La nueva planta que construye La Fabril en Montecristi toma forma. Ahí, esta empresa ecuatoriana del sector de alimentos y productos de cuidado personal y del hogar elaborará su línea de detergente líquido, suavizante y desinfectante, con ingeniería propia y 100 % ecuatoriana.

La inversión prevista es de $ 8 millones y arrancó en diciembre del 2022, y entre este año y el próximo se ejecutarán las diferentes fases del proceso, acordes al presupuesto para este proyecto, según indica la compañía.

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Los $ 8 millones estarán distribuidos para trabajos en infraestructura, aumento de capacidad productiva y maquinaria de última tecnología.

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Y esta inversión se realiza por etapas, arrancando con la construcción de la nueva infraestructura para la segunda torre de producción de desinfectantes y luego para la instalación de tanques y servicios, para, en diciembre, iniciar con la operación de la planta.

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El objetivo es incrementar la capacidad de producción de los productos en presentación doypack y flexibles, y con ello cubrir la demanda del mercado, reduciendo el costo de empaques y el gasto operativo de las líneas de llenado de este tipo de envase en el segmento de higienes y cuidado personal.

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“La nueva planta de nuestra línea de detergente, desinfectante y suavizante líquido es parte de nuestra estrategia de crecimiento sostenible, excelencia operacional, y apuesta por la sostenibilidad en cada uno de nuestros procesos; además nos permite cumplir con nuestro compromiso de ofrecer productos con atributos destacados y alta calidad a nuestros clientes”, señala el gerente sénior de Proyectos de La Fabril, José Cedeño.

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Y comenta que están “seguros de que esta inversión contribuirá a mejorar la capacidad de producción de la empresa y permitirá satisfacer las necesidades del mercado de manera más efectiva y sostenible”.

Las instalaciones de la planta serán de última generación y permitirán aumentar la capacidad de producción para ofrecer a los clientes productos de limpieza de alta calidad de manera más eficiente y de esta manera asegurar un retorno de la inversión efectivo. Para ello, se empleará tecnología que permitirá reducir los tiempos en los procesos y ahorrar el uso de recursos naturales, como agua y energía, en un 15 %.

Asimismo, destaca que la construcción de esta nueva planta contribuye al desarrollo de la economía local, porque son varias empresas las que han sido parte de este proceso.

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Con este proyecto, La Fabril considera que materializa su apuesta por la mejora continua de los procesos de producción de su línea de limpieza en doypacks y flexibles, empaques más sostenibles con menor consumo de materiales, ligereza y compacidad, facilidad de reciclaje y con capacidad para conservar el producto. Una gran alternativa de consumo mucho más consciente y óptima para el cuidado del ambiente.

La Fabril fue constituida en 1935 e inició sus operaciones en 1968 bajo la dirección de don Carlos González-Artigas Díaz. Esta empresa se dedica a la fabricación de grasas, aceites, oleoquímicos, biocombustibles y productos de aseo e higiene, con marcas como La Favorita, Girasol, Olimpia, Lava Todo, Perla, Ciclón, Family, Jolly, entre otras.

Como parte de su filosofía de innovación y cuidado ambiental, trabaja a través de un sistema de gestión sustentable, mediante el uso eficiente y reutilización de sus materias primas, la incorporación de procesos y tecnologías limpias, con el fin de minimizar el impacto de sus operaciones en sus zonas de influencia. (I)

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