Para los que vivimos el surgimiento de los Beatles desde Guayaquil en esos dislocados años sesenta, una época donde la comunicación virtual solo era un fenómeno en las películas de ciencia ficción, es casi imposible seguir la ilimitada variedad de exposiciones que los cantantes de hoy traen a internet y ni decir lo que TikTok puede lograr con sus flashes inmediatos. “Vivimos otra era”, ok, y que nadie se queje. Entonces alguien como Billie Eilish a sus 19 años se puede juntar con la prodigiosa batuta del venezolano Gustavo Dudamel en una fusión muy esperada.