Los recursos que se conseguirán del Fondo Monetario Internacional (FMI) -unos $6500 millones-, de los cuales $4000 millones llegarían este año, servirán, entre otras cosas, para reactivación productiva, pagar ciertos atrasos y para incrementar en 400 000 los bonos del Gobierno para familias vulnerables. “No podría haber un mejor destino para estos recursos frescos”, dijo el presidente de la República, Lenín Moreno, ayer durante un evento protocolar para celebrar el cierre de la renegociación de la deuda externa.

En el mismo evento, el ministro de Economía y Finanzas, Richard Martínez, dijo que dichos recursos buscarán apoyar cuatro pilares fundamentales: salud, alimentación, dolarización y empleo.

De esta manera se va delineando el destino de los recursos que podrían llegar al país, pero que aún dependen de la aprobación que va a hacer el directorio del FMI a finales de septiembre. Martínez comentó que el directorio quiere ver no solo al Gobierno, sino a toda una nación unida y consciente de los desafíos que debe superar. El funcionario hizo un llamado a los actores políticos “a actuar con el pragmatismo y visión compartida que hoy demandan las circunstancias”.

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Esta declaración se dio en medio de pedidos de juicio político en su contra que vienen desde la Asamblea Nacional. También aprovechó para dar su respaldo a la ministra de Gobierno, María Paula Romo, luego de que el CAL aprobara su juicio político ayer mismo.

En todo caso, el lunes también el presidente del IESS, Jorge Wated, reveló que al menos $400 millones serían entregados al IESS, de acuerdo con las conversaciones que ha mantenido con el ministro de Economía. Al IESS, el Gobierno le debe prácticamente $1000 millones por la contribución del 40 % a las pensiones. Y un rubro aún no determinado oficialmente, pero que ascendería a más de $3000 millones de la deuda de salud. Sobre este último punto, Wated también comentó que ha hecho la propuesta para que el Centro de Alto Rendimiento de Durán sea transferido al IESS, como una parte pequeña de pago de la deuda de salud. Este serviría para hacer un centro de rehabilitación en contra de la drogadicción y el alcoholismo.

Entre tanto, en el evento de celebración por la renegociación de deuda participaron de manera telemática varias personalidades que felicitaron al país. Entre ellos Alejandro Werner, director del Departamento del Hemisferio Occidental para el Fondo Monetario Internacional; Carlos Felipe Jaramillo, representante del Banco Mundial; y Osmel Manzano, del BID; Luis Carranza de la CAF, el exvicepresidente Alberto Dahik; los exministros Mauricio Pozo, Fausto Ortiz, entre otros.

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Durante la ceremonia, el ministro Richard Martínez firmó un documento protocolar de agradecimiento a los tenedores de bonos por haber depositado la confianza en la propuesta de restructuración de deuda del país.

Por su parte, Alejandro Werner, del FMI, tras dar las condolencias al país por las muertes generadas por la pandemia, dijo que ese organismo está dispuesto a apoyar al Ecuador en construir un futuro más próspero. Recordó que el FMI aprobó $643 millones para la emergencia sanitaria y que la semana pasada se llegó al acuerdo técnico por un financiamiento excepcional por $6500 millones para los próximos 27 meses, que será analizado por el directorio. (I)