Estos son los 3 síntomas tempranos que avisan del autismo

“Imagínate que el mundo hay manzanas y esas son las personas que no tienen autismo, ni ninguna discapacidad. La manzana puede ser verde o roja, de cualquier textura o de cualquier sabor… pues los autistas somos peras. Tenemos una forma diferente, un sabor más dulce, pero seguimos siendo frutas”.

Así, con naturalidad, describe Pau Brunet, un niño de 10 años, el autismo, al que “quiere darle visibilidad desde las redes sociales”.

Para divertirme, dijo en el programa Y Ahora Sonsoles, “pienso en una cosa divertida y cierro los ojos”. Le comenta a Sonsoles Ónega que hace algo: se golpea una mano con la otra, rápido. “Puedo pasar horas haciendo esto, puede doler un poco, pero solo duele los primeros dos años”, contó.

Te acostumbras al dolor, responde cuando le pregunta Sonsoles.

Dice, igualmente, que escucha “cinco veces más que el promedio de las otras personas”.

“Ser autista es una condición de vida, es un trastorno. Yo soy diferente a muchos autistas y cada autista es diferente. Mi autismo es de nivel 1, que es el más leve”, manifiesta citado en 20 Minutos.

Qué es el autismo

El 2 de abril es el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo. Lo adoptó Naciones Unidas a finales de 2007.

En la resolución señalaban que la aprobaban: “Consciente de que el autismo es una discapacidad permanente del desarrollo que se manifiesta en los tres primeros años de edad y se deriva de un trastorno neurológico que afecta al funcionamiento del cerebro”.

Y agrega “de que afecta principalmente a los niños de muchos países, con independencia de su sexo, raza o condición socioeconómica, y de que se caracteriza por deficiencias en la interacción social, problemas en la comunicación verbal y no verbal y patrones de comportamiento, intereses y actividades restringidos y repetitivos”.

Desde los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos hablan de trastornos del espectro autista (TEA), descritas como “discapacidades del desarrollo causadas por diferencias en el cerebro. Algunas personas con TEA tienen una diferencia conocida, como una afección genética”.

Cómo se evalúa y diagnostica un trastorno del espectro autista

Las características comunes en todas las personas con autismo, para Espacio Autismo, son

1. Las dificultades en la comunicación verbal y no verbal,
2. Patrones repetitivos de comportamiento y
3. Resistencia a los cambios en la rutina.

En su sitio web los CDC resaltan que algunas personas con TEA” podrían tener destrezas de conversación avanzadas, mientras que otras podrían no expresarse verbalmente (...) Algunas necesitan mucha ayuda en su vida diaria; otras pueden trabajar y vivir con poca ayuda o nada de ayuda”.

Síntomas del autismo

La ONU instaba en su resolución sobre el autismo al diagnóstico precoz y a la investigación para el crecimiento y el desarrollo de la persona.

De acuerdo con los CDC, los TEA aparecen antes de los tres años y pueden durar toda la vida, aunque los síntomas podrían mejorar con el tiempo.

Amplían que algunos niños muestran síntomas de TEA en los primeros 12 meses de vida. En otros, puede que los síntomas no aparezcan hasta los 24 meses o después.

Las tres señales tempranas de autismo

La Academia Americana de Pediatría (AAP) notifica sobre tres de las primeras señales del trastorno del espectro autista (TEA) en niños pequeños.

1. Problemas de lenguaje

Algunos niños con un trastorno del espectro autista hablan en un tono de voz más alto o con una voz musical o mecánica como de robot. Otros usan frases hechas para iniciar una conversación, refieren en el Instituto Nacional de la Sordera y Otros Trastornos de la Comunicación, de Estados Unidos.

Por ejemplo, “un niño puede decir “Me llamo Tomás”, aunque esté hablando con familiares y amigos. Otros pueden repetir lo que escuchan en los programas o anuncios de TV”.

El citado instituto señala que puede repetir continuamente las palabras que ha escuchado. Eso se llama ecolalia. “En la ecolalia inmediata, el niño repite las palabras que alguien acaba de decir”.

Cada niño es diferente: “unos pueden desarrollar rápidamente un gran vocabulario en una determinada área de interés. Muchos tienen buena memoria para la información que acaban de escuchar o ver (…).

2. Falta de atención conjunta

En la actualidad, destacan en Limbic Neuro-rehabilitación, " la alteración en este proceso se considera un síntoma fundamental del autismo. La capacidad para iniciar la atención conjunta es una habilidad que consiste en la utilización del contacto visual-gestual (señalar o mostrar con el dedo) por parte del niño para iniciar espontáneamente la atención coordinada con un interlocutor social”.

La AAP, desde healthychildren.org, recuerda que la atención conjunta es mirar de un lado a otro entre un objeto o evento y otra persona, y conectarse con esa persona. Es una de las bases para las habilidades sociales y de comunicación posteriores.

De bebés, antes del año, “los niños en el espectro del autismo pueden parecer ignorar a los padres”.

Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, 2 de abril: ¿Cómo identificar signos del espectro autista en un adulto no diagnosticado?

3. Autismo regresivo

Según Healthy Children, un 25 % de los niños a los que más tarde se les diagnostica un trastorno del espectro autista pueden desarrollar algún lenguaje que dejan de usar repentina o gradualmente.

En Espacio Autista informan que “los síntomas del autismo regresivo, que suelen comenzar a manifestarse entre los 15 y 30 meses de edad, pueden variar ampliamente, pero siempre implica pérdida de habilidades sociales y de comunicación”.

Como ejemplo colocan: un niño que anteriormente disfrutaba el contacto visual y la interacción con otros puede mostrar una disminución en estas conductas.

Las habilidades lingüísticas también pueden sufrir una regresión, coinciden. Para el diagnóstico de autismo regresivo “debe ser realizado por profesionales como pediatras, psicólogos clínicos o neurólogos”. (I)

Te recomendamos estas noticias

• “Espero que al crecer supere ‘la pica’”: la extraña condición de una niña con autismo que come cera de velas, lana y yeso
• “Me diagnosticaron autismo a los 60 años”: la experiencia de una periodista de la BBC
• “Los caballos no juzgan ni miran diferente a los chicos”: así ayuda la equinoterapia a niños con trastorno del espectro autista o parálisis cerebral