Las remesas de los ecuatorianos residentes en el exterior alcanzaron un monto récord de $ 5.447 millones (equivalentes al 4,6 % del PIB), en 2023. Esto significa casi un 15 % más que en 2022. Si bien el crecimiento de las remesas es un fenómeno regional, las que llegan al Ecuador crecen más que el promedio regional.

Según estimaciones preliminares del Banco Mundial, en 2023 las remesas que llegaron a América Latina sumaron $ 156.000 millones, es decir, 8 % más que en 2021.

De manera paralela, el Banco Central del Ecuador también reportó que la Inversión Extranjera Directa (IED) fue la más baja desde el 2016. Apenas se registró una IED de $ 372 millones, equivalentes a tan solo el 0,3 % del PIB.

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En los últimos años, la IED que se había ubicado en alrededor del 1 % del PIB; mientras que en países como Chile, Colombia o Perú, este indicador solía representar entre el 3 % y el 5 % del producto interno bruto.

De esta manera se presenta una relación entre IED y remesas contraria a lo que sería deseable, pues una economía que atraiga a la inversión privada (externa y también local) y que, en consecuencia, genere muchos puestos de trabajo, hace que los ciudadanos tengan menos incentivos para salir del país y ayudar a sus familias desde el exterior. Así lo analiza la Corporación de Estudios para el Desarrollo (Cordes) en un reciente informe sobre la situación económica del país.

De acuerdo con Cordes, el crecimiento de las remesas puede ser una noticia positiva, sin embargo, detrás de esos envíos de dinero desde el exterior está una economía que no brinda suficientes oportunidades a sus ciudadanos, lo que ocasiona rupturas familiares y salida de capital humano.

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Crecimiento de Ecuador en el 2023

De otro lado, según sus cifras preliminares, el Banco Central del Ecuador informó que en 2023 la economía ecuatoriana creció 2,4 % frente a 2022. Este resultado refleja un deterioro a lo largo del año, pues el PIB en el primer trimestre había registrado un crecimiento de 4,9 %, pero hacia el cuarto trimestre se registró más bien una contracción de 1,2 % en el último, siempre en términos interanuales.

  • Dentro del PIB, el consumo de los hogares tuvo un comportamiento similar, pues registró resultados positivos en los dos primeros trimestres de 2023, pero caídas en los dos últimos; en el año completo el consumo de los hogares creció apenas 1,4 %.
  • El consumo público, por su parte, creció 3,7 % en 2023, pero su desempeño también muestra una marcada desaceleración. Lo mismo ocurrió con las exportaciones (de bienes y servicios, medidas en volumen), que en el primer trimestre del año crecieron 9,5 %, pero en el último se contrajeron 7,5 %.
  • Así, en el año completo las ventas al exterior crecieron a una tasa similar a la de la economía en su conjunto: 2,3 %.
  • Por el contrario, las importaciones, si bien registran una caída de 0,9 % en todo 2023, mostraron un notable repunte en el último trimestre del año, cuando crecieron 16,2 %, mientras que en los tres trimestres anteriores habían registrado resultados interanuales negativos. (I)