El canciller Gustavo Manrique suscribió, a nombre de Ecuador, el Acuerdo BBNJ (por sus siglas en inglés) o también conocido como Tratado de Altamar. El funcionario realizó el acto el jueves 21 de septiembre, en el marco de la semana de alto nivel de la 78.ª Asamblea General de Naciones Unidas.

Se trata del instrumento internacional jurídicamente vinculante bajo la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (Convemar), para la conservación y uso sostenible de la biodiversidad marina de las áreas fuera de la jurisdicción nacional, explicó la Cancillería en un comunicado.

Dicho instrumento es uno de los mayores hitos del multilateralismo ambiental. El objetivo del Acuerdo BBNJ es asegurar la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad de los océanos mediante mayor cooperación internacional, respeto y no menoscabo de los instrumentos y marcos globales y regionales existentes, y la puesta en práctica del principio de patrimonio común de la humanidad, entre otros.

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Cuatro ejes destacan en el tratado:

  • Uso de los recursos genéticos marinos, incluyendo la participación justa y equitativa de sus beneficios
  • Medidas de gestión basadas en áreas, incluyendo las áreas marinas protegidas
  • Evaluaciones de impacto ambiental; y la creación de capacidades
  • Transferencia de tecnología marina

La Cancillería aclaró que estos principios se basan en mecanismos de notificación, intercambio de información, consultas y transparencia entre los Estados. Se da mayor atención a los intereses y necesidades de los países en desarrollo.

Manrique resaltó que con el acuerdo, “el gobierno de Guillermo Lasso reafirma su vocación en favor de la protección del planeta en beneficio de las actuales y futuras generaciones. Esta es la mejor vía para avanzar en la implementación de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

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Para llegar a la firma del instrumento se realizaron consultas a instituciones nacionales, representantes del sector privado -incluyendo el sector pesquero nacional-, organizaciones no gubernamentales, academia, entre otros.

“Con la firma de este acuerdo, Ecuador responde positivamente a la exhortación de la Asamblea General de Naciones Unidas y del secretario general para que todos los Estados consideren firmar este acuerdo lo antes posible, tomando en cuenta que se requieren 60 ratificaciones para su entrada en vigor. Posteriormente seguirá el proceso constitucional interno para su ratificación”, resaltó la Cancillería. (I)