Este jueves, 11 de mayo, la estación de transporte regional Río Coca, en el norte de Quito, se vio afectada por un plantón realizado por la Sociedad de Empresas de Transportes de Pasajeros Nororiental C. A. (Sotranor).

Esto, debido a denuncias por presuntos actos de corrupción en la Secretaría de Movilidad al autorizar rutas de manera “acelerada e ilegal” a 22 buses de la Compañía de Transporte Intracantonal Asometrovip S. A. y Urbanquito S. A. que prestarán servicios en la av. Simón Bolívar hasta el sector de Eternit, en el sur de Quito.

Según señaló la empresa de transporte público intracantonal en un boletín de prensa, la Secretaría de Movilidad no podía actuar de ese modo ya que existe una ordenanza municipal en la que se establecería que dicha instancia no puede entregar rutas del corredor Simón Bolívar sin un concurso público previo.

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Además, se expuso que el pasado 5 de mayo la cooperativa Pichincha obtuvo el permiso para ingresar a la estación regional sin la operación legal.

Esto, según sostuvieron los representantes de esta asociación, llegó hasta la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop), quienes habrían constatado que existen anomalías en los documentos emitidos por la entidad.

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La protesta ocasionó el cierre total de la estación. Desde las 06:00, el grupo de transportistas mantuvo varias conversaciones con personal de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) que les pedían que habilitaran el ingreso de los buses para el uso de la ciudadanía. (I)