La Agencia Metropolitana de Control (AMC), en colaboración con la Unidad de Bienestar Animal (UBA), ha impuesto una multa de $ 4.600 a Luis I. por apuñalar en el estómago a Kayli, una perra de 3 años, en el sector de Llano Chico, en el norte de Quito.
Según las cámaras de seguridad del lugar, Luis I. ingresó al patio del domicilio donde arrendaba y se encontró con cuatro perros, que se alejaron asustados.
Portando un arma blanca, el ciudadano arremetió contra los animales, acorraló a Kayli, una perra de raza similar a la akita, y la apuñaló repetidamente en el estómago.
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El tutor de los caninos, alertado por el llanto de Kayli, salió de la vivienda y, al ver al animal gravemente herido, detuvo a Luis I. y lo entregó a la Policía Nacional.
Kayli fue llevada de urgencia a una clínica veterinaria privada, donde se le realizó una cirugía de tres horas para tratar la herida en la zona abdominal, que había comprometido varios órganos, incluyendo la perforación del colon.
Debido a la gravedad de las lesiones y el mal pronóstico, los especialistas decidieron aplicar la eutanasia para proporcionar una muerte digna a Kayli.
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De acuerdo con la normativa municipal, la provocación intencional de daño o sufrimiento a los animales se considera una infracción muy grave, sancionada con diez remuneraciones básicas. En este caso, la multa fue de $ 4.600.
Las entidades encargadas del control y cuidado de los animales informaron que enfocan su trabajo en las cinco libertades de la fauna urbana:
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- Libre de hambre y sed
- Libre de incomodidades
- Libre de dolor, lesiones y enfermedades
- Libre de miedo y angustia
- Libre para expresar su comportamiento natural
Autoridades instaron a los ciudadanos a denunciar casos de maltrato animal a través de los canales oficiales de la Unidad de Bienestar Animal. (I)
