangre, siendo vital que no pase de 100 mg/dl en ayunas o 130 mg/dl en ayunas si ya presenta diabetes.

Publicidad

Mantener sus cifras de presión arterial cerca de su meta. La meta de presión arterial es menos de 120/80 mmHg y se esperan rangos hasta 140 mg/90 mmHg para el paciente hipertenso.

Controlar la dislipidemia. Mantener los triglicéridos por debajo de 150 mg/dl y colesterol en parámetros normales, sobre todo el LDL menor a 100 mg/dl y un HDL entre 50-70.

Publicidad

No debe automedicarse. Tenga cuidado con el uso regular de fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINES), tales como ibuprofeno y naproxeno, pues puede perjudicar gravemente a sus riñones.

Las decisiones que tome sobre qué comer y beber puede ayudarlo a lograr estas metas y mantener unos riñones saludables. Por eso, el asesoramiento nutricional es clave para alcanzar objetivos médicos. Recuerde que la nutrición acompaña todos los tratamientos médicos.

Cuando hablamos de nutrientes y alimentos que debemos evitar, nos referimos principalmente al exceso de sodio, el cual forma parte de la sal. Se encuentra también en comidas enlatadas, conservas, ultraprocesados y comida rápida, así como en la mayoría de condimentos artificiales. El sodio es necesario para ayudar a controlar la cantidad de líquido en el organismo. Sin embargo, el exceso causa presión arterial alta y falla renal.

El exceso de proteína también puede hacer que se acumulen residuos nitrogenados tóxicos en la sangre como urea y creatinina, lo que causa que los riñones trabajen más. Prefiera consumir las carnes magras libres de grasa dando prioridad a las carnes blancas como pollo, pavo, pescado de mar y limite las carnes rojas a máximo una vez a la semana (su total exclusión dependerá si tiene insuficiencia renal en estadios avanzados), sazonada con especias naturales o deshidratadas como tomillo, cilantro, romero, laurel, cebollín, para no abusar del contenido de sal.

Publicidad

La cantidad de proteína se calcula con base en los kilos de peso que posee la persona, en términos prácticos para facilitar la porción servida es viable tomar de referencia el tamaño de la palma de las manos. Controlar de igual forma el consumo de otros alimentos proteicos como los lácteos, huevos y granos, que al igual que las carnes rojas dependerá del grado de riesgo que tenga para establecer las porciones y la cantidad de días que están permitidos.

En caso de que usted padezca de insuficiencia renal con alteraciones en electrolitos, además debe restringir el consumo de alimentos ricos en fósforo y potasio. Existen técnicas al momento de cocinar, como remojar y doble cocción (hervir dos veces el alimento), que ayudan a reducir el potasio en los alimentos para evitar la hiperkalemia. Acuda para un mayor control con un nutricionista certificado en nutrición clínica o renal.

En este tipo de pacientes como lo hemos indicado, la alimentación dependerá de si su enfermedad está en etapa temprana o tardía o si se encuentra en tratamiento de diálisis. La máquina de diálisis es un equipo que se encarga de filtrar la sangre de la misma manera que lo hacen los riñones, sin embargo tiene sus riesgos y complicaciones; es un tratamiento en el que debe estar conectado a ella cuatro horas de su tiempo al menos tres veces por semana para eliminar los compuestos tóxicos de su cuerpo.

Para evitar una falla renal elija comer alimentos frescos, locales, de temporada, hechos en casa, ya que dependiendo de los lugares a los que frecuente la comida fuera de casa contiene mucho más sodio. Fíjese también al momento de hacer sus compras en el supermercado en las etiquetas nutricionales, apóyese visualmente en el semáforo nutricional.

Recuerde el consumo del agua natural, se recomiendan dos litros diarios en personas adultas; evitar el alcohol y el tabaco ayuda también a preservar la función renal.

Tips culinarios nutricionales

Para mejorar su función renal deberá reducir la cantidad de potasio en los alimentos de la siguiente forma: pelar-picar-remojar al menos ocho horas los tubérculos, como la papa, yuca, camote, zanahoria blanca, así como los plátanos y granos secos, si tiene la posibilidad de repetir el proceso cambiando el agua de remojo mucho mejor. Luego pasar por doble cocción: hervir y luego volver a hervir el alimento desechando el agua anterior.

En las verduras ricas en potasio, especialmente las hojas verdes, la doble cocción no deberá pasar los 3 minutos para evitar la pérdida de otras vitaminas. (I)

*M. Sc. Martha Belén Ortiz Celi, nutricionista clínica / chef en Gastronomía Nutricional. Miembro de la Asociación de Nutricionistas del Guayas. Contactos: @mbonutricion; telf.: 098-460-6790.