La conversación está llena de cálculos. El excontralor general del Estado Carlos Pólit Faggioni mostraba su preocupación, pues sobre él y su hijo John pesaba una sentencia de seis años de cárcel por concusión, dentro del caso Odebrecht, en Ecuador. Su interlocutor, el empresario de seguros Diego Sánchez Silva, le daba alternativas para echar abajo esa pena.

El diálogo giró alrededor del entonces contralor subrogante, Pablo Celi De la Torre, el sucesor de Pólit. Ambos interlocutores creían que él tenía el poder suficiente para convencer a los jueces de que revocaran la sentencia, sobre todo la que condenaba a John.

Transcurría el año 2020. Sánchez grabó clandestinamente esa conversación, pues estaba colaborando con las autoridades estadounidenses que investigaban a Carlos Pólit en secreto.

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En ese diálogo, Sánchez contó a su amigo que ya se había reunido con Celi para pedirle ayuda y que este le dijo que, sin que nadie se lo solicitara, ya había hablado con los jueces que llevaban el caso, abogando a favor de Pólit. Sin embargo, el empresario se mostraba inconforme, pues no veía ningún resultado favorable. “Él sí puede hacer mucho más”, se quejaba, pero no sabía cómo presionar a Celi.

Sánchez y Pólit barajaron ideas. El primero propuso amenazarlo con revelar a las autoridades algún hecho que lo comprometiera. Insistió varias veces. Al parecer, buscaba información contra Celi.

Celi afirmó a EL UNIVERSO que no ha mantenido comunicación con Pólit, ni directamente ni a través de ninguna persona. “Es inverosímil que yo haya intervenido en los asuntos del excontralor si fue pública mi confrontación con él cuando intentó, con personas de su confianza, impedir que yo asuma como contralor, como lo establece la norma legal”, escribió en un correo electrónico.

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Agregó que, como contralor subrogante, no intervino en otras funciones del Estado y que no habló con ningún juez sobre el caso de John Pólit.

Ahora, Celi enfrenta una condena de 13 años y 4 meses por el delito de delincuencia organizada, en el caso Las Torres, y mantiene arresto domiciliario. La sentencia no está ejecutoriada.

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Los planes de Carlos Pólit y Diego Sánchez

La grabación clandestina inicia con la voz de un agente estadounidense. “Es el 15 de octubre de 2020. Son las 12:53. Esta será una reunión controlada entre la Fuente de Información y Carlos Pólit. Caso número MI02PR19MI0008″. La fuente de información era Sánchez. A él le pusieron micrófonos para grabar el diálogo.

La transcripción registra que Sánchez y Pólit se encontraron en el lobby de un edificio y que salieron a pasear por Miami Beach en el auto del empresario. La conversación se dio dentro del vehículo.

Tres semanas antes, un tribunal de la Corte Nacional de Justicia había desechado la apelación a la sentencia que pesaba contra Pólit y su hijo. La condena contra ambos había sido confirmada, pero aún quedaba una última instancia, la casación.

Miami (9 de abril de 2024). El excontralor Carlos Pólit Faggioni dejó la Corte del Distrito Sur de Florida, cerca del mediodía, en un receso del juicio que enfrenta. Foto: Marcos Medina Foto: Marcos Medina

El excontralor defendía su inocencia y la de su hijo ante Sánchez. “No tienen nada, Diego. No tienen nada. No tienen un puta dólar que me hayan encontrado. Y a mi hijo peor, porque mi hijo, todo lo que tiene, lo tiene declarado. Y ha pasado auditorías de SRI”, decía. Según él, todo fue una persecución del exfiscal general Carlos Baca Mancheno.

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Sánchez le contó que ya se había reunido con Celi y que le había dado este mensaje: “Carlos me dice que te ha conocido toda la vida, la familia de toda la vida, le conoce a tus guaguas. Tú les conoces a los guaguas de Carlitos. (...), quieren meter al John en algo que Carlos dice que no tiene nada que ver. Tú eres una persona ahorita muy muy poderosa y le puedes ayudar”.

Según Sánchez, esta fue la respuesta de Celi: “Verás, sin que él me pida así directamente como lo está haciendo ahorita, yo le he estado ayudando. (...) He hablado con los jueces. (...) He hablado bien arriba. (...) Y he hablado con las personas a cargo del tema. (...) Yo he hablado con ellos. Todos me dicen que sí, que sí van a ayudar, pero al final del día no veo que ayuden. (...) Pero más aún ahora que tú me has venido a decir esto, a pedido explícito de Carlos, dile que yo voy a hacer todo lo que esté a mi alcance”.

Sánchez agregó que, días después, llamó a Celi y que esta fue su nueva respuesta: “A ver, dile por favor que he vuelto a hablar, que he vuelto a insistir, pero que les veo no muy abiertos”.

De acuerdo con Sánchez, a esta contestación, le siguió este diálogo: “(Le digo:) ‘Carlos no ha abierto la boca y no ha dicho nada en contra tuya’. Y él me dice: ‘Así es. Y yo también le quiero mucho y yo no quiero pelearme con (él). No quiero tener problemas con (él)’. Le digo: ‘¡Qué bueno, hermano! Porque qué bueno que tú no quieras problemas con Carlitos’. (...) Y se quedó callado”.

Durante su narración, Sánchez mostró su inconformidad pues, según él, Celi no hacía lo suficiente. Al terminar la historia, sugirió: “¿Y si le presionamos más a Pablo?”.

El empresario Diego Sánchez Silva dio una entrevista a Teleamazonas en julio de 2018, para desmentir acusaciones en su contra con respecto a contratos de Seguros Sucre.

En ese punto, Pólit recordó el enredo legal que antecedió a la designación de Celi como titular de la Contraloría. Pólit había salido del país en mayo de 2017, huyendo de la justicia ecuatoriana por el caso Odebrecht. Semanas después, desde Miami, envió una carta de renuncia dirigida la Asamblea Nacional, algo que, desde la perspectiva de Pólit, no tiene asidero legal pues la renuncia debió enviarse al Consejo de Participación Ciudadana y Control Social. Según él, esto deslegitimó la designación de Celi.

Pólit sugirió a Sánchez usar esto para presionar a Celi. Le dijo: “Yo puedo, cuando él termine, presentar un montón de cosas, no solamente allá, (sino) internacionalmente. Yo me comprometo a no hacer nada, hermano”.

El empresario le dio otra alternativa, mencionar a Celi un tema puntual que Pólit no haya revelado. Este respondió: “Uh, hay montones pero no quisiera ni siquiera nombrar uno porque tendría que acordarme de uno. Hermano, ya se quemó esa Contraloría. No hay ni papeles”. Pólit se refería al incendio de la oficina matriz de la Contraloría, ocurrido un año antes, en la protestas de octubre de 2019.

Sánchez siguió insistiendo, buscando un tema que comprometiera a Celi. Pólit le preguntó por su relación con Esteban Celi, hermano de Pablo. Sánchez dijo que él había sido su abogado y que mantenían buenas relaciones. Incluso mencionó que en la oficina de este se dio la reunión con Pablo.

Al instante, reiteró su idea: “Puedo decirle (a Esteban): oye, dile a Pablo que ayude (...), al fin y al cabo, hermano, Carlos también está defendiendo a su hijo John. (...). O sea, y la manera como ustedes se pueden librar de una persona que, entiendo yo, sabe muchas cosas de Pablo, puta, es realmente ayudándole. Solo imagínate que te saque esta cosa, la que sea, van a estar realmente complicados”.

Y agregó: “Ahí yo creo que Esteban va a decirle a Pablo, puta, hermano, realmente ayúdale porque si no le ayudas esto va a ser el problema”.

Pólit respondió: “O sea, yo, mira, lo que más me ha mandado la gente de la Contraloría, no tienes idea. Casi yo te diría que casi todo lo tengo yo”. Y agregó: “Eh, un hecho, puta madre, tengo puntuales en montones”. En otra parte del diálogo dijo: “Yo tengo una persona cerquita de él (de Celi), que me ha dado cosas”.

Sin embargo, nuevamente, Pólit descartó la idea: “Ese no es. Yo, o sea, es como mandarle, cómo te digo, es como una amenaza mandarle a decir”.

Dicho esto, Pólit le pidió que llamara a Celi por WhatsApp para hablar directamente con él en altavoz. La transcripción registra que Sánchez marcó varias veces, sin respuesta, y que mandó mensajes que no llegaban al destinatario.

Incluso llamó a un contacto, que le dijo que Celi estaba en una conferencia por Zoom y que tenía su teléfono apagado. Si esas llamadas fueron reales, Celi nunca les contestó el teléfono.

Al final, la sentencia contra John Pólit fue revocada en última instancia, la de casación, en marzo de 2021. No así la pena contra Carlos Pólit, que fue confirmada y ejecutoriada. Aparte, este tiene pendiente un juicio en Ecuador por presunta asociación ilícita, que se encuentra suspendido pues este delito no puede ser tratado en ausencia del procesado.

En Estados Unidos, el excontralor fue hallado culpable el pasado 23 de abril por haber lavado sobornos en ese país. La pena se conocerá el próximo 18 de julio. Los fiscales estadounidenses presentaron esta grabación como prueba, durante el juicio.

Esa tarde de octubre de 2020, Sánchez y Pólit pasearon por Miami. La grabación duró un poco más de dos horas. Al final, Sánchez dejó a su amigo en el mismo lugar donde lo recogió. “Hecho, Carlitos, saludos en casa”, le dijo al despedirse y, de inmediato, fue a entregar la grabación al agente. (I)