El número de turistas extranjeros que llegaron a Ecuador durante el primer semestre de este año es de 589.082 visitantes, lo que representa una reducción del 17,48 % respecto al mismo periodo de 2023, cuando entraron 699.074. La disminución es mayor si se compara con los 797.840 que arribaron en el mismo lapso del 2019, año previo a la pandemia, y de los que, para evitar una distorsión del análisis, se excluye a los 345.925 venezolanos que ingresaron al país en ese entonces como parte de la oleada migratoria originada por la crisis económica de Venezuela.
Las cifras oficiales reflejan que se mantiene la tendencia decreciente que se observó en 2023, por lo que el turismo no logra recuperarse del todo desde la pandemia, contrariamente a los países de la región que registran aumentos en el número de visitantes, como Colombia y Perú.
Hay un esfuerzo del régimen de Daniel Noboa para atraer visitantes, como la Casa Ecuador, en pleno centro de París durante los Juegos Olímpicos, cuya fachada estaba adornada de rosas locales; o el reciente cambio de la marca país, que maneja el concepto “Expandiendo nuestra luz”, lo que está vinculado a la ubicación y se suma a las que hacían referencia a los cuatro mundos representados por las regiones naturales.
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Pero las imágenes de los operativos policiales y militares, en medio del estado de conflicto interno declarado en enero pasado para enfrentar a las bandas del crimen organizado, que internamente son bien vistos, pasan factura en el exterior generando una percepción de inseguridad que preocupa a los visitantes. A esto se suman noticias recientes, como los disparos contra el bus en el que iban técnicos españoles que laboraban en una atunera de la parroquia guayaquileña Posorja.
En vísperas de un nuevo feriado, desde este 9 de agosto hasta el domingo próximo, la expectativa de los actores del sector se centra en el turismo interno. El último feriado del 24 de mayo generó un gasto en turismo de $ 35,9 millones, monto menor a los $ 48,7 millones del 2023. (O)
