MSc. Martha Belén Ortiz Celi

Nutricionista Clínica /Chef en Gastronomía Nutricional

¿Qué nutrientes requieren los adultos mayores? Los nutrientes se pueden obtener a través de la alimentación, pero a menudo no es posible obtener las cantidades necesarias únicamente con alimentación, por lo que es preciso suplementar a tiempo.

A medida que envejecemos, experimentamos muchos cambios y es posible que tengamos que ajustar nuestro estilo de vida para tener un envejecimiento sano. Una alimentación saludable y la actividad física regular pueden ser clave para una buena salud a cualquier edad.

Se sabe que un paciente desnutrido o con deficiencias nutricionales, tiene una menor calidad de vida; independientemente del peso actual, ya que una persona obesa puede también estar desnutrida a la vez por falta de micronutrientes y deficiente masa muscular. La malnutrición por deficiencia o exceso en el adulto mayor es causa principal de disfunción inmunitaria y el aparecimiento de comorbilidades.

Las personas mayores de 60 años deben recibir orientación nutricional para poder conocer como complementar su alimentación considerando todas las posibles causas subyacentes como problemas dentales, problemas de masticación, deglución o dificultad para tragar sólidos/líquidos, trastornos digestivos, depresión, hiporexia etc., que no les ha permitido nutrir a lo largo del tiempo.

Las enfermedades detectadas con mayor frecuencia en las personas de edad dorada son: la osteoporosis, problemas del corazón, enfermedades neurológicas y la diabetes. Lo antes mencionado es el resultado de deficiencias graves y crónicas de nutrientes; por ejemplo calcio+ hierro + magnesio + vitamina D + omega 3 y el exceso de otros como el sodio + grasas trans+ azúcares simples, perjudiciales dentro de la dieta habitual, lo que contribuye a que las enfermedades se expresen incluso desde temprana edad.

A continuación reconoceremos los nutrientes que debemos priorizar en los adultos mayores:

Vitamina D: esta vitamina se obtiene a través del sol. En general, muchas personas suelen tener problemas de movilidad o de aislamiento, es habitual que tengan un déficit de esta vitamina. Su deficiencia causa la aparición de la osteoporosis y otros problemas relacionados con deficiencias a nivel del sistema inmune, pérdida de masa muscular, alteraciones en el sistema nervioso y metabolismo. Por ello, la vitamina D es un suplemento fundamental.

Calcio: nutriente fundamental para mejorar los huesos, evitando su fragilidad y sus fracturas. En muchos casos, las personas mayores tienen déficit de este nutriente y eso es lo que provoca la mayoría de sus internaciones hospitalarias. Hay que asegurarse de que se toman 1.200 mg diario en el caso de los hombres y hasta 1.600 mg en el caso de las mujeres menopáusicas. Es frecuente que no se alcancen estos niveles a través de la alimentación.

Vitamina B12: La deficiencia de esta vitamina puede aumentar el riesgo de sufrir demencia, según varios estudios, así que es fundamental que nuestros mayores la tomen en las cantidades adecuadas. Se recomienda tomarla más aún en patologías crónicas como la diabetes.

Omega 3: este nutriente evita que haya problemas a nivel cardiaco y cerebral. De hecho, incluso contribuye a disminuir el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer. Nos ayuda a retrasar la aparición de enfermedades asociadas al envejecimiento, como el Parkinson o el alzhéimer. En estos casos, conviene tomar una suplementación de omega 3 a diario, no es necesario el omega 6 y 9, porque estos los últimos sí se alcanzan a través de la alimentación y su exceso por el contrario es perjudicial.

Magnesio: Es poco probable que una persona alcance los niveles de magnesio recomendados por la alimentación, también regula la digestión, el insomnio y combate la ansiedad. Este mineral mejora la salud cardiaca, puesto que contribuye a controlar la presión arterial.

Proteínas: en general, las personas que se alimentan adecuadamente no tienen por qué tener déficit de proteínas ya que esto sin duda se pueden obtener de la dieta. Sin embargo, en personas mayores con problemas de masticación o cualquier otro problema que dificulte la alimentación, puede ser conveniente tomar algún suplemento proteico. Y es que el déficit de proteínas puede conducir a una menor masa muscular, problemas inmunitarios y por ende la desnutrición.

Los expertos recomiendan que los adultos mayores tengan un IMC entre 25 y 27, un poco más que el rango recomendado de 21,5 a 23 para los adultos más jóvenes. Por otro lado, algunas personas, especialmente los adultos mayores, pueden tener un IMC en el rango saludable, pero aun así tener exceso de grasa corporal. Por eso también es importante medir el tamaño de la cintura.

El tamaño de la cintura es una medida que puede indicarle si tiene exceso de grasa corporal. Las mujeres con una cintura de más de 88 cm y los hombres con una cintura de más de 102 cm podrían tener más probabilidad de desarrollar problemas de salud.

La cantidad de alimentos que debe consumir cada día depende de su peso, sexo, edad, metabolismo y grado de actividad. En general, los hombres necesitan más calorías que las mujeres.

Estas necesidades son el resultado también de cambios físicos, psíquicos y socioeconómicos propios de esta etapa y determinados hábitos alimentarios son a su vez una medida profiláctica y parte de lograr un buen estado nutricional.

Mantener una alimentación saludable es un hábito recomendable para todo el mundo, ya que es la base que da energía a nuestro cuerpo.

Consejos en la nutrición del adulto mayor

  • · Tener una alimentación que incluya a todos los grupos de alimentos
  • · Incorpore proteínas de buena calidad, comiendo carnes preferiblemente orgánicas y huevo de campo.
  • · Adecuar las consistencias más suaves para las condiciones de su dentadura
  • · Limitar el consumo de azúcares, incluyendo harinas y grasas animales.
  • · Cuide el agregar poca sal a sus comidas, este condimento puede sustituirse por hierbas aromáticas y especias.
  • · Se evitarán alimentos y preparaciones que provoquen digestiones pesadas en la noche.
  • · Es recomendable la exposición al sol, para garantizar la acción de la vitamina D y el calcio

Miembro de la Asociación de Nutricionistas del Guayas

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