El presidente de la República, Daniel Noboa, reconoció que se registrarán atrasos en los pagos a servidores públicos. Esto en medio de una crisis de liquidez que vive el país, y en medio de una discusión por la aprobación de una ley tributaria urgente que busca incrementar 3 puntos al IVA, entre otras medidas, para poder financiar los gastos de la guerra interna y el déficit que llegaría a $ 5.500 millones e incluso unos $ 4.500 adicionales de atrasos heredados.
El presidente Noboa dijo que se priorizará el pago a Fuerzas Armadas, pero que “toda la próxima semana se irán poniendo al día con el resto de funcionarios públicos”. De esta manera, el presidente Noboa ratificó lo dicho por el ministro de Economía y Finanzas, el domingo pasado en un programa radial, en el cual el principal de Finanzas dijo que habría retrasos, que él como ministro será el último en cobrar el sueldo, pero puso como plazo máximo para cubrir los pagos las dos primeras semanas de febrero.
Entre tanto, el presidente Daniel Noboa, en entrevista con Ecuavisa este martes, 30 de enero, indicó que se buscará optimizar el gasto público en varios frentes. Por ejemplo, se buscará controlar una mala práctica en la que no se estaría cumpliendo la constitución ni ley que indica que ningún servidor público puede ganar más que el presidente. Explica que, por ejemplo, hay dentistas y asistentes que ganan más que el presidente en las empresas públicas.
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Además, dijo que se optimizarán las entidades públicas y se las volverá más eficientes, a fin de que el Estado produzca más. Se busca que no haya pipones y que no haya nóminas fantasmas.
Sobre el tema, Miguel García, miembro del directorio de la Confederación de Trabajadores del Ecuador, quien ha sido dirigente de años en el sector público, rechazó que se vaya a retrasar el pago de sueldos y salarios. Considera que existe un mal manejo de las finanzas públicas, pues por un lado hay un sector de trabajadores públicos que quedarían sin pago y otros, sobre todo en las empresas estatales, que no se ven afectados y más bien dichas empresas tienen superávit. Para García, el Estado debería tomar fondos del superávit de las empresas públicas para pagar los sueldos, y apenas lleguen los recursos que está esperando el fisco, les devolverían. Así no habría burócratas de primera y de segunda, sino que se les daría un trato igualitario.
También se preguntó si habrá o no para pagar la deuda externa. Y si se pagara puntualmente la deuda, entonces por qué se paga con atraso a la gente. Para García, debe haber un orden de prelación de pagos, en la que los sueldos sean priorizados y después el resto. Además, aseguró que no existen cuentas claras y por ello podría agigantarse el problema fiscal intencionalmente para obligar a los asambleístas a aprobar las medidas de incremento de impuestos. Según García, el ajuste debe ser por el lado del gasto, es decir, reducir diversos gastos como, por ejemplo, suspender el bono geográfico en la burocracia y que se controlen los viajes en avión los jueves tarde y los lunes temprano. Hay burócratas que viajan así todas las semanas con dineros pagados por el fisco, añadió.
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Se conoce que en el país existen unos 150.000 servidores públicos sin nombramiento y trabajando bajo otras modalidades como contratos ocasionales y nombramientos provisionales. El presidente Noboa dijo que en este momento el Estado no tiene posibilidad de contratar a más personal.
También explicó que el Gobierno no ha sido el responsable de ampliar el déficit, sino que el anterior gobierno decidió dejar de cancelar pagos desde agosto pasado. Ahora el país requiere la ayuda de organismos y autoridades de EE. UU., de Europa y China. En este sentido, sostuvo que los pagos de deuda del 2025 y 2026 deberían ser pateados hacia adelante. En todo caso, descartó que la dolarización esté en peligro. (I)
