Zonas de Cotopaxi desoladas por desbordamiento de ríos a causa de fuerte temporal; en varios cantones de Los Ríos hay más daños

Redacción-Pujilí, Cotopaxi-Quevedo, Los Ríos

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La correntada del río Pilaló arrasaba lo que asomaba a su paso. La velocidad del caudal era evidente la mañana de este lunes en el poblado del recinto El Palmar, perteneciente al cantón Pujilí. Iba abriéndose paso entre viviendas, vías, terrenos e incluso una iglesia que estaba a poco de colapsar en su totalidad.

El panorama en ese poblado era desolador. En medio de una vía cubierta por piedras y postes colapsados, ciudadanos cargaban varios enseres que rescataban de viviendas afectadas o en peligro de destrucción.

A pocos metros de ese paso continuaba la fuerte corriente del río este lunes 31. Varios pobladores incluso arriesgaban sus vidas usando sogas para aguantar la fuerza del caudal e ingresar a casas semidestruidas a fin de llevar algunos artículos de sus domicilios que eran golpeados por el agua.

“Si alguien ve este video, hay que ayudar a evacuar a esta gente, esa gente está junto a lo que era la iglesia antes”, dijo Pablo Páez, quien compartió varios videos en Facebook sobre lo sucedido el lunes 31 en este sector cotopaxense.

Esta es una comunidad de los cuatro cantones (Pujilí, La Maná, Pangua y Sigchos) severamente afectados en Cotopaxi debido al fuerte temporal. En un informe preliminar, el COE provincial determinó una afectación de 1.200 hectáreas de cultivos de yuca, cacao, banano y pastos, pérdida de 100 semovientes y aproximadamente 200 personas damnificadas.

El río Pilaló arrasó con el 80 % de la población del sector El Palmar, perteneciente al cantón Pujilí, de Cotopaxi, según datos preliminares de las entidades de atención.

Una de las vías de la comunidad permanecía este lunes con acumulación de piedras y con varios cables y postes colapsados.

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Solo los escombros les quedaron a los dueños de las viviendas que fueron destrozadas por la creciente de este afluente debido a las últimas lluvias de la temporada invernal, que afectó a la población desde la noche del sábado 29 de enero.

Aunque afortunadamente hasta el momento las autoridades competentes no han informado sobre muertes ocasionadas por las inundaciones y deslaves, las pérdidas materiales son indescifrables.

Carlos Sigchos, quien reside en el sector hace más de 50 años, dijo que nunca había sido testigo de una tragedia de tal magnitud y que ahora es tristeza y lágrimas lo que la temporada invernal y el río les ha traído.

“Es la primera vez que veo el río con esta creciente, nos ha castigado dejándonos sin casa, esperamos que las autoridades y las personas de buen corazón nos ayuden a salir adelante y reconstruir nuestras vidas y viviendas”, dijo el afectado.

Rodrigo Yánez manifestó que todo el relleno que fue colocado hace unos quince años se lo llevó el río y que los estragos empezaron desde las 19:00 del sábado.

También refirió que hubo familiares atrapados en algunos sectores, debido a la creciente del afluente, pero que con la ayuda de militares pudieron ser rescatados y trasladados en helicópteros a buen recaudo.

“No tenemos agua y luz, y las autoridades no nos han podido ayudar, hay que ser francos, solo llegan en tiempos de campaña”, dijo el habitante.

Julián Choloquinga, uno de los afectados por el colapso de su vivienda, relató que desde las 04:00 del domingo ingresó el agua a su casa y fueron pocos los enseres que rescataron. Lo demás se lo llevó el río.

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Dijo que son nueve personas las que vivían en esta vivienda, el último tiene 6 años, hay dos casas más afectadas. “Hace aproximadamente diez años ocurrió algo similar, pero ahora es más fuerte, tengo que buscar otro lado para sobrevivir”, dijo el afectado, haciendo hincapié a las autoridades para que les ‘tiendan la mano’.

La incomunicación de los habitantes del sector El Palmar con otras comunidades se mantiene desde la mañana del domingo una vez que la vía Pujilí-La Maná, a la altura del sector El Edén, registró afectaciones en varios puntos.

El desbordamiento del río provocó también el ingreso de agua en casas y el arrastre de lodo y rocas en vías de otras comunidades cercanas al río, como Negrillo y Siete Ríos.

El alcalde de Pujilí, Luis Ugsha, asistió a varios de los sectores afectados con equipos de Bomberos y otras entidades para brindar apoyo en la evacuación de personas hacia zonas seguras. Además, pidió apoyo a las autoridades de entidades competentes del Gobierno nacional y se comprometió a colaborar en la reconstrucción de inmuebles afectados y la entrega de otras ayudas.

Pujilí, La Maná, Pangua y Sigchos, los cantones de Cotopaxi más afectados por el fuerte temporal, ya fueron declarados en emergencia por el COE provincial de Cotopaxi, indicó Cristian Torres, director General de Gestión de Riesgos.

Equipos técnicos del Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias realizan el levantamiento de información en las zonas afectadas para la entrega de apoyo humanitario, entrega de bonos de contingencia, así como también se ejecuta la elaboración de un cronograma de intervención al sistema vial y refuerzo de presencia militar y policial en las zonas perjudicadas.

Otro de los cantones mayormente afectados por las lluvias y la creciente del río Quindigua es La Maná y algunas de sus parroquias rurales, entre ellas Pucayacu y Guasaganda, sector Pucayacu Chico, barrio 15 de Mayo y las parroquias urbanas El Triunfo y El Carmen.

El alcalde de La Maná, Hipólito Carrera, manifestó que son cerca de 100 familias las afectadas, por lo que ya se ha tenido que evacuarlas y se empezó a establecer tres centros de acogida temporal.

Mientras que en horas de la tarde de este lunes, también se movilizó con equipos técnicos y maquinarias hasta el sector El Palmar para ayudar a los afectados. En este cantón, el río San Pablo también ha generado daños estructurales en algunos poblados.

Evaluación de autoridad provincial

Según Oswaldo Coronel, gobernador de Cotopaxi, el cantón La Maná y la parte baja de Pujilí han sido los más afectados, como consecuencia de que los ríos han perdido totalmente sus cauces. La creciente de los afluentes Pilaló, San Pablo y Quindigua ha dejado daños en vías, viviendas, puentes, cultivos y semovientes.

La carretera que une Pujilí con La Maná está cerrada en tres tramos como consecuencia de que la mesa colapsó por la fuerza de las aguas entre los kilómetros 117 y 120.

En entrevista con este Diario, Coronel manifestó que se estima que hay alrededor de 250 a 300 familias afectadas de manera directa, al menos 40 se encuentran en albergues y que otro gran número pasado el mediodía de este lunes estaba siendo evacuado con ayuda de miembros del Ejército, según datos preliminares de una primera evaluación. Debido a las continuas lluvias ha sido dificultoso el ingreso a varias zonas afectadas.

Coronel dijo que a través del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) provincial se solicitó la declaratoria de emergencia debido a las circunstancias de las afectaciones. Citó, por ejemplo, el caso de El Palmar, en Pujilí, donde las aguas del río Pilaló, cerca de las 22:30 del domingo pasado, ingresaron al poblado causando una devastación completa en el sector.

Manifestó que la emergencia será para los cantones más afectados de acuerdo con las justificaciones técnicas e informaciones de los municipios, pero que por la severidad de los acontecimientos se solicita que los recursos y equipos técnicos puedan llegar de manera rápida. Para ello habló con los ministros de Estado, quienes comprometieron el apoyo, al igual que el presidente de la República, Guillermo Lasso.

El gobernador de Cotopaxi dijo que aún no se cuantifican las pérdidas porque todavía no se cuenta con toda la información real. Hasta ahora hay un primer presupuesto del Ministerio de Transporte y Obras Públicas de $ 1,8 millones para restablecer la vía (Pujilí-La Maná) con el fin de que pueda retomarse la circulación vehicular.

Comentó que aún se espera en las próximas horas tener datos más exactos sobre las pérdidas en cultivos, viviendas, puentes y vías. Hay zonas muy afectadas que podrían considerar lo acontecido como un verdadero desastre, dijo.

Los Ríos

Habitantes de los cantones Quevedo, Ventanas, Buena Fe, Babahoyo, Quinsaloma, Urdaneta, Valencia, Mocache y Montalvo han reportado afectaciones por el temporal invernal, según el levantamiento de información que realizó el Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias, así lo anunció la gobernadora de Los Ríos, Génesis Blum.

La creciente de los ríos Las Balsas, La Clementina, San Pablo y Quevedo, ante las lluvias registradas en las últimas horas, ha generado que el cauce se incremente y posteriormente ingrese a ciertos poblados de las zonas rurales y bajas en el área urbana.

Según las cifras de la Gobernación, más de 259 son las personas afectadas con las inundaciones en toda la provincia.

Por ahora, el personal técnico de los municipios y de Gestión de Riesgos continúan evaluando daños para la instalación de albergues temporales que servirán para las familias damnificadas.

Debido a las inundaciones en varios sectores donde el agua ingresó a viviendas, el cantón Quevedo fue declarado en alerta naranja la tarde del domingo por el COE local, mientras que en Urdaneta sus autoridades resolvieron similar medida la mañana de este lunes.

Puentes de algunos cantones de Ventanas, Valencia y Urdaneta han sido bloqueados ante la creciente de sus ríos.

Mientras, en la carretera Babahoyo-Montalvo hay presencia de agua sobre la calzada, por lo que la Comisión del Tránsito del Ecuador pide a los conductores transitar con precaución. (I)