Nota de la Redacción: Reproducimos el pódcast ‘Entre dos’, de EL UNIVERSO, con Álex Vizuete, para quienes prefieren leer.


La carrera de Álex Vizuete va para arriba. El actor y creador de contenidos no ha parado este 2023, a tal punto que tuvo que posponer su matrimonio por falta de tiempo. Presentaciones, pódcast y entrevistas copan su día a día, pero no afectan su buen humor.

Publicidad

Se declara apolítico. En el pódcast Entre dos, de EL UNIVERSO, revela por qué no le interesa la política y por qué no es parte de MasterChef Celebrity Ecuador, aunque se considera una celebridad y fue la tercera persona a la que propusieron integrarse a este famoso reality internacional.

Álex es un actorazo ecuatoriano, aunque él dice que nació en Estados Unidos

¡¡¡Dice!!! Guaaaoo (ríe).

No he visto el pasaporte... Bueno, sí nació en Estados Unidos. ¿Eres más ecuatoriano o más estadounidense? Bienvenido a ‘Entre dos’...

No, no, gracias por la invitación. Obvio, muchísimo más ecuatoriano, tan ecuatoriano que no me entra ni siquiera el inglés, no me entra ese idioma de miércoles, pero ahí vamos avanzando. Es que solo nací en Estados Unidos y fin.

¿Y cómo es esa historia de que naces en Estados Unidos?

Mis papás se fueron en busca del sueño americano, ¡ja, ja!, y ellos pasaron allá tres años trabajando. Trabaja y trabaja, y en esos tres años, un añito de travesura, ¡raaa!: hacía mucho frío y salí yo. Se quedaron un año más y, ¿qué pasa?, mira cómo es la vida, el plan era quedarse allá. Yo tenía que haberme quedado allá y todo, y mi mamá se regresaba porque yo tengo una hermana y a mi hermana se la había dejado acá en Ecuador, y mi mamá se iba a regresar a recoger a mi hermana, la llevaba y éramos todos gringos, rubios, ojos azules y guapos. Pero né. Mi papá le dice mi mami: “No, Juanita, yo voy, yo la voy a traer”. Y mi mami le decía “No”, porque mi papá la última vez que había ido (a Estados Unidos) había tenido un problema con los sellos, la visa; entonces, mi papá peligraba, pero mi papá hecho el cabeza de hogar: “No, yo me traigo a Gabriela”, mi hermana, “tú tranquila, quédate con Álex, yo ya la traigo”. Mi papá llega a Ecuador, le descubren ahí una vaina rara en el pasaporte, todo, le quitan la visa y se jodió y no puede volver; y entonces mi papá y mi hermana se quedaron aquí y mi mamá y yo allá gue, gue (llanto de bebé), y mi papi llora y llora todos los días, ruega y ruega pa que se regresa conmigo.

Publicidad

Y te sacaste los lentes de contacto y de regreso.

Claro, me puse el cabello negro; allá yo era rubio, pero fallé, falle. Llegué y me ecuatorianicé.

¿Qué disfrutas más: hacer teatro, películas, series o hacer pódcast? Lo digo bien para que no te burles.

¡¡Qué bien!! Gracias, se agradece mucho (ríe a carcarjadas). No, definitivamente teatro. Siempre lo he dicho: al teatro no le gana nada ni nadie, el teatro es donde las papas queman, ¿me entiendes?, porque el teatro es una sola oportunidad. En el resto de cosas puedes editar, puedes repetir, puedes volver a hacer, puedes hacer que actores muy malos se vean muy buenos (imposta la voz), puedes hacer de todo, maravillas, pero en el teatro no; en el teatro la cagaste, la cagaste; fallaste, fallaste; te quedaste mudo, ya todo el mundo sabe, bu, pésimo, buu chao. Entonces, eso a mí me fascina.

Álex Vizuete ganó como ‘mejor actor e influencer de Latinoamérica’ en Premios Ícono 2023

Álex, si tuvieras que elegir entre los pódcast ‘De qué va’ y ‘Un sorbito de Opinión’, ¿con cuál te quedarías?

¡Dios mío!, hasta aquí llegamos, cuídesen, pasen bien (bromea y ríe). Chuta... nunca me habían hecho esa pregunta. ¿Por qué tuvo que llegar el día? Bueno, para empezar, Víctor (Aráuz) y yo siempre decimos: De qué va nunca fue un pódcast, jamás fue pensado así; de hecho, se sale mucho porque tenemos sketch, tenemos segmentos, tenemos entrevistas, a veces no a veces sí, a veces fregamos, a veces jodemos, a veces estamos en el estudio, a veces estamos afuera, etc., etc., ¿me entiendes? Pero, si me pones a elegir (piensa y ríe)... No, yo me quedo con De qué va. ¿Por qué? Porque fue mi bebé, fue nuestro hijo, viii, lo creamos en pandemia, bueno, en pandemia nacieron muchísimas cosas, muchísimos emprendimientos

Y niños también, niños de verdad también.

Así es, ¡je, je! Entonces, desde que lo creamos, mira, llevamos tres años sin parar. De qué va nos dio nuestra primera gira en Estados Unidos; o sea, yo en Estados Unidos no me he presentado con nada, con nada nunca, y me presenté con De qué va, y tenemos fanáticos y sold out, ¿me entiendes? Es como que De qué va nos sacó de aquí, nos ubicó en el mapa, un mapa muy interesante.

Te mostró que sí se puede ser profeta en tu tierra, en tu tierra gringa y tu tierra ecuatoriana.

Exacto, así es. Entonces, hemos hecho giras nacionales, internacionales, todo; o sea, De qué va realmente ha sido una locura, y saber que nosotros lo creamos desde cero, desde nada, desde estar encerrados en una pandemia hasta ahora, a ese cariño no lo cambia nada. Entonces, si me pones a elegir, nada (canta): “Si me dieran a elegir”, ya me quedo con De qué va.

En ‘De qué va’, Víctor y tú hablan mucho de su vida. ¿Exageran un poquito o nos cuentan la verdad?

Te cuento que al menos yo, a título personal, a mí sí me ha tocado exagerar muchísimas cosas de mi vida; por eso, no crean todo lo que está en redes, porque (ríe) hay muchas mentiras, pero funcionan, sirven. Bueno, esto es básicamente para mi mami, porque mi mamá, yo termino de grabar un programa y bajo y mi mami: “Entonces tú sí has tomado...” (simula pucheros). Y yo: “Mami, no, era agua, pero la metimos en la botella”, “Álex no, no; entonces, tú sí...”, “No, mami, eso nunca pasó”. ¿Me entiendes? Es como... pero es divertido, es chévere. Yo a mi mami le explico cosas que ella no entiende.

Y también la has llevado a ‘De qué va’

También ha estado ahí, la hemos llevado, la hemos sentado. Justamente hace un momento estábamos conversando de eso. Esto entre paréntesis: se ha prostituido un poquito la palabra influencer, que hasta a mi mamá le han dicho: “Usted, Juanita, es influencer”. No, ponerse una cámara enfrente y hablar cualquier cosa tampoco es ser influencer; es otra nota.

¿Tú eres ‘influencer’?

Te cuento que no, no ¿Por qué? Yo soy creador de contenido, bueno, soy actor, ese es mi título y hasta la muerte ya nadie me lo quita. Soy actor y creador de contenido, que es distinto. Un influencer, chuta: influencer Luisito Comunica, ¿y por qué? No porque esté afuera y no porque los nuestros no servimos para nada porque somos ecuatorianos, no, sino porque yo veo un video de ese pana y me dan ganas de recorrerme todo el mundo, él me enseña el ají no sé cuentito y yo quiero, quiero probar, influencia muchísimas cosas en mí, y como él muchos más. Entonces, el influencer, valga la redundancia, es el que influencia, y yo sirvo para hacerte comprar nada. Tú nunca me verás en un video: “Hola, compra esta crema, te sirve porque, mira, a mí...”, no, yo no, yo no; yo a veces hasta rechazo esas cosas, porque yo no sirvo, a mí no me sale. Yo sirvo para crear contenido y, a través de la comedia, hacerte conocer un producto, que es distinto.

Lo que sí es verdad, Álex, es que hiciste un pedido de matrimonio muy romántico, hermoso. ¿Cuándo es la boda?

¡Guaaaoo!, esa es la pregunta del millón siempre. Bueno, la tuvimos que posponer un poquito debido al éxito de este año (ríe). Nos íbamos a casar este año, pero, bueno, la vida, gracias a Dios, nos sorprendió de una manera en que no hemos parado, no hemos parado. Gigita incluso en este momento está en MasterChef Celebrity. Se me va, se me va, pero yo me quedo aquí haciendo mil cosas más; luego ella viene, regresa, y yo me voy, me voy a Estados Unidos con la última gira de este año, 2023. Entonces, ¿me entiendes? Hemos estado a full todos los meses que no... no encontramos nunca un huequito para el matrimonio, pero sabemos que el próximo año es prioridad.

Gigi Mieles también es creadora de contenido y actriz; es la novia de Álex y la hizo llorar a mares cuando le cocinó un arroz con pollo. ¿Ella sabe cocinar, ya que se va a ‘MasterChef’?

Chuuuta, bueno, no sé si estoy autorizado a decir esto... Nooo, mentira. O sea, a ver, ella lo hace, ella sigue directrices y lo hace, no es que no sabe y ella en su vida ha agarrado un cuchillo, no: ella sí lo ha hecho. Lo hace, pero no es una vaina que ella te diga: “Sí, yo amo cocinar”, no, para nada, pero igual allá los van a preparar, etc., etc., van a estudiar, y eso sí: a ella estudiando no le gana nadie; esa mujer es una cerebrito, una comelibros. Ella está loca, o sea, a ella le encanta, le encanta estudiar, le fascina.

Y te conviene que aprenda a cocinar bien.

Por supuesto, yo le voy a decir: “Mi amor, todos esos platitos que te rechazaron allá hágamelos a mí; yo soy tu Raush (chef Jorge), yo pruebo”.

¿Y a ti no te ofrecieron ir a ‘MasterChef’?

Sí, yo estuve entre los tres primeros que les ofrecieron ir a MasterChef; de hecho, íbamos a ir Gigi y yo; eso iba a ser un bum, se iba a caer el país (ríe), pero no pude, por temas laborales, por temas de trabajo yo no pude, me bajé de la camioneta. Yo estoy ahorita haciendo funciones de teatro, estoy en temporada teatral, termino esta y arranco otra en octubre, y eran fechas totalmente separadas.

¿Te sientes una celebridad?

¡Guaaaoo!, o sea, sí, ya (ríe). Sí, ya sí. Es que hay gente que dice: “No, para celebridad Mel Gibson”, y todo como siempre lo de afuera, y lo de aquí, nunca. Pero ¿qué te puedo decir? Sí.

Además, tú le diste la voz a Spiderman.

Así es, y desvoz no hay. O sea, sí, sí, yo estuve ahí; he hecho, muchísimas cosas.

¿Y qué significó para ti darle la voz a Spiderman?

No, o sea, fue una experiencia... fue muy rápida y muy corta, sí, pero fue una experiencia que no te la da nadie más, ni nada, estar ahí, ver en bolita y palito las escenas de la película, porque yo la vi ahí y todos los muñequitos caminaban así. Yo igual lo hice vía remoto, yo estaba aquí en Ecuador y a México hice la llamada con los directores; eran dos mexicanos y dos gringos, estaban ahí toditos. Yo les veía la cara, el guion estaba aquí, las escena acá, yo tenía que hacer todo eso y los audífonos y los estudios y blablá, ¿me entiendes? Esa experiencia no te la da nada, o sea, y es fantástica, es espectacular, yo estaba nerviosito como nunca, pero es increíble y saber que lo hice, que eso yo lo he hecho en mi vida es fantástico, porque nadie me lo quita, es muy mío, y ver la sonrisa de mi hijo y ver a mi hijo todos los días llegando de la escuela diciendo “Papá Spiderman” es lo máximo (sonríe).

Álex, ¿qué te falta por hacer?

¡Guaaaoo!, ¡qué bella pregunta! ¿Qué me falta por hacer (se raspa la garganta)? Presentarme en España, que vamos a eso, apuntando, presentarme en España. ¿Qué me falta por hacer? Quiero, yo siento, yo quiero hacer una serie o algo o una película. Yo, yo, yo lo quiero hacer todo.

Producir, dirigir...

Exacto, eso me falta hacer. Ya he hecho series, pero a nivel de redes sociales no: para un canal, porque cada vez existen menos canales. Pero, sí, yo quisiera hacer o una película o una serie toda bajo mi dirección, mi guion y todo eso.

Y ahora que dices ‘menos canales’, ¿cuál es la diferencia entre estar en medios digitales y en la televisión? Cuando eras ‘el Bryan’, que además —ahí voy a hacer dos preguntas en una— una de las cosas, por decir curiosas, acá en Ecuador nos acostumbramos a un personaje y es ese personaje el que marca la carrera, pero tú eres Álex Vizuete.

Exacto, pero, bueno, y me costó... ¡ah!, me costó. Yo casi por dos o tres años fui solo Bryan, Bryan, Bryan, y yo ya ni hacía del Bryan, y era Bryan, Bryan Bryan, pero ¿cómo te llamas?, ¿cómo se llama el Bryan? Álex Vizuete. Me costó como que me nombre, o sea, Álex Vizuete el actor, y Álex Vizuete te ofrece esta cantidad de personajes. Pero, bueno, lo logramos, y yo siento que lo logramos netamente por las redes sociales; a raíz de las redes sociales lo logramos full, porque yo fui mostrando todo lo que yo podía hacer, lo que sabía, lo que quería. Y, respondiendo a la primera pregunta, es, o sea, la diferencia es abismal de la televisión con las redes sociales; es abismal. De hecho, el otro día conversando con una gran amiga que sigue en televisión, en el mismo canal incluso, en TC, que yo renuncié hace siete años ya, yo me salí de ahí, hace unos seis o siete años... Y conversar con ella y que ella me cuente que la directiva sigue pensando igualito que seis años atrás fue como “¡wow, no te lo puedo creer!”. Esa gente no avanza, pero es porque no quieren, realmente yo no tengo idea por qué, pero sí es feo, si es turro, es jodido, porque en la televisión pudiéramos hacer tantas cosas chéveres en televisión, y las pocas cosas que se han atrevido a cambiar cosas ha durado muy poquito. Yo estuve en parte, nosotros tuvimos una programa que se llama Fake news con David, con Víctor y conmigo en TC, y ese programa parte un poco de la estructura de nuestro programa de YouTube De qué va, se atrevieron a eso, pero fueron solo 16 programas. Igual pegó, gustó, a la gente le encantaba; hicimos cosas bacanes, pero el canal dijo: “No, no, ahí nomás”.

¿Qué es lo que hace que las marcas, a pesar de la audiencia, no pauten en este tipo de programas en YouTube?

Es que sí pautan con nosotros, gracias a Dios de eso vivimos. Yo ya voy para siete años trabajando en redes sociales, solo en redes sociales y de mis redes sociales salen los shows, stand-up comedy, el otro programa, el pódcast de ahora, es como fun, fun, fun. Si yo no hiciera nada, si yo parara de hacer, probablemente las demás cosas no se dieran. Y sí, sí, nosotros vivimos de eso, de las redes sociales, las marcas que vienen y pautan por lo que uno hace, al menos yo ya lo tengo medidito. A mí me pasa que es como que la pego en una, ¡o qué se yo!, me voy a Estados Unidos a hacer un show, regreso y “Uyyy, se fue a los Estados Unidos”, las marcas te llaman y qué lindo, o ahorita que estamos en el pódcast, esa vaina pegó como una locura, Sorbito de opinión, fun, las marcas siempre van con el más pegado, por así decirlo, en la actualidad. Entonces, eso, pero yo me preocupo de mantener eso.

Y, entonces, ¿por qué la televisión no puede acoger este tipo de productos?, ¿o no son para televisión definitivamente?

Realmente no tengo idea, te lo juro que yo también me lo he preguntado: por qué no apuestan a algo más con gente joven, ni siquiera conmigo, no es porque no apuestan a mí, no, no hay más gente joven que se dedica a hacer esto, que hace humor, que hace comedia y que hace redes sociales, pero no, no, no. Imagino que tiene miedo, no lo sé, realmente me he hecho mil veces esa pregunta. No sé qué pasa en la tele, por qué vuelven a lo de siempre, a lo de siempre, a lo de siempre. Chuta, ya no hay nada más que hacer, reality, la vieja confiable, reality, es como: “Hermano, tienes tantas cosas por hacer”. Pero, bueno, no sé.

‘Me cabrea la gente bruta’, confiesa Víctor Aráuz, el actor al que su amigo Efraín Ruales le enseñó que la vida es hoy

¿Crees que se debe estudiar para llegar a la actuación, para tener uno de estos espacios en redes sociales y poder llevarlo con más profesionalismo?, ¿o cualquiera se sienta y habla?

Mira, depende, porque depende de qué quieras hacer. ¿A qué me refiero? Yo soy actor de profesión y yo he sido parte de esa gente que, chuta, sí se enoja porque toma la actuación como “Ah, no es una carrera, no es algo con lo que puedas sobrevivir”. Aquí yo llevo once años sobreviviendo de actor, y digo sobreviviendo pero me ha ido superbién, gracias a Dios. Entonces, yo sí soy netamente partidario.

Entonces, también exageras cuando dices ‘sobreviviendo’, porque te va bien...

Sí, gracias a Dios, pero es como eso, si te preparas todo es mucho mejor y tu nivel se demuestra, o sea, hoy en día hay mucha gente que simplemente se ha puesto la cámara enfrente y se hace viral por las redes sociales, y está bien; pero si ya alcanzas eso y quieres más, prepárate, hay personas que alcanzan eso y ahí se quedaron, se quedan en la zona de confort. Yo no puedo, pero yo, Gigi también es actriz, es licenciada en Comunicación y Artes Escénicas; entonces, los dos todo el tiempo estamos preparándonos, estamos enseñando cosas: “Oye, hay este taller, pilas, vamos”. En nuestro plan también está irnos a Colombia a hacer de vez en cuando talleres, vainas actorales, todo eso y quitar un poco el tabú de la sociedad de hoy en día. Parece mentira que todavía hay de que los actores somos pobrecitos, no les va bien, de hecho, te voy a contar... Es la primera vez que voy a contar esto que me pasó recién: yo, ahorita, bueno, Gigita y yo estamos buscando casa o departamento, estábamos buscando mudarnos y todo, y ya teníamos todo, ya teníamos todo, ya el departamento ya yo me cambiaba que si el jueves, el lunes lo fui a ver, el jueves me cambiaba, que camión, mudanza, los papeles entregados, maravillosidad, y de repente el martes me llaman: que ya no, ¿por qué! ¿qué pasó!, porque la dueña del departamento considera que nuestra profesión no es algo sostenible, que en cualquier momento no vamos a poder pagar. Y yo así (gestos): ¡qué!, ¡pero qué!, ¿qué, yo me hice actor ayer?. Llevo once años haciendo esto, no puede ser posible, o sea, es una carrera y me pidió de todo, los últimos seis meses de declaración al SRI, buró de crédito, todo lo que cualquier persona, cualquier médico, cualquier abogado, cualquier actor de profesión pueda tener.

Todavía hay prejuicios, entonces.

Existe eso, y nos quedamos sin departamento porque somos actores. Nos pasó y fue un bajón horrible, para Gigi, qué, y ella recién graduadita, se graduó hace meses, pero no significa que ella hace meses ejerce. Ya lleva cuatro años haciendo esto y le va tan bien como a mí.

Ella también es hija profesional de la pandemia.

Exacto, exacto.

Son de los que la pandemia les vino bien, porque hubo mucha gente que la pasó realmente mal y ustedes daban un poquito de alegría.

Claro, totalmente. Sí, estas cosas pasan, turro.

Álex, me contaron por ahí que a ti no te gusta la política. No te voy a preguntar por quién vas a votar, pero sí quiero saber si es verdad que eres de los que llaman a un amigo cuando vas camino a las urnas para preguntarle por quién dar el voto...

Sí, sí, sí, o sea, yo estoy muy alejado de la política, demasiado, y no por un tema de que “no, es que tienes que saber porque tu país no sé cuantito”. A ver, yo sí soy de frente, yo no me involucro en eso porque a mí me parece muy turbio, no entiendo, no comprendo, hay cosas muy obvias para mí que digo: “¿Por qué, por qué hay tanto dinero ahí metido y no pueden mover un dedo, por qué? Mira, hay tanta injusticia, tanta vaina que para mí, para un ciudadano común y corriente, yo digo: “Púchica, si es el presidente, puede hacerlo, ¿o no?”. Y, bueno, parece ser que no. Entonces, etc., etc. Entonces, yo decido, ¿sabes qué?, no meterme, desconocer, yo nunca he estado con ningún partido político, nunca he trabajado con ningún partido político, número uno, porque me da miedo (ríe), número dos, porque no lo entiendo, y número tres, siento que es muy fuerte hacer eso.

¿Y qué crees que es lo que hay que cambiar? Como ciudadano común, ¿qué es lo que tiene que cambiar en la política para que mejore la situación de un país como Ecuador?

La raíz, o sea, tiene que cambiar totalmente la raíz, porque, la raíz de todo, de los políticos, de entidades como la Policía, de la educación, de la medicina, toda esa raíz, yo siento que la raíz está podrida, está contaminada que jalan todos para su lado, a mí me ha pasado, a una amiga muy cercana a mí, nos fueron a ver a una presentación y afuera les robaron, les rompieron el vidrio y se le llevaron la laptop, sus cosas, y ellos los tenían rastreados con el iPhone y había motos de Policía, carros, policías; ellas se acercaron y les dijeron: “Están aquí, en Ayacucho, esquina y ni sé qué, por favor, ayúdennos, no podemos ir nosotros porque son ladrones”, quién sabe con quién se van a topar, y ellos ahí arrimados en la moto: “No, no, acérquese a hacer la denuncia y en cinco días...”, “pero están aquí, las cosas que me robaron, ayúdeme, por favor” y “no, no, no”, y no pasa nada, ¿me entiendes? Esos policías no se quedaron sin trabajo, nadie les llamó la atención, por último ni se enteraron lo que esa noche pasó, ¿me entiendes?, en qué país estamos...

Lamentable lo que ocurre en el país. Con el tema de la inseguridad incluso muchas personas han pensado en irse de Ecuador. Tú que tienes pasaporte americano, ¿lo tienes planeado?

Sí, claro, de hecho, ya estoy elaborado el plan. He estado poniendo mis papeles el regla, mi futuro no está aquí, y no por una vaina, lamentablemente me lo está adelantando el tema de la delincuencia, la inseguridad, pero yo siempre he estado enfocado de que yo allá...

Entonces, también hay que arreglar los papeles de Gigi. ¿Te la vas a llevar?

Obvio, yo me voy con mi chivillo, amarro mi chivillo.

El actor Álex Vizuete estuvo en el pódcast 'Entre dos' y reveló que el próximo año será su boda con Gigi Mieles.

¿Por qué dices que tu vida es aburrida si haces reír tanto a los demás?

O sea, no es que mi vida es aburrida, sino que a mí no me han pasado tantas cosas como probablemente a los demás, a mí me piden contar anécdotas y todo, y yo es como: a ver, yo siempre fui como un niño muy bueno, yo nunca me he metido en problemas, yo sigo demasiado las reglas hasta el sol de hoy; entonces, las típicas historias son “un día nos metimos a una casa y no ahí ni se qué y la policía nos sacó”, nunca, eso nunca iba a pasar en mi vida, ¿me entiendes? Entonces, yo siempre he seguido las reglas toda mi vida. Yo no tomo, yo no fumo, yo no me he drogado nunca, y la gente me dice: “Pero en algún momento una experiencia con la marihuana”, no, porque nunca he probado y no me hace falta, porque le tengo miedo, le tengo miedo a todas las drogas, yo le tengo miedo a todo y por eso sigo con vida y muy sano probablemente (ríe). Entonces es como, a eso me refiero, yo no tengo muchas historias así loquísimas de “un día casi me muero y yo alcé la cabeza y pasó un tráiler”, no, miércoles, a mí no me ha pasado, a mí nunca me ha mordido un perro, nunca me he roto un hueso, a eso me refiero, muy aburrido, nunca me ha pasado.

Pero ¡qué bueno que no te haya pasado! No es aburrido: es muy buena suerte o que Dios te ama. Gracias, Álex, por acompañarnos en ‘Entre dos’. Esta es tu casa.