Propietarios de tiendas y pequeños puestos comerciales de la capital sienten un doble efecto de la subida del impuesto al valor agregado (IVA) del 12 % al 15 % y por eso dicen que son los principales afectados de esta medida, ya que sus facturas de la mercadería adquirida con esta nueva tarifa han aumentado en $ 7 a $ 8 y las ventas han disminuido porque los consumidores finales prefieren comprar en supermercados ante la existencia de precios más convenientes.

Los vendedores coinciden en que el consumidor final no está siendo afectado, pero ellos sí, al estar como intermediarios entre la empresa o distribuidora y el consumidor, pues sus facturas y costos de abastecimiento aumentaron y junto a la baja de ventas los han ubicado en una situación complicada.

Alza del IVA en precios sería 3 %, pero clientes dicen que sus primeras compras están 10 % más caras

Uno de los miembros del equipo de entrega de proveedores comenta que la mayoría de las tiendas en las que él entrega los productos reclaman de que los precios de los pedidos están “muy caros” o que “ya no hay ganancias”. Algunos de ellos han manifestado ya no querer comprarles los productos.

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Angélica Anilema, propietaria de una tienda cercana a la Universidad Andina, dice que algunos productos sí han subido más de precio, aunque el valor ya había aumentado a finales de marzo. Otros productos se mantienen igual.

Las galletas y snacks son algunos de los productos que comentan han subido, al igual que mercancía que no graba IVA como los bananos. La caja de guineos con 100 unidades tenía un costo de $ 4 y ahora lo estaría adquiriendo por $ 4,50.

Agregó que los clientes ya no quieren pagar los productos por el aumento de precio, por lo que ella ha decidido vender las fundas y vasos que antes obsequiaba por las compras, para así de alguna manera remediar el daño a sus bolsillos por el aumento de los costos en los lotes de productos y que se refleja en sus facturas por el alza del IVA al 15 %.

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Por ejemplo, el martes 9 de abril el paquete de 15 botellas de agua llegó con un recargo de $ 0,25. Antes costaba $ 3,44 y ayer el propietario de un puesto comerciante pagó $ 3,70. Por lo que ahora, opta por vender cada botella de agua en $ 0,60.

La dueña de una pequeña tienda, Carolina Noguera, expresa su molestia porque los distribuidores le piden que venda los productos al nuevo valor, debido a que le entregaron productos de lotes anteriores que aún tienen el precio de antes de la subida del IVA, por lo que ella no puede vender estos productos al precio de venta al público (PVP), ante las quejas de los consumidores al percatarse de este detalle en el etiquetado del lote.

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Además, a esto se suma el reclamo de otra propietaria, Lucrecia Cuenca señala que hace tres meses subió el costo a los productos y ahora con lo del IVA lo vuelven a hacer, por lo que ellos son los principales afectados, ya que los consumidores finales ya no quieren comprar por los elevados precios.

Indica que el precio de algunos snacks era $ 0,50 a inicios de año, tras el anuncio del incremento del IVA al 15 % el valor fue de $ 0,60 y ahora $ 0,65. Y que los compradores ya no quieren comprar por el aumento repetitivo de precios en lo que va del año. (I)