Desde el 1 de julio del 2023, las tasas de interés del sector productivo -que incluye los subsegmentos corporativo y empresarial- tendrán nuevas reglas, las cuales les permitirán emprender una tendencia al alza y, por ende, ampliar la atención a posibles clientes de mayor riesgo. La Junta de Política y Regulación Financiera en su resolución JPRF-F-2023-070 aprobó una nueva metodología de cálculo.

Entre los principales cambios se establece que para fijar el techo se tomará en cuenta la tasa referencial de los últimos doce meses y se aplicarán dos desviaciones estándar. El cálculo del techo de la tasa y ya no será semestral, sino mensual.

De esta manera, las nuevas tasas de los subsegmentos corporativo y empresarial serán calculadas por la Junta de Política y Regulación Financiera para su aplicación desde el 1 de julio de 2023, las cuales deberán ser publicadas en la web del Banco Central del Ecuador hasta esa fecha, conjuntamente con las demás tasas vigentes para el periodo mensual.

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De acuerdo con Alberto Acosta Burneo, editor de Análisis Semanal, es positivo que se haya cambiado la metodología, para tratar de corregir el problema que se estaba generando de falta de crédito productivo. Explica que los subsegmentos productivos corporativo y empresarial estaban funcionando con los techos más bajos, en un entorno en el que el dinero ha estado subiendo. En este sentido, las entidades financieras estaban prestando con tasas pegadas al techo. Esto había traído como consecuencia que se restrinja el crédito para las operaciones de más riesgo: “El peor de los escenarios para un país que requiere reactivarse”, dice.

En enero de este año, la Junta había decidido incrementar las tasas, pero la metodología todavía indicaba que debía ser revisada cada seis meses. Esto significaba que no se podían monitorear adecuadamente los cambios del mercado. Desde la última revisión metodológica, la tasa volvió a pegarse al techo: en el caso del segmento corporativo, el techo estaba en 9,3 % y la tasa referencia en 9 %; el empresarial en 10,4 % mientras la tasa en 10,1 %.

Sobre el tema, Marco Rodríguez, presidente ejecutivo de Asobanca, opina que si bien es una buena noticia que las autoridades de la Junta Financiera hayan reconocido cuál es el problema respecto al impacto negativo de los techos a las tasas de interés -menor crédito a los sectores productivos- y que reconozcan que la solución pasa por flexibilizar los mismos, pero que lamentablemente la nueva metodología de cálculo no resuelve la esencia de la problemática. En este sentido, prevé que el impacto en una mayor entrega de crédito no será el que el sector productivo requiere verdaderamente.

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El gremio financiero revela cifras que muestran la contracción del crédito en Ecuador, debido a la política de techos de las tasas de interés. En el caso del sector productivo, las cifras oficiales indican que en los cinco primeros meses del 2023 los bancos privados otorgaron $ 12.397 millones en nuevos créditos, un decrecimiento en monto del -1,5 % entregado en el mismo periodo de 2022 ($ 191 millones menos).

Al mismo tiempo, las operaciones y clientes caen un 1 % (9.991 operaciones de crédito menos y una disminución de 4.141 clientes), lo que demuestra que el crédito se contrae.

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Al mirar las cifras del segmento productivo (corporativo, empresarial y PYME) el número de operaciones se redujo en 1.137 y hubo una disminución de 239 empresas en el acceso al crédito frente a 2022.

En el caso del microcrédito se evidencia una situación similar con operaciones de crédito que caen 7 % (16.335 operaciones menos) y 6 % menos en clientes nuevos (11.952 clientes sin crédito).

Tasas de interés en el mundo y en el Ecuador

Para buscar la recuperación de la economía, en un escenario de efectos de la pandemia y efectos de la guerra entre Ucrania y Rusia, que han ocasionado el incremento de la inflación, los bancos centrales de las economías desarrolladas y en vías de desarrollo han incrementado -de manera periódica- la tasa de interés de política monetaria de sus países. Esto, con la intención de frenar la demanda (consumo) y, por ende, enfriar la subida de precios (inflación), explica Rodríguez

Por ejemplo, la Reserva Federal (FED) incrementó la tasa de interés al pasar de 0,25 % en marzo de 2022 a 5,25 % a junio de 2023, un nivel registrado por última vez en 2007, y se espera que haya más incrementos o que se mantenga elevado por un buen tiempo.

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El incremento de las tasas de interés por parte de los bancos centrales provoca que el acceso a financiamiento internacional sea más costoso para las instituciones financieras y empresas de Ecuador, superando, en varios casos, los dos dígitos. Esto provoca que se deteriore el flujo de recursos nuevos que arriben al país para colocarlos en nuevos créditos.

El encarecimiento del financiamiento no solo viene del lado internacional, el costo del fondeo local también se ha incrementado. La tasa de interés pasiva referencial, es decir lo que pagan los bancos a sus clientes alcanzó el 7,03 % a junio de 2023, casi un punto porcentual por encima del año anterior, siendo una de las tasas pasivas más altas de la región.

Tasas promedio consumo:

  • En Estados Unidos la tasa promedio del crédito al consumo creció en más de 5 puntos porcentuales desde el primer trimestre de 2022, y se ubica en 20,09 % a febrero 2023.
  • En el caso de Colombia la tasa de interés para el crédito de consumo alcanzó los 44,64 % a junio de 2023, un incremento de más de 14 puntos porcentuales que junio de 2022.
  • En Perú la tasa de interés se ubicó en 15,44 % en junio de 2023, un incremento de 3,02 puntos frente a junio de 2022.

En Ecuador, la política de techos tasas, según expertos, no permite que puedan ir creciendo según el mercado. Sin embargo, el efecto es restricción del crédito. (I)