Los flashes que siguen a la realeza, ni la vida de princesa que le deparaba junto a Harry fueron suficiente para convencer a Cressida Bonas de dejar su carrera a un lado.
Esta joven de 25 años, que hace dos meses rompió su relación con el hijo menor del príncipe Carlos de Gales, ahora ha volcado todo su entusiasmo a su faceta de actriz.
Graduada de licenciada en danza por la Universidad de Leeds y el conservatorio Balan de Londres, siempre ha querido desarrollarse en los escenarios, pero en los dos años que duró su noviazgo con Harry, con quien la prensa británica pensaba que se iba a casar, las formalidades que debía seguir no se lo permitían.
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Por ello, ahora que está nuevamente soltera se ha enfocado más en lo escénico.
La semana anterior debutó como actriz en el festival literario Hay-On-Wye, en la obra There is a Monster in the Lake (Hay un monstruo en el lago). En ella, según una nota de El País, sorprendió a varias personas del público por la calidad de su trabajo.
Y eso no es todo, ahora también ha sido seleccionada para un rol en una película ambientada en el siglo XVII, en el que compartirá pantalla con Cara Delevingne, Daisy Lowe y el oscarizado Christoph Waltz. La cinta tiene como título provisional Tulip Fever y es dirigida por Justin Chadwick.
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Amigos de Cressida han comentado a los medios que ella se sentía frustrada y descontenta por no poder cumplir sus sueños, pero, al parecer, ahora lo está logrando.
