“No hay variedad, solo pollo y pollo. Solo una vez le dieron pescado”, comenta el familiar de un paciente hospitalizado hace más de un mes por una enfermedad catastrófica (leucemia). Las porciones son pequeñas y a veces, como en la merienda de ayer (6 de octubre), llega abombada la ensalada (de cebolla, tomate y rábano).