Las semillas de chía son uno de los “superalimentos” más populares y beneficiosos que podemos incluir en nuestra dieta. Ricas en fibra, proteínas, omega-3 y una gran variedad de minerales y antioxidantes, estas semillas se han posicionado como un aliado clave para mantener una salud óptima.
Uno de los beneficios más destacados del consumo regular de semillas de chía es su capacidad para ayudar a regular los niveles de glucosa. Esto ocurre gracias a su alto contenido en fibra y ácidos grasos saludables, que favorecen especialmente a aquellas personas que sufren de diabetes, prediabetes o resistencia a la insulina.
Cinco formas de comer chía para controlar el azúcar en sangre
De acuerdo con Infobae, las semillas de chía se pueden integrar de diferentes formas a la dieta diaria debido a su versatilidad, algunos ejemplos son los siguientes:
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- Si vas a preparar algunos postres horneados como tartas, muffins o panes, puedes agregar a la mezcla un par de cucharaditas de chía.
- Debido a la consistencia que crean, las semillas pueden ser usadas como espesantes en guisos y sopas, siendo un reemplazo perfecto para el huevo.
- Agrega una o dos cucharaditas al yogur, la avena o los batidos.
- De nuevo, la consistencia que generan las semillas al ser hidratadas sirve para preparar pudines. Solo colócalas en leche y dejas que se refiere toda la noche e incluso les puedes agregar frutas frescas o deshidratadas si así lo deseas.
- También se les puede agregar semillas de chía a salsas o mermeladas caseras.
De esta forma, Infobae resalta no solo estarás manteniendo bajo control tus niveles de glucosa en sangre, sino que estas semillas también te ayudarán a:
- Mantener una mejor salud digestiva.
- Prevenir enfermedades cardiovasculares.
- Estimular la pérdida de peso.
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