La violencia política durante la campaña electoral, fenómeno complejo y multifacético, está presente en estos comicios electorales anticipados, sin distinción de género, y toma mayor fuerza en las redes sociales, cuyo objetivo es desprestigiar, intimidar e influir en los resultados.

La violencia política en las campañas representa una amenaza a la democracia y puede contribuir a la estabilidad política del país, pero no existe organismo que regule y sancione este tipo de prácticas, excepto cuando se presentan denuncias por escrito ante el Tribunal Contencioso Electoral (TCE). Hasta el momento en el organismo no existe una sola denuncia sobre violencia política relacionada a los comicios anticipados.

La Corporación Participación Ciudadana monitorea en la red social Twitter sobre violencia política contra los candidatos presidenciales y los aspirantes a asambleístas.

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El informe de monitoreo de la primera semana de campaña presidencial detectó 57 mensajes de Twitter con contenido discriminatorio, pero se muestra un continuo incremento de esta práctica.

Un segundo reporte entre el 13 y 23 de julio determina que los candidatos fueron víctimas de manifestación violenta a través de memes, imágenes, expresiones y frases en la red social. En esa semana se contabilizaron 167 tuits con 60 expresiones con contenido discriminatorio y 51 frases discriminatorias o despectivas.

¿Qué expresiones violentas se difunden?

El monitoreo de Participación Ciudadana detectó mensajes discriminatorios referentes a la apariencia de los candidatos, rol de género, rol de candidato, cosificación de la mujer, desvalorización del rol de la mujer, memes, etnia y clase social.

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Pero entre la primera y segunda semana se registró que el número de actores violentados fueron más hombres que mujeres. Hubo nueve hombres que recibieron hasta 60 mensajes violentos, mientras que las mujeres fueron las actoras agredidas que recibieron hasta 50 tuits violentos.

Las expresiones y frases más utilizadas en contra de los candidatos hombres tienen relación con hp, lelo, cachetón, hpta, mmvrg, longo, tonto, viejo, bobo, débil, estúpido, feo, manipulable, marihuanero, marihuano, miserable, negro, pelasable, pendejo, rocoto, sátrapa, sumiso, tetón, trompudo, fumón, imbécil, inepto, maldito, falso indígena, aniñado cara de cholo, cara de pendejo, cara de retardado, entre otras.

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Estas expresiones y frases difundidas en redes sociales, según el monitoreo de Participación Ciudadana, para ser consideradas violencia de género o violencia política son analizadas en el contexto en el cual son expresadas o proferidas.

Las expresiones y frases usadas contra las candidatas mujeres son moza, vieja, mamalucha, mojigata, bruja, fea, sumisa, zorra, amante, analfabeta, aparecida, boba, campesina, tonta útil, carishina, descerebrada, desquiciada, fierina, gorda, muñeca inflable, nalga de tablón, inútil, limitadita, luchona, perra, psicópata, sátrapa, títere. De estas expresiones de carácter violento, ocho registran un total de 34 repeticiones usadas dos o más veces.

Desde que inició oficialmente la campaña electoral de los binomios presidenciales, según los informes de monitoreo, la violencia política se incrementó paulatinamente, pues en la semana uno se presentaron 29 casos de desvalorización al rol del candidato y para la segunda semana subió a 52; lo mismo respecto a la apariencia del candidato de 8 casos que hubo en la primera semana ascendió a 13; y, la violencia política por etnia de cuatro casos subió a seis.

Rol de género

La violencia política por rol de género hace referencia a aquellos ataques a las mujeres tratando de menospreciar su función pública, minimizando, cuestionando su capacidad, su aptitud para desempeñar su cargo o profesión.

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El monitoreo de la organización Participación Ciudadana determina que en la primera semana hubo 24 mensajes de desvalorización al rol de género y esto se duplicó para la segunda semana, lo mismo ocurrió con los casos registrados sobre violencia referida a la apariencia.

El monitoreo identificó que dentro de las expresiones y frases de violencia política se construyen los tuits con el uso de violencia gráfica (emoticones y contenido multimedia), que también se relacionan con referencias violentas. Durante el periodo de monitoreo se contabilizaron seis contenidos multimedia violentos, entre emoticones, memes (fotografías y caricaturas) y videos.

Ruth Hidalgo, directora de Participación Ciudadana, resalta que por el uso extensivo del uso de las redes sociales, especialmente en las últimas campañas electorales del 2021 y 2023, aparte de facilitar la información tiene un aspecto negativo, porque es un espacio muy fácil de impunidad de violencia, porque muchas veces no se sabe quiénes son, porque muchos son troles.

Detrás de ese anonimato la gente se escuda y se muestra violenta e inclusive se llega a amenazar de muerte, a eso se suma el problema de fake news.

Una de las cosas que se observan en redes sociales es que los candidatos y los ciudadanos ya no debaten argumentos y no existe confrontación de ideas, y en momentos delicados que vive el Ecuador prevalecen los ataques entre unos y otros; y con ello, el riesgo es que se normalicen las prácticas violentas en política, añade Hidalgo. (I)