Una hora antes del anuncio de la Fiscalía en el que solicita fecha y hora para la audiencia de formulación de cargos contra Danilo Carrera, el cuñado del presidente Guillermo Lasso, y otros seis sospechosos de delincuencia organizada dentro del denominado caso Encuentro, los periodistas Andersson Boscán y Mónica Velásquez, su esposa, difundieron en redes sociales que habían regresado a Ecuador.

A las 08:24 de este miércoles, 25 de octubre, Boscán publicó en su cuenta de X (antes Twitter) una fotografía en la que se muestra junto con Velásquez delante de un vehículo de custodia, los dos portando chaleco antibalas.

“Recién llegados. Con jet lag, pero bien”, dijo Boscán a EL UNIVERSO por contacto telefónico desde Quito, donde aseguró que permanecerán él, Velásquez y toda su familia.

Según reveló el comunicador, el presidente electo de la República, Daniel Noboa, era una de las pocas personas a las que les hizo saber que iban a volver al país después de que se desarrolló la segunda vuelta, el pasado 15 de octubre.

Respecto del anuncio de la Fiscalía sobre el caso Encuentro, que fue investigado y revelado por La Posta, Boscán indicó que estaban enterados de que “se habían encontrado algunas cosas importantes en la investigación antes de las elecciones”. Pero “no sabíamos que se iba a producir en estos días, mucho menos el mismo día que nosotros volvíamos”, agregó.

“Lo tomamos como una señal divina de que las cosas pueden funcionar, de que la verdad al final se puede imponer, porque no es usual que la justicia en Ecuador vaya a tocar a la gente poderosa (...). Y el hombre más cercano al presidente de la República (Guillermo Lasso) está por ser llevado a un proceso judicial”, valoró.

A pesar del cansancio por el viaje de retorno, desde Asia, Boscán apareció de manera sorpresiva esta mañana en el set de La Posta, donde volvió conducir el programa Café La Posta de manera presencial tras varios meses fuera del país por amenazas a su seguridad personal y familiar.

“Decidimos que valía la pena volver a intentarlo y correr el riesgo, y es público una gran carga política de las amenazas en nuestra contra, por lo que el cambio de autoridades, que está a pocas semanas de producirse, nos abría la esperanza de que las cosas se tranquilizarán al menos en ese sentido. No hay un lugar más seguro para nosotros que estar fuera del Ecuador, pero no hay un lugar en el que queramos más estar que en el Ecuador”, dijo.

En julio de este año los comunicadores anunciaron que salieron del país por “preocupantes amenazas a su seguridad personal y familiar”. La decisión se tomó tras una evaluación de los hechos, la confrontación de distintas fuentes y la sugerencia de representantes internacionales de seguridad.

El retorno al país de la pareja, sin embargo, implica “duplicar o triplicar” la custodia que reciben y un cambio en la rutina familiar y laboral. Han considerado realizar apariciones presenciales esporádicas en el estudio de La Posta o hacerlo por vía telemática para proseguir en el ejercicio de la profesión.

Boscán señaló que entiende que no han cambiado las condiciones de seguridad que determinaron su salida y la de su esposa del país frente a amenazas de atentar contra su integridad. Más bien, asegura que las condiciones de riesgo se mantienen porque hasta ahora no se han anunciado las investigaciones en Fiscalía para determinar la procedencia y autoría de las amenazas, y porque considera que la protección del Estado “sigue siendo casi nula e insuficiente”.

Cuestionó que su núcleo familiar no se encuentra protegido, tampoco su socio de La Posta, el periodista Luis Eduardo Vivanco, ni las oficinas del medio de comunicación.

Esperanza con el cambio de Gobierno

Boscán expresó que mira como un reto volver a hacer su programa de manera presencial en el set de La Posta, en Quito, y tener que cambiar las distintas rutinas que tenía como periodista y padre de familia, por ejemplo, el traslado de sus hijos hasta la escuela.

Pero opinó que el nuevo Gobierno puede ser para los ecuatorianos “un cambio para bien para el país”.

El comunicador dijo que ha mantenido contacto con el mandatario electo antes y después de su elección.

Aseguró que le comunicó directamente a Noboa, después de la segunda vuelta electoral, que volvían al país.

“Sin que esto me involucre para nada políticamente con él, tengo expectativas altas de que pueda devolverle la serenidad al país. No hablo de mi caso particular, lo mío es algo más complicado, lo mío es uno más entre los casos catastróficos en los que está sumido el Ecuador”. (I)