La legisladora de Tungurahua por el movimiento Construye Ana Mercedes Galarza considera que el sí debe imponerse en la pregunta F para gantizar de raíz el control en el tráfico de armas. No duda de que esta vez en la consulta popular la delincuencia organizada financie la campaña por el no, a través de sus “empleados políticos”.

¿Usted apoya la cooperación de las Fuerzas Armadas en el control de armas en las cárceles y sus inmediaciones?

Me parece importante la presencia permanente de las Fuerzas Armadas para evitar el ingreso de armas, de cualquier tipo a los centros de rehabilitación social; hay que garantizar un estricto control y detectar los mecanismos que usa la delincuencia organizada para el tráfico interno de armas y municiones.

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¿Es fundamental la cooperación militar en los centros de rehabilitación social?

Es fundamental. Vemos cómo dentro de las cárceles, en los amotinamientos, hay armas de todo tipo que ingresaron sin el menor control, imagínese que los guías de las cárceles tienen solo toletes y los delincuentes armados hasta los dientes.

¿Quién falla en ese control de armas en las cárceles?

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El problema es la frase que utilizan los delincuentes, plata o plomo. Entonces, compran a algunos funcionarios y guías penitenciarios quienes terminan trabajando a favor de las mafias, donde mucho tiene que ver el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores.

¿Usted cree que las Fuerzas Armadas pueden lograr este objetivo de control, y cómo evitar su filtración del narcotráfico y delincuencia organizada?

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Ese es el problema, porque el narcotráfico y la delincuencia organizada siempre que se ha visto un nuevo control ha buscado la forma de contaminar a las personas que hacen esa tarea, ese es un problema que siempre ha existo; y claro que podría suceder con las Fuerzas Armadas.

Algunos analistas sostienen que la presencia de las FF. AA. en las calles y cárceles ya está regulada en la ley, y por eso es innecesaria la consulta, ¿usted qué cree?

La Asamblea Nacional todo el tiempo está reformando leyes, el problema es cuando estas no se aplican, y muchas veces por desconocimiento o falta de voluntad política. También sucede que el reglamento permite una aplicación blanda de la normativa o es ambigua.

¿Qué podría cambiar con la consulta popular sobre la cooperación de las FF. AA., en las cárceles, algo que podía hacerlo la Asamblea?

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La Asamblea Nacional podría hacer muchas de las cosas que se encuentran en la consulta popular; lo que pasa es que las reformas al Código Orgánico Integral Penal (COIP), muchas eran necesarias, pero se aprovechan de esa coyuntura y contaminan esas reformas y quieren meter otras cosas dentro de un paquete y lograr la impunidad que muchos desean.

¿Desde ese punto de vista, usted cree necesaria la consulta popular?

Los $ 60 millones, que el Estado ecuatoriano no tiene, si se hubiera podido ahorrar vía Asamblea Nacional, el problema es que cuando intentamos hacerlo el correísmo se aprovechó y quería meter textos que favorecen a la impunidad, como por ejemplo, que los asambleístas tengan acceso a la información de las indagaciones previas de los casos penales que se investigan en la Fiscalía. Esa era la función de Ronny Aleaga, a favor del narcotráfico, ahora quieren legalizar los campaneros.

¿Entonces, las preguntas de la consulta ayudarán a delimitar lo que se debe reformar en el COIP?

Así es, la Asamblea Nacional no podría salirse más allá de lo que la ciudadanía apruebe en las urnas.

¿Tomando en cuenta su posición, usted llama a los ciudadanos a votar sí ?

Llamo a la ciudadanía a que lea y analice cada una de las preguntas de la consulta popular, que no solamente vote sí o no, porque una persona se lo ha dicho, sino porque va informado a las urnas, que sepa cuáles son las consecuencias de las preguntas.

¿Usted no cree que esta consulta popular sirve de termómetro para una posible postulación a la reelección del presidente Daniel Noboa?

En principio la consulta popular del presidente Noboa tenía y tiene ese espíritu de medir su popularidad, porque las primeras preguntas que envió estaban mal hechas; el movimiento Construye tuvo que hacerle los deberes para que la Corte Constitucional apruebe las preguntas y pueda existir consulta popular.

¿Ustedes ayudaron en la reformulación de las preguntas?

Nosotros propusimos preguntas como lo de la extradición.

¿Por esa razón ustedes motivan el voto por el sí en la consulta popular?

Claro, en coherencia porque si bien es cierto la consulta es llamada por el presidente Daniel Noboa, pero parte de las preguntas que están en la consulta popular fueron propuestas por el movimiento Construye, con base en el plan de trabajo de Fernando Villavicencio. Entonces, de manera coherente sí estamos animando a la ciudadanía a que apoye la consulta popular.

¿Entonces, no se puede perder la consulta popular?

Yo espero que no vuelva a ganar el no, porque la vez pasada en la consulta de Guillermo Lasso, cuando ganó el no, ganó la delincuencia organizada, porque fueron los narcotraficantes los que financiaron la campaña en contra de la consulta y sus empleados políticos los que promovieron el no. (I)