El presidente de la República de los Estados Unidos de México, Andrés López Obrador, reiteró su postura para que el Ecuador sea sancionado con la suspensión de su participación en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), si no reconoce que violó su soberanía y el derecho internacional con la irrupción a su embajada en Quito el 5 de abril; pero, además, exige “hacer valer” el derecho de asilo que le otorgó su país a Jorge Glas Espinel, exvicepresidente de la República, procesado y sentenciado por casos de corrupción.

En su conversatorio “Mañanero” con representantes de medios de comunicación de este 12 de abril de 2024, López Obrador expresó su coincidencia con el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, António Guterres, respecto de que una eventual suspensión de Ecuador como Estado miembro depende de los demás países que la componen.

El jueves último, México ingresó una denuncia en contra del Estado ecuatoriano en la Corte Internacional de Justicia de la ONU (CIJ-ONU) por transgredir la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y, simultáneamente, solicitó que se dicten medidas provisionales hasta que se resuelva el fondo de la causa.

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López insistió en que el pedido es que «se suspenda de las Naciones Unidas a Ecuador» —en tanto— «no se pronuncien y reconozcan que violaron el derecho internacional y nuestra soberanía. Eso es lo que nosotros queremos», subrayó.

Además, que ofrezca una disculpa y el compromiso de no repetición. «También, lo que queremos es que se convierta en doctrina la decisión de las Naciones Unidas de expulsar a cualquier Estado miembro que viole el derecho internacional y que viole la soberanía de los países y embajadas».

Respecto del asilo diplomático que se dio a Jorge Glas, exvicepresidente en la administración de Rafael Correa, López señaló: «Pero no es que nos envían como lo estábamos solicitando en calidad de asilado al vicepresidente y ya lo otro se olvidó. ¡No! Lo que queremos es que haya no repetición. Tiene derecho al asilo el vicepresidente y hay que hacer valer el derecho de asilo, son las dos cosas», que exige su gobierno.

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El mandatario se mostró satisfecho de que los Estados Unidos hayan tenido un pronunciamiento que condene a Ecuador. Aunque para eso —relató— tuvo que hablar con el embajador y entregarle el fragmento del video de cómo fue la incursión a su sede en Quito para que este, a su vez, se lo dé personalmente a su homólogo norteamericano, Joe Biden Jr.

De igual manera agradeció a Canadá por modificar su postura y emitir una “condena más enérgica”. “Qué bueno que modificó su postura el Gobierno de Canadá porque, inicialmente, igual que el Gobierno de Estados Unidos (fue ambiguo), nada más que todavía estuvo peor el primer comunicado de Canadá que el de Estados Unidos”, indicó el mandatario.

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El conflicto diplomático entre los Gobiernos de Ecuador y Estados Unidos tuvo origen el 5 de abril pasado, cuando Daniel Noboa Azín ordenó un operativo policial que ingresó a la representación diplomática de México en la ciudad capital para detener al exvicepresidente de la República Jorge Glas Espinel, para cumplir con órdenes judiciales de captura, ya que es procesado y sentenciado por hechos de corrupción.

Sin embargo, México le concedió el asilo político el 4 de abril de 2024, al considerarlo un perseguido. (I)