Dixon Arroyo y Leonardo Campana nunca olvidará el 19 de agosto de 2023. Los jugadores ecuatorianos, junto con Lionel Messi, escribieron este sábado la primera página gloriosa del Inter Miami CF. Conducidos por Gerardo Martino, la franquicia de Florida batió en los penaltis al Nashville SC (1-1, 9-10 en la tanda) en la final de la Leagues Cup y conquista el primer título de la historia del club.

Messi abrió el marcador en la cancha de Nashville en el minuto 23, su décima diana en los siete partidos del torneo, pero el estadounidense Fafá Picault igualó en el 57. La final se resolvió en una dramática tanda de penales en la que el arquero de Nashville, Elliot Panicco, erró el lanzamiento decisivo.

Esta victoria enaltece la asombrosa trayectoria del Inter Miami desde la llegada de Messi, que en menos de un mes impulsó al peor equipo de la temporada de la MLS al triunfo en la Leagues Cup, torneo por el que pelearon durante un mes los 47 equipos de la liga norteamericana y de la mexicana.

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Por otra parte, el centrocampista Dixon Arroyo disputó los siete encuentros, todos como titular, y se afianzó en la media del cuadro pink como volante interior por derecha, nada más y nada menos, que al lado del campeón del mundo con España Sergio Busquets.

Campana ingresó desde el banquillo en el minuto 68 por el venezolano Josef Martínez, once minutos más tarde Arroyo sería sustituido por Víctor Ulloa.

Con un fantástico ambiente en el Geodis Park para apoyar al equipo de la capital del country, el Nashville arrancó con un bloque muy compacto y con una sólida presión en la que se atascaron los visitantes.

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No sorprendió el conjunto local, totalmente volcado en buscar el oro al contragolpe y en lo que pudiera inventarse entre líneas el revoltoso Hany Mukhtar (MVP y máximo goleador de la MLS en 2022).

Le costó responder al conjunto de rosa, con mucha posesión sin profundidad, pero los de Gerardo ‘Tata’ Martino no perdieron la paciencia pese a que Messi pasó prácticamente desapercibido en los primeros 20 minutos.

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De hecho, las primeras ocasiones fueron para el Nashville, primero con un disparo desviado de Shaq Moore y después con un cabezazo de Walker Zimmerman que atrapó Drake Callender.

Poco a poco, el Inter Miami encontró algunas grietas en el muro del Nashville, especialmente por una banda izquierda en la que Jordi Alba dio mucho oxígeno a sus compañeros.

Precisamente desde el costado izquierdo, Robert Taylor probó al meta local con un seco lanzamiento desde fuera del área en el minuto 21.

Pero la igualdad del duelo voló por los aires con la enésima genialidad de Messi.

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El argentino, que había bajado en varias ocasiones a la medular en busca del balón, apareció de la nada para cazar un rechace en la frontal del Nashville, recortó a Zimmerman y conectó un precioso disparo directo a la escuadra.

Con el marcador a favor, el ritmo lento -aunque intenso- del encuentro favoreció aún más al Inter Miami mientras el Nashville, todavía en ‘shock’ por ese mágico destello de Messi, solo encontró tímidos rastros de peligro en algunos balones por alto.

Los penaltis deciden

No cambió el guion en la reanudación, con un Inter Miami muy cómodo con el balón en su poder y que rozó el segundo con un tiro de Josef Martínez a pase de Alba que bloqueó Zimmerman.

Pero el Nashville despertó de repente en el 57 gracias a un córner.

Mukhtar lo sirvió al primer palo en busca de Sam Surridge y el balón acabó cayendo en el área pequeña, donde Fafà Picault remató de cabeza y el balón acabó entrando tras rebotar en Benjamin Cremaschi y Drake Callender.

El gol encendió al Nashville y a su afición mientras que el Inter Miami, que parecía tener controlada la final, quedó algo tocado y se enredó entre imprecisiones.

Ahí llegaron los mejores momentos del equipo de amarillo y negro, con la inercia a su favor, con un punto extra de energía para llevarse los balones divididos y con muchas ganas de que el partido se abriera definitivamente.

El Inter Miami encontró la respuesta en el de siempre, un Messi que acarició el doblete en el 71 estrellando en el palo un tiro cruzado.

No se asustó el Nashville, que por fin encontró su ocasión clarísima al contraataque con una doble opción que no pudieron concretar ni Surridge ni Mukhtar.

Acabó mejor el partido el Nashville, mucho más dinámico y que ganó con la entrada en ataque de refuerzos como el costarricense Randall Leal, frente a un Inter Miami que llegó al desenlace con las fuerzas justas y el físico al límite.

Mukhtar lo intentó de todas las formas posibles (falta directa, contraataque, disparo escorado...) y Surridge tuvo también un cabezazo en el 92.

Y aun así, el Inter Miami estuvo a centímetros de llevarse la final en una increíble y disparatada última jugada del partido. El ecuatoriano Leonardo Campana ganó un balón largo, se plantó delante de Elliot Panicco, la picó frente al portero y aún le dio tiempo de llegar a su defectuoso remate sin nadie a su alrededor, pero su último intento tirándose al suelo acabó en el poste.

Ya en la tanda de penaltis, los dos equipos mostraron un excelente acierto y, tras los fallos de Leal y Ulloa, la suerte se decidió en los lanzamientos de los porteros, donde Callender adivinó el tiro de Panicco y cerró así el primer trofeo de Messi en Estados Unidos.

(D)