Las tendencias en algunos indicadores revelan caídas sostenidas y preocupantes respecto a junio del 2023: el crédito al sector privado creció más lentamente (15 % vs. 6 %), las ventas locales durante el segundo trimestre del año disminuyeron 7 % y la venta de vehículos cayó en 27,6 % (Ortiz, Fausto).
Mientras tanto, el valor de las exportaciones no petroleras durante el primer semestre del 2024 aumentó en 7,26 % anual, pese a que las toneladas métricas exportadas se redujeron en 2,82 %. Ampliando la foto, las exportaciones no petroleras crecieron 7 % en valor a lo largo del 2023 respecto al 2022. Si bien este crecimiento fue menor que el 17 % logrado en el 2022 respecto al 2021, estos datos demuestran la clara diferencia entre las tendencias que llevan las ventas no petroleras al exterior comparadas con las ventas a mercado interno presentadas al inicio.
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En el corto plazo, para cambiar la dirección que lleva la curva de crecimiento del país, es necesario enfocar esfuerzos en sectores exportadores cuyos consumidores no estén apremiados por la inseguridad y el desempleo. Sectores en los que compitamos con posibilidades de vencer contra cadenas de suministros de otros países. Sectores en los que nuestras ventajas actuales, comparativas y competitivas, hagan factible el crecimiento de sus ventas y con ello, el crecimiento del empleo que generan en el Ecuador.
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Por lo expuesto, es ineludible y urgente mirar estos sectores exportadores y a sus cadenas de suministros como objetivos nacionales para fomentar su crecimiento. Así como se declaró la guerra interna contra el crimen organizado, es necesario declararnos en guerra comercial externa y priorizar en la agenda nacional las necesidades estratégicas de las cadenas de suministros de nuestros sectores exportadores de mayor peso y potencial.
Mientras exportemos productos poco diferenciados respecto a la competencia internacional, los costos que se incurren para producir y vender definen si es posible el crecimiento. Por tanto, mucho haría el Ministerio de Agricultura y Ganadería si los pocos recursos que puede ejecutar los enfoca en aumentar la productividad de las cadenas de producción y exportación agropecuaria (banano, cacao, café, etc.). Si el valor de la tonelada métrica de camarón exportada (grupo arancelario 0306) durante el primer semestre del 2024 ha caído 21,38 % respecto al valor que esta tuvo durante el primer semestre del 2022 (Banco Central del Ecuador), lo que menos se espera del Gobierno es que priorice políticas y proyectos que palien esta desventaja. Si China subsidia a sus flotas pesqueras que pescan en aguas distantes con más de cinco mil millones de dólares al año y financió el transporte marítimo y la construcción naval por 132.000 millones de dólares entre 2010 y 2018 (Jude Blanchette, Jonathan E. Hillman, Mingda Qiu y Maesea McCalpin, CSIS), ¿cuál es el apoyo del Gobierno ecuatoriano a la estrategia de crecimiento del sector, hoy basada en la creación de valor?
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Es hora de escoger como nación a los verdaderos enemigos. Es hora de una nueva era de colaboración público-privada para la mejora competitiva. Es hora de competir para triunfar. (O)
