La ecuatoriana Alejandra Jaramillo rompió su racha invicta ayer en Siéntese quien pueda, el reality de farándula del canal Unimás en el que participa como reportera.

Su penalización benefició a la presentadora y competidora Karla Gómez; una entrevista de esta realizada a la Banda MS le dio la oportunidad de sentarse y desplazar la banderita de Ecuador que Jaramillo tenía plantada en la mesa.

Jaramillo recibió la noticia de buen talante; pidió un aplauso para ella, que estará alejada del set principal buscando un reportaje exclusivo para poder reintegrarse. La otra nominada era la venezolana Kerly Ruiz.

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Ruiz fue nominada al castigo por sus compañeros, pero Jaramillo fue nominada por el público, algo que se debió en parte a su actitud ante el reto. “Los amo, pero ya no me salven”, les escribió a sus fieles, que se preparaban a defenderla en los votos; y añadió: “También quiero traer una exclusiva”. Tener una nota inédita es la tarea de los que pierden en la nominación.

Salió con una caja que tenía la etiqueta “castigada”, despidiéndose y evitando a toda costa un abrazo de su compañero Lucho Borrego, la persona que hace poco la apodó Terminator por su permanencia en el show.

Los seguidores de Jaramillo se inquietaron con la noticia de su salida, y algunos interpretaron el rechazo al gesto de Borrego como una muestra de aspereza entre ellos; pero, en realidad, era porque en este episodio todos los participantes usaron suéteres navideños personalizados para ser feos y desagradables; Borrego le añadió al suyo comida cruda, como una salchicha a la que nadie quiso acercarse.

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“Ya era hora de ver tu exclusiva”, dijeron algunos de los fanáticos, que están confiados del desempeño de la esmeraldeña. (E)