Un estudio desarrollado por investigadores de la Universidad de Las Américas, en colaboración con el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), el Instituto Nacional de Biodiversidad (Inabio) y el Royal Ontario Museum, con el financiamiento de la Cooperación Belga de Desarrollo (DGD), revela patrones de acumulación de metales pesados en peces de las cuencas hidrográficas de los ríos Napo y Pastaza en Ecuador, incluidos los ríos Aguarico, Cuyabeno y Bobonaza.

Este hallazgo, dicen los investigadores, sugiere una relación con la extracción industrial y artesanal de recursos naturales. La contaminación y biomagnificación por metales pesados se deriva de vertidos mineros, agrícolas, petroquímicos e industriales en estas cuencas.

Se analizaron 360 especímenes de peces que representan 58 especies, y se evaluó la concentración de 11 metales (aluminio, arsénico, cadmio, cromo, cobre, helio, manganeso, níquel, plomo, zinc y mercurio). Los resultados revelan que 15 especies y 53 especímenes individuales exhiben concentraciones de metales pesados que superan los estándares recomendados, con niveles elevados de aluminio (Al), arsénico (As) y mercurio (Hg).

Publicidad

Listado de productos procesados no aptos para el consumo humano en Ecuador tras análisis de Arcsa

El estudio confirma, además, que los riesgos de presencia de metales pesados en los peces de la Amazonía varían según los ciclos estacionales de inundaciones, aumentando en promedio durante la temporada de aguas bajas (diciembre a febrero).

¿Qué significa esto para los humanos que cuya dieta está contaminada por metales pesados? Muchas de las especies de peces analizados en los estudios son de consumo de los habitantes de la Amazonía, con un promedio de ingesta diaria de pescado de 0,46 kg.

Los pueblos indígenas y rurales se encuentran entre los más vulnerables al depender de la pesca de agua dulce para su subsistencia, especialmente en las comunidades de la cuenca del Amazonas.

Publicidad

La contaminación por mercurio es la más preocupante, ya que se asocia con el deterioro de la función cardiológica y neurológica, una actividad enzimática reducida y un aumento del estrés oxidativo, especialmente en las mujeres.

Industriales piden a Agrocalidad el estudio científico que detectó metal tóxico en muestras de arroz de tres provincias

Otros efectos documentados de la acumulación de estos metales son el incremento en el riesgo de cáncer de pulmón, teratología fetal, convulsiones y pérdida de audición en la infancia, e insomnio en adultos, pérdida de memoria y daños al sistema nervioso central y a los riñones.

Publicidad

Uno de los problemas más preocupantes, según el Inabio, es el aumento de las importaciones de mercurio a la cuenca, que ahora ascienden a >800 toneladas anuales, la mayor parte de las cuales se vierten al ambiente durante la extracción y refinamiento de oro.

Según el último reporte de la Iniciativa de Delfines de Río de Sudamérica, los cetáceos también son afectados. El bufeo (Inia geoffrensis) y el tucuxi (Sotalia fluviatilis) son las dos especies de delfines de río severamente amenazadas en la Amazonía ecuatoriana. Pese a que los efectos de la contaminación de los ríos en los delfines todavía se desconocen, se sabe que el mercurio y otros metales pesados pueden impactar el hígado, riñones, cerebros y sistema reproductivo de los cetáceos.

Los metales pesados ingresan a los ecosistemas amazónicos a través de la actividad humana, así como de la erosión geológica y el vulcanismo de origen natural. Las actividades mineras elevan los niveles de metales pesados del suelo en el que desarrollan e impulsan la deforestación, lo que reduce la materia orgánica del suelo y aumenta su acidez, la erosión y la exposición a los rayos UV y temperatura.

La extracción de recursos a escala industrial se remonta a más de un siglo, especialmente en la cuenca del río Napo en Ecuador, declara el Inabio.

Publicidad

WWF, a través de su Programa de Agua Dulce y con el apoyo de la UDLA y el Inabio desarrolla estrategias de manejo a escala nacional y local para reducir la incidencia de la contaminación por metales pesados en la salud humana y de la biodiversidad.

El estudio está publicado en la revista científica Science of the Total Environment. (I)