Tras una temporada pasada por agua, el Liverpool intentó llevar a cabo una revolución total en su plantilla este verano. Jürgen Klopp vería cómo su medular, aquella que hizo estragos por Europa hace no mucho, quedaría desmantelada con los ‘adioses’ de Fabinho, Naby Keita, Chamberlain, James Milner y el capitán de la ciudad, Jordan Henderson.

La dirección deportiva de Anfield, encabezada por Jörg Schmadtke, se lanzó al mercado con prácticamente un cheque en blanco para la reconstrucción del centro del campo red, pero se terminaría de encontrar con una realidad pasmosa, recibiendo un portazo en la cara por parte de la gran mayoría de estrellas a las que se contactó.

Si bien la dirección deportiva logró cerrar dos fichajes estelares en los volantes Alexis Mac Allister y Dominik Szoboszlai, la reencarnación del mejor Coutinho, la realidad es que fueron las únicas contrataciones que se efectuaron con éxito debido a un factor fundamental, la cláusula de rescisión.

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Ambos jugadores abandonaron el Brighton y el RB Leipzig, respectivamente, luego de abonar dicha estipulación contractual, los únicos en poder hacerlo. Sin embargo, Jürgen Klopp no lograría hacerse con una pieza esencial, aquella que intentaría hacer olvidar a Fabinho. Fueron varios los jugadores por los que se desplazó una oferta, recibiendo un rotundo ‘no’ por todos y cada uno de ellos.

Moisés Caicedo

La de Caicedo fue, sin duda alguna, una de las operaciones del verano. En un fin de semana, el futuro del ecuatoriano pasó de un claro tono red o uno totalmente opuesto, el Blue del Chelsea. El Brighton abrió una puja por su estrella luego que las negociaciones con el Chelsea se quedaran en punto muerto. En ese sentido, el Liverpool aprovechó esa situación para desplazar una oferta sin parangón, 140 millones de euros, siendo aceptada por las Gaviotas.

“Puedo confirmar que el acuerdo está acordado con Brighton. Con el jugador y los agentes tendremos que verlo. ¿Médico hoy para Moisés? No puedo decirte, no lo sé . Ya veremos. El club realmente lo ha estirado”, llegaría a afirmar Jürgen Klopp sobre la posibilidad de incorporar a Caicedo. Sin embargo, sería el propio jugador el que terminaría por echar para atrás la operación para cumplir el sueño de su infancia, jugar en Stamford Bridge.

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André Trindade

Mucho antes de lanzarse por Moisés Caicedo, el Liverpool intentó por activa y por pasiva llevarse a una de las revelaciones de Brasil, André Trindade. Como ya adelantara AS, los Reds hicieron todo lo posible para lograr cerrar la contratación del internacional brasileño, pero en esta ocasión sería el Fluminense el que echaría para atrás la operación. Llegando a recibir varias ofertas por el pivote, valoradas en 25 y 35 millones cada una, el Flu fue claro: “André no estaba en venta”. La directiva del club aludió a la más que potencial oportunidad de oro para alzarse con la Copa Libertadores para no soltar a su estrella, disputando ahora mismo las semifinales de la máxima competición de Sudamérica.

“El director ejecutivo del Liverpool se puso en contacto conmigo directamente. Le respondí: ‘Amigo, no vendo jugadores ahora ni entrego ahora. Si quieres comprar ahora para recibirlo en enero, podemos empezar a hablar, o si quieres esperar hasta diciembre, hablamos en diciembre”, comentaría Mário Bittencour, presidente del equipo carioca, sobre lo sucedido con André Trindade este verano.

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Bruno Guimarães

El Liverpool intentó hacerse con los servicios de Bruno Guimarães, una de las sensaciones de la Premier League la temporada pasada, en los últimos días de mercado. Por el exjugador del Lyon, considerado uno de los mejores jugadores del campeonato inglés, el conjunto red llegaría a ofrecer la friolera de 100 millones de libras (más de 116 millones de euros al cambio), encontrándose con un rotundo ‘no’ por parte del Newcastle. Los Magpies se encuentran en un año crucial dentro del megaproyecto saudí, volviendo a disputar la Champions, luego de dos décadas fuera, y encontrándose en el grupo de la muerte junto con el PSG, Borussia Dortmund y AC Milan.

El estatus de Guimarães dentro de la plantilla le convertirá este año en una de las piedras angulares de Howe para intentar luchar por todo. Sin embargo, el nombre del carioca está apuntado en ‘rojo’ dentro de la hoja de ruta del Liverpool para el corto-medio plazo. Eso sí, Bruno no será nada barato, teniendo que ofrecer una cantidad mucho más alta a lo que se llegó a proponer este verano. (D)