El envío de correos electrónicos con propaganda electoral a ecuatorianos residentes en el exterior, los días previos a los comicios del 15 de octubre pasado, evidencia la fragilidad de los datos privados. El Consejo Nacional Electoral (CNE) aclaró que ni los correos ni las direcciones digitales salieron desde la institución.

La Ley Orgánica de Protección de Datos Personales fue publicada en Ecuador el 26 de mayo de 2021, mientras el régimen sancionatorio del mismo cuerpo legal está operativo, en la teoría, desde hace cinco meses.

¿Qué impide que la Ley de Datos se mantenga sin aplicarse totalmente?: Se siguen recibiendo llamadas indeseadas

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Las empresas públicas y privadas tuvieron dos años para adaptarse a la normativa antes de imponer un régimen sancionatorio por mal uso de datos. No es extraño para los usuarios recibir pedidos de autorización en tal sentido, como se debe; pero tampoco se han eliminado llamadas o mensajes ofreciendo productos o servicios, lo que habla de un descontrol en torno a información privada. Sin embargo, el Gobierno no considera pertinente aún la imposición de sanciones, o al menos así lo dijo el viernes 27 de octubre Vianna Maino, ministra de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información.

Y más que no sea oportuno es que deudas pendientes lo hacen inviable. El Ejecutivo ha remitido dos ternas al Consejo de Participación Ciudadana y Control Social para la selección del superintendente de Protección de Datos –que se debe encargar de imponer las sanciones descritas por la ley y aplicar medidas correctivas en caso de mal manejo de datos de un usuario–. La última la envió esta semana.

Otro pendiente es el reglamento que fue presentado al Ejecutivo en enero pasado, de acuerdo con información publicada por el mismo ministerio, mas, no se conoce de su publicación.

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Que se avance en el pago de estas deudas es imprescindible para no dejar en indefensión a los ecuatorianos ante el peligro que significa el mal uso de datos. No solo son llamadas invasivas a la privacidad sino incluso amenazas a la economía que se han reportado en el pasado. (O)