El Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) descartó la construcción de una nueva variante de la vía Quito-Lago Agrio, en el tramo de El Reventador, que se ha visto afectado por la erosión regresiva del río Coca y sus afluentes (Quijos y Piedra Fina). Ahora se analiza construir una nueva vía de 19 kilómetros con cinco puentes en la ruta. La decisión se tomó luego de comprobar que una tercera variante se volvía inejecutable. Así lo explicó Carolina Ormaza, viceministra de Infraestructura del Transporte y Obras Públicas.