Los pistachos son una de los frutos secos más populares y consumidos a nivel mundial. Su sabor agradable y textura crujiente los han convertido en un refrigerio favorito de millones de personas.
Además, el perfil nutricional de estos los convierte en alimentos esenciales en la prevención de enfermedades cardíacas, óseas, la anemia, diabetes tipo 2, entre otros beneficios que son innegables, como señala al respecto El Mundo.
A pesar de todos estos atractivos, existe un efecto colateral que muchos desconocen: el impacto que tiene el consumo frecuente de pistachos en la salud de los riñones.
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¿Cuáles son los efectos de los pistachos en los riñones?
Los riñones son órganos vitales que cumplen funciones esenciales para nuestro bienestar general, como eliminar desechos y sustancias tóxicas del organismo.
Sin embargo, “los pistachos contienen potasio y fósforo, minerales que pueden ser difíciles de eliminar para los riñones con problemas”, indica al respecto Mundo Deportivo.
Por esta razón, el consumo continuo de estos frutos secos puede ser potencialmente peligroso, en especial para aquellas personas que tienen una salud renal comprometida, ya sea por cálculos o alguna otra enfermedad renal en específico.
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¿Cuál es el consumo recomendado de pistachos?
De acuerdo con Mundo Deportivo, los expertos recomiendan no consumir más de 50 unidades de pistachos a la semana para no exceder el consumo calórico y evitar poner en riesgo la salud renal.
Este consumo consciente y moderado de pistachos permite beneficiarse de su alto contenido en potasio, un mineral esencial que no solo ayuda a regular el equilibrio de líquidos y electrolitos en el cuerpo, sino que es capaz de mejorar la función renal en pacientes sanos.
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