Casi ningún “Lassoboy” queda en el gobierno de Guillermo Lasso

La salida de Diego Ordóñez de la Secretaría Nacional de Seguridad Pública y del Estado y la de Juan Carlos Holguín, del Ministerio de Relaciones Exteriores aumentan el número de separaciones del gabinete del presidente Guillermo Lasso de figuras que han sido muy cercanas a él, algunos llamados en su momento “Lassoboys” a pocas semanas de cumplir dos años de mandato y en medio de un juicio político en la Asamblea Nacional.

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Por el gabinete ministerial de Lasso pasaron legisladores del Movimiento CREO que abandonaron su curul y ahora están fuera de la función pública tras haber salido. Están el fallecido César Monge, que fue su primer ministro de Gobierno; Francisco Jiménez, el segundo en ese mismo cargo; Marcelo Cabrera, que dimitió para ser ministro de Transporte y Obras Públicas hasta julio de 2022; y Ordóñez que en febrero de 2022 pasó a ser consejero presidencial por cinco meses y el 2 de agosto de 2022 asumió como secretario, cargo al que renunció este 11 de abril.

Además de los legisladores de CREO, el gabinete de Lasso contó en sus inicios con profesionales que llegaron desde la Fundación Ecuador Libre (FEL), el think tank o tanque de pensamiento, fundada en el 2005 por el mandatario antes de dar el salto a la política. Al igual que los asambleístas que se hicieron ministros. estos salieron en diferentes momentos y por distintas causas.

Ahora en el gabinete no queda casi ningún “Lassoboy” y las figuras más cercanas al presidente, que salieron de su fundación, que quedan son Jairon Merchán, secretario de Planificación, que trabajó por cinco años en la FEL y los legisladores Juan Fernando Flores, coordinador de la bancada oficialista dentro de la Asamblea Nacional y Nathalie Arias, vocal del Consejo de Administración Legislativa (CAL), entre los más visibles.

Salidas de funcionarios cercanos a Lasso

Las salidas de los allegados de Lasso del gabinete ministerial comenzaron con la de Bernarda Ordóñez, quien era secretaria de Derechos Humanos. Presentó la renuncia el 28 de abril de 2022 alegando “diferencias irreconciliables con la nueva visión que el Gobierno había adquirido en ese momento y la cual aseguró era difícil de compartir.

Dos meses después, Eduardo Bonilla, entonces secretario de Comunicación de la Presidencia, fue el segundo en salir del gabinete. La secretaría ya va por su cuarto titular en menos de dos años de Gobierno y el mandatario ha reconocido que la comunicación ha sido uno de los problemas de su mandato.

Bonilla salió del cargo un día antes de que se inicie el paro convocado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), en junio del año pasado.

Se desempeñó como jefe de Comunicación de las dos últimas campañas presidenciales de Lasso, en el 2017 y en el 2021 y es parte del movimiento oficialista Creando Oportunidades (CREO) y de Ecuador Libre.

Ya este 2023, las elecciones del 5 de febrero en las que el Gobierno sufrió una derrota en la consulta popular que impulsaba planteando enmiendas constitucionales en seguridad, institucionalidad y ambiente, produjo un nuevo ‘remezón’ en el gabinete con la salida de cinco funcionarios, que eran considerados “la mesa chica” de su mandato por el peso que tenían en su entorno.

El 9 de febrero se concretaron las salidas de Aparicio Caicedo, quien primero fue asesor ad honorem y luego consejero presidencial, y que fue director ejecutivo de la FEL y la del entonces ministro de Gobierno, Francisco Jiménez.

Caicedo alegó que su misión en el cargo se había agotado y por ello era momento de renunciar, pero indicó que no se alejará del proyecto político y que seguiría trabajando “desde otras trincheras”.

Llegó a ser uno de los funcionarios más cuestionados desde el inicio del régimen por haber pasado de consejero ad honorem, es decir, sin remuneración del Estado, a consejero presidencial con sueldo. Se dedicaba a asesorar a Lasso en temas políticos, económicos y jurídicos, pero fue acusado de haberse entrometido en los procesos de elección de autoridades que lleva adelante el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social.

En el caso de Jiménez, en su carta de salida recordó que durante su gestión el país atravesó periodos muy complejos como el enfrentamiento permanente con la clase política, los motines en las cárceles y “los terribles días del paro nacional” de junio pasado, que derivó en la instalación de las mesas de diálogo y en los 218 acuerdos con los movimientos sociales y las organizaciones del movimiento indígena.

Reiteró su agradecimiento a Lasso y subrayó que es un militante más del partido de Gobierno, el movimiento CREO, y que estará donde las circunstancias, el país y la visión del presidente lo convoquen. Henry Cucalón fue quien lo reemplazó en el cargo hasta la actualidad.

El mismo 9 de febrero se registraron las salidas de Fabián Pozo y Marcos Miranda, secretario y subsecretario Jurídico de la Presidencia, respectivamente, y también miembros de la FEL.

“El Ecuador ya ha cambiado, muchas de las ideas que esbozamos desde hace algunos años se han cumplido”, escribió Pozo en su carta de renuncia, en la que destacó que uno de los logros de su gestión fue la entrada en vigencia de la nueva Ley de Comunicación.

Iván Correa renunció en esa misma fecha también al cargo de secretario de la Administración Pública. Aunque no era un integrante de la fundación, trabajó por más de 30 años con Lasso en el Banco Guayaquil.

En ese cargo, Lasso posesionó a Sebastián Corral Bustamante, quien se había desempeñado por más de un año y medio como embajador ante el Gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte.

Dos meses después, el gabinete de Lasso volvió a registrar dimisiones justo en momentos en que se dio paso al juicio político en su contra dentro de la Asamblea Nacional por el supuesto delito de peculado en la ejecución de contratos celebrados por la empresa pública Flota Petrolera Ecuatoriana (Flopec) para el transporte de crudo.

Juan Carlos Holguín abandonó la Cancillería el 1 de abril por “motivos personales” y agradeció al primer mandatario por la oportunidad de ser parte de su equipo de trabajo, aunque reconoció que no había sido fácil tomar la decisión, pero creía que era la correcta. Gustavo Manrique, quien se desempañaba como ministro del Ambiente, Agua y Transición Ecológica, fue posesionado como su reemplazo.

Holguín se mantuvo junto al presidente desde que ganó las elecciones. Por siete meses fue el embajador itinerante ad honorem para temas estratégicos, luego pasó a ser consejero presidencial hasta que en enero de 2022 asumió la Cancillería en reemplazo de Mauricio Montalvo.

El excanciller apareció en la escena pública como empresario en el área deportiva e incursionó con Lasso en la política, fue candidato en las elecciones de la Alcaldía de Quito en 2019.

Luego de la salida de Holguín, el último funcionario cercano a Lasso que quedaba era Diego Ordóñez.

En los ocho meses en funciones estuvo rodeado de críticas por la violencia que vive el país y la noticia de su salida trascendió horas después de la masacre ocurrida la mañana del martes, 11 de abril, en el puerto pesquero artesanal de Esmeraldas, donde nueve personas fueron asesinadas a manos de unos 30 sujetos armados. (I)