La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) expresaron su preocupación ante el incremento de migración en la selva de Darién, entre Panamá y Colombia.
En un comunicado en conjunto detallaron que de acuerdo con cifras de las autoridades de Panamá, más de 100.000 personas cruzaron el Darién, lo cual representa seis veces más del mismo periodo del año anterior (enero, febrero y marzo). Se estima que si continúa así se cerrará con más de 400.000 migrantes que crucen por la selva.
De acuerdo con cifras del Servicio Nacional de Migración (SNM), en el 2022, hubo la presencia en ese punto de 248.284 migrantes. En lo que corresponde al periodo entre enero y marzo, tan solo 376 ecuatorianos tomaron esa ruta, el listado en esos meses lo lideraba Venezuela, Haití y Cuba.
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Las cifras actuales de estos tres meses reflejan que las principales nacionalidades son venezolana (30.250), haitiana (23.640) y ecuatoriana (14.327). También hay personas procedentes de China (3,855), India (2,543), y los hijos de personas haitianas nacidos en Chile (2.499) y Brasil (2.072).
“Los peligros y niveles de violencia a los que se enfrentan las personas que cruzan el Darién son altamente preocupantes... Es urgente trabajar en una solución regional basada en la protección para responder a esta crisis humanitaria sin precedentes en las Americas”, dijo Philippa Candler, representante de la Oficina Multipaís del ACNUR en Panamá..
Falta de empleo, aspectos económicos e inseguridad son varios de los aspectos que genera la migración. “Más de la mitad de las personas también señalan haber huido de sus países debido a los niveles generales de inseguridad o amenazas, así como ataques específicos contra ellos y sus familiares.”, se explicó.
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Las organizaciones revelaron que las tres cuartas partes de las personas habían sufrido un accidente o lesión en el viaje e igual cantidad algún tipo de maltrato o abuso. (I)
