El volcán Cotopaxi emitió una nueva columna de vapor y gases que alcanzó los 1.500 metros sobre el nivel del cráter. El Instituto Geofísico (IG) informó de esta novedad captada por las cámaras de monitoreo a las 05:47 de este jueves 16 de marzo.

El coloso inició un proceso de erupción el 21 de octubre de 2022. En estos casi cinco meses ha registrado varias emisiones de material desde su interior.

La caída de ceniza ya se ha hecho visible en poblaciones aledañas a la montaña, incluso, ha llegado hasta el sur de la capital.

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Durante estos días el sector ha lucido despejado, por lo que las personas que viajan hacia las provincias del callejón interandino o Sierra centro han logrado captar imágenes del volcán.

Incluso, desde el sur de la ciudad o desde las parroquias rurales del DMQ reportaron que se lograba ver al Cotopaxi.

Implementos tecnológicos para monitorear al volcán Cotopaxi fueron donados por Estados Unidos al Instituto Geofísico

Según el reciente informe de vigilancia del volcán, en las últimas 24 horas había presentado 55 sismos de largo periodo y tres eventos de tremor de emisión (movimiento de material en el interior del volcán).

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En esta zona se registraron lluvias por lo que se generaron lahares, es decir, hubo el descendimiento de agua con material, sin embargo, no generó una mayor afectación.

Las entidades municipales y organismos de respuesta ante emergencias han realizado una serie de simulacros para reaccionar de manera oportuna ante una posible erupción volcánica. Esto, tomando en cuenta que según los registros históricos del IG, el Cotopaxi ha desarrollado erupciones cada 150 años aproximadamente.

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Ante una posible erupción del volcán Cotopaxi, la ceniza se dirigiría hacia la Costa con un 95 % de probabilidad

Justamente estaríamos entre el rango, pero los expertos han asegurado que no se puede prever una fecha estimada, solo mantenerse alerta e informado por fuentes oficiales.

Según la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, por el momento la situación se mantiene en alerta amarilla. Dependerá del comportamiento de la actividad volcánica para tomar nuevas medidas.

En el caso de una erupción se afectaría a un aproximado de 200.000 personas, según estudios de expertos. (I)