Apenas terminó su conferencia titulada “Los genios”, en honor a su última novela en la que enfrenta a dos aclamados escritores latinoamericanos, Mario Vargas Llosa y Gabriel García Márquez, Jaime Bayly contestó minuciosamente a una docena de preguntas del público que fue a verlo a la Feria Internacional del Libro de Guayaquil, y una de las últimas interrogantes fue ¿cuál será su próximo desafío literario?

“Siento que ya he escrito suficientes novelas inspiradas en mi vida. Me gustaría escribir novelas históricas”. Y dio detalles, dijo que prepara una sobre el político y militar venezolano Hugo Chávez Frías (1954-2013).

Las preguntas del público fueron de lo personal a lo literario, lo periodístico y lo político.

Pero dijo más. Ante la sala llena del Centro de Convenciones de Guayaquil aseguró que en el libro habrá “un personaje marginal, en las sombras, más o menos detestable, de apellido Correa”, ante las exclamaciones, risas y aplausos de la concurrencia.

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Jaime Bayly: Creo que este país no merece rendirle un homenaje a Rafael Correa, le ha dejado un legado malo a Ecuador

Pero luego se explayó todavía más, pues su ambición es crear un libro sobre las vidas de Chávez y Fidel Castro. “El título provisional es Cabrones de mala entraña”, una de sus expresiones favoritas, con las que ha tildado a varias personalidades, desde su padre hasta a Vargas Llosa.

Un asistente le manifestó su preocupación por el estado del periodismo en Ecuador y en su inquietud dio el nombre del político y periodista Fernando Villavicencio, candidato presidencial del movimiento Construye para las elecciones extraordinarias de 2023, asesinado el 9 de agosto de este año.

Bayly empezó cauto al responder, pero se emocionó de forma progresiva. “Has evocado a Fernando Villavicencio, al que rindo sentido homenaje a su memoria. Pagó con su vida el sueño de que este país sea más limpio, más decente. Fue un gran periodista de investigación. Correa lo persiguió de una manera viciosa, abusiva. Le mandaba a la policía a la casa, a confiscarle la computadora, los celulares. Tuvo que refugiarse en Lima”, recordó.

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Y se afirmó en este caso para sostener que el buen periodismo tiene que ser siempre opositor. “A mí me gustaría mucho, si fuera ecuatoriano, votar por el muchacho, Daniel Noboa”, dijo, generando comentarios por toda la sala. “No tengo nada contra la otra señora… Luisa González, de Correa”, agregó Bayly textualmente.

Y en ese mismo tono mencionó que el perfil del candidato Noboa demuestra “que la especie humana evoluciona para bien”. Bayly mantuvo entretenida a su audiencia, y rápidamente comentó que sí conoce a Álvaro Noboa, quien le parece “un gran personaje literario”.

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Pero para completar la respuesta, el escritor aseguró que de ganar Daniel Noboa, el papel de un periodista no sería adular ni acomodarse. “El buen periodista tiene que estar en la orilla contraria al poder, para criticar lo que está mal. Para aplaudir al presidente hay un montón de focas amaestradas. El buen periodista debe ser valiente. Esto es lo más importante. Más que ser inteligente, valiente. Perseguir la verdad. No el poder. La verdad”.

¿Y los escritores y periodistas deberían volverse a la política? De sí mismo dijo que es algo que solo le admite a su madre, pero que él conoce sus limitaciones y duda que sería un buen presidente, pues para empezar, se despierta al mediodía.

Antes bien, puso como ejemplo a sus personajes de Los genios, García Márquez y Vargas Llosa. “A Gabo le gustaba mucho la política, le gustaba conspirar. Le pidieron mil veces que fuera candidato a la Presidencia de Colombia, y no cayó en esa trampa. Mario (Vargas Llosa) cayó”.

¿Cuál era la diferencia entre ellos? “Admirándolos a ambos, la verdad es que cuando estuve con Gabo sentí que estaba frente a Dios. Además, era un Dios cojonudo. No estaba molesto, no te juzgaba, no te castigaba, no te exigía que fueras casto. Divertido, festivo, como a mí me gustaría imaginar que haya un Dios”. (I)

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