Un padre confiesa a su hija que estuvo fugitivo cinco décadas después de robar un banco y cambiar de identidad

Como en una telenovela, un hombre en su lecho de muerte le reveló a su hija una gran verdad. El oscuro secreto que por 50 años ocultó no quiso llevárselo a la tumba y lo confesó a su hija.

-No me llamo Thomas Randele, sino Theodore Conrad, le dijo.

-Cuando tenía 20 años robé en un banco de Ohio.

Dos inesperadas “bombas” detonaron en minutos en los oídos de Ashley Randele.

El padre, a la espera de un tratamiento de quimioterapia en Boston, le suplicó que no buscara nada. Creyó que su hija dejaría el pasado quieto, pero Ashley no pudo. Por más que trató de dormir esa noche, le resultó imposible conciliar el sueño, publicó CNN en Español el domingo 3 de octubre de 2023.

-‘Oh Dios mío, este es mi padre’, dijo sorprendida al googlear ese secreto de su padre y corroborar que lo dicho era verdad.

La mujer, señaló CNN, vio que en el buscador “había cientos y cientos de artículos sobre él”. La verdad le estalló en la cara a Ashley en marzo de 2021.

Ashley Randele le hizo saber a su padre que conservaría su apellido después de casarse para que no muriera con él. “Por un momento pensé en cambiármelo”, publicó CNN.

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El robo al banco de Cleveland

Conrad, el apellido de su padre y que tanto ocultó, perpetró el robo el viernes 11 de julio de 1969. Estaba en vísperas de su cumpleaños.

El entonces joven fue a su trabajo como como cajero en el Society National Bank de Cleveland. A la hora del descanso, narró CNN, compró cigarrillos y una botella de whisky.

Antes de retirarse de su jornada laboral ocurrió lo que nunca hubiera imaginado la hija: “entró en la bóveda, metió US$ 215.000 en una bolsa de papel y se marchó”.

Nadie supo más de Theodore Conrad y fue el lunes siguiente cuando en el banco se percataron del robo. Desde ese entonces, el hombre quedó fichado como ladrón en Cleveland. Nunca lo atraparon.

Nueva vida como fugitivo

Como Thomas Randele se le conocía en en Lynnfield, Massachusetts. Formó familia y trabajaba en ventas de automóviles.

Las autoridades no olvidaban lo que sus amigos declararon: “Conrad estaba obsesionado con ‘El caso Thomas Crown’, la película de Steve McQueen de 1968 sobre un apuesto hombre de negocios millonario que roba un banco de Boston por diversión.

En Massachusetts pudo pasar inadvertido. Su hija asombrada dice ahora que tras más de 40 años de convivencia es que cae en cuenta de unos detalles. Antes, no le generaron dudas.

CNN en Español reseñó el fin de semana pasado que “en un giro irónico, también hacía donaciones a organizaciones benéficas de la policía local” y, de acuerdo con su hija, se pasaba horas viendo “NCIS” y otras series policíacas”.

La fascinación del filme sobre Thomas Crown hace pensar a Ashley que dio pie a su padre a adoptarlo como nombre en su nueva vida.

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Pequeños detalles

La hija entiende ahora por qué su papá se rechazo viajar a Europa con ella y su madre. El nombre era falso, por eso no contaba con pasaporte, explica el medio estadounidense.

También ató cabos del porqué llevaba espesa barba si de joven no lucía así. Además, poco se quitaba en público sus gorras de béisbol.

Tantas cosas interesantes que ver en Estados Unidos. No necesito salir del país.

Padre de Ashley Randele

Sin embargo, la mujer siente que “su padre no vivía exactamente como si estuviera escondido. La llevaba a la escuela todos los días. A veces, dijo, él la acompañaba a sus viajes escolares”.

El progenitor falleció dos meses después de tan dramática confesión. Tenía 71 años y cáncer de pulmón.

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La Policía se enteró finalmente

La viuda y la hija hicieron un pacto, narró a CNN. No revelarían la verdad sino hasta cumplir un año de duelo. Pero, informó la cadena informativa, la Policía les tocó la puerta en noviembre de 2021.

¿Cómo se enteraron? “Alguien había enviado su obituario a un reportero de crímenes en Ohio con una nota que decía que el hombre fallecido probablemente era Conrad”, explicó Ashley Randele.

Ni ella ni su madre enfrentaron cargos por el silencio sobre la vida oculta del aquel ladrón de bancos, señala la cadena estadounidense.

Cuando Conrad huyó, luego del robo bancario, “envió dos cartas a su entonces novia --desde Washington D.C. y Los Ángeles-- en las que le decía cuánto la quería y la echaba de menos. Desde entonces el caso se enfrió”.

Cinco décadas después su hija da a conocer esta historia, a través de CNN y podcast. Así como a su padre le atrajo la película “El caso Thomas Crown”, la vida que a él le tocó llevar tiene todos los elementos para una serie o filme de corte policial.

-“Lo primero que mamá y yo le dijimos a papá fue: ‘Te queremos mucho’. Y descubrir esto no cambia que te amamos. Pero necesitamos hablar de ello”. Quizás fue lo mejor al final de la vida del fugitivo. Por algo dicen que la verdad sana y libera.

(I)

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