En un mundo donde el café y el té son más que simples bebidas, una nueva investigación arroja luz sobre cómo estas infusiones pueden ser aliadas en la lucha contra enfermedades crónicas. Tanto el café como el té, aparte de ser un placer para el paladar y una excusa para compartir momentos con amigos, ofrecen una serie de beneficios para la salud que van más allá de la energía que proporcionan.