Luego de ocho meses en los que se ha venido desarrollando un proceso de diálogo entre el Gobierno nacional y tres movimientos sociales, uno de ellos, la Confederación Nacional de Organizaciones Indígenas y Negras (Fenocin), destapó sus diferencias con la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) y su presidente, Leonidas Iza, a quien le exigieron que deje de “entrometer sus narices” y tratar de “meter en su bolsillo” al movimiento.

Este jueves 2 de marzo, el Consejo Ejecutivo Nacional de la Fenocin reveló el motivo que propició una división interna entre sus bases, después de que quien era su vicepresidente, Miguel Ángel (Hatari) Sarango, se declaró presidente con el apoyo de una facción del colectivo y resolvieron destituir a Gary Espinoza de la presidencia.

“Señor Leonidas Iza, deje de estar entrometiéndose en la Fenocin, deje de estar empujando a Hatari Sarango para que nos divida. Respeto le pedimos a Leonidas Iza, somos una organización independiente. No se quiera meter la Fenocin al bolsillo, porque la Fenocin no se compra, no está en venta. La Fenocin es autónoma, no queremos que usted, señor Iza, quiera entrometer sus narices en nuestra organización, deje de estar entrometiéndose, interviniendo en nuestras bases”, zanjó Gary Espinoza en la declaración pública realizada desde su sede en Quito.

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Esta exigencia se hace en una coyuntura en la que la Fenocin, Conaie y el Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador (Feine) concluyeron que después de los 90 días de diálogo en las diez mesas técnicas instaladas con el Gobierno, los 218 acuerdos suscritos no se han cumplido y, consecuencia de ello, analizan convocar a nuevas manifestaciones para que su agenda de diez puntos que elevaron en el paro de junio del 2022 se cumpla.

A este hecho se suma que el 24 de febrero último, a la par de que la Conaie resolvía en un consejo ampliado instalado en la Casa de la Cultura la ruptura del diálogo con el Ejecutivo y exigir la renuncia de Guillermo Lasso a la Presidencia, el exvicepresidente de la Fenocin Hatari Sarango se reunía en el mismo lugar con un grupo de activistas y exdirigentes, como Franklin Columba y Santos Villamar, para destituir a Gary Espinoza de su dignidad de presidente.

Espinoza defendió este jueves el Consejo Ejecutivo electo en julio del 2021 para un periodo de cuatro años, del que Sarango fue expulsado, el 17 de febrero último, por promover “actos divisionistas, de odio y racismo” y por ser funcionario público, lo que es considerado una prohibición en sus estatutos internos.

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Ello, debido a que Hatari Sarango es analista de vinculación en la Universidad Intercultural de las Nacionalidades y Pueblos Indígenas Amawtay Wasi con un salario de más de $ 1.200.

“Empezaron una persecución en contra de Gary Espinoza, en la que está detrás Hatari Sarango, empleado de la Universidad de la Conaie. Leonidas Iza quiere tomarse la Fenocin para tenerla en el bolsillo”, reprochó Espinoza, quien no descartó que se trate de actos de discriminación por ser afroecuatoriano.

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Indignado, el líder de la Fenocin oriundo de Esmeraldas reveló los detalles de por qué el 30 de junio del 2022 se negó en un primer momento a firmar la denominada ‘Acta de la paz’, que promovió la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE), en su calidad de mediadora, para poner fin a los 18 días del paro nacional que se desbordaba con actos de violencia en las calles del país.

“¿Se acuerdan de que no quise firmar (el acta de la paz)? No era porque soy radical. No era capricho… No quise firmar, y que se sepa de una vez, porque Leonidas Iza, la noche anterior, se había reunido con el Gobierno entre gallos y medianoche y tenían un acta redactada, lista para que yo firme. ¿Cómo iba a firmar un acta en la que no había participado? ¿Cómo iba a firmar un acta en la que se habían excluido los planteamientos de la Fenocin?”, cuestionó ante la prensa.

Detalló que en esa reunión había participado Sarango sin autorización y, además, en esa acta no constaba el pedido que impulsaba la Fenocin al régimen para que se implemente la condonación de deudas en la banca pública hasta los $ 10.000; tampoco constaba la construcción de caminos vecinales o fomentar créditos productivos para el sector agricultor y campesino.

Luego de estas revelaciones, Gary Espinoza aclaró que para el próximo 8 de marzo no se prepara un paro nacional, sino manifestaciones que se iniciarían a las 15:00 en Quito para reivindicar los derechos de las mujeres, a propósito del Día Internacional de la Mujer.

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“No es un paro, es una marcha nacional por las mujeres. No hemos convocado a un paro”, persistió el dirigente, quien no descartó que próximamente se produzcan reuniones con los líderes de la Conaie y Feine, Leonidas Iza y Eustaquio Tuala, respectivamente, para definir acciones en contra del mandato de Guillermo Lasso.

Al respecto, la Fenocin exigió a la Asamblea Nacional que establezca los sustentos legales para llevar adelante el juicio político en contra del presidente del Gobierno, Guillermo Lasso, para que la Corte Constitucional (CC) admita la solicitud y se efectúe este proceso.

“Si alguien comete una falta, un delito, debe ser castigado. Al país no lo pueden tener a la expectativa, esto debe resolverse en los órganos correspondientes”, apuntó Espinoza.

El dirigente de defensa jurídica Luis Mullo indicó que la directiva actual, presidida por Espinoza, fue electa para un periodo de cuatro años y gozaría de la legalidad y legitimidad otorgada desde las bases del movimiento a nivel nacional.

Denunció que “quienes lucraron” de la Fenocin, en referencia a exdirigentes que respaldan a Hatari Sarango y que ocuparon funciones públicas en gobiernos anteriores, quieren volver y por ello están fomentando la división interna.

El presidente de la Conaie, Leonidas Iza, con Hatari Sarango, exvicepresidente de la Fenocin y quien afirma ser el actual presidente del movimiento, en una rueda de prensa en Quito. Carlos Granja Medranda / EL UNIVERSO Foto: Carlos Granja Medranda

La Conaie y su presidente, Leonidas Iza, no se han pronunciado todavía sobre estas afirmaciones. En tanto, Hatari Sarango en su cuenta de Twitter escribió: “Gary, la Fenocin no es una hacienda, es una organización intercultural. Con el apoyo de las organizaciones fundadoras de la Fenocin seguiré encabezando la presidencia. El pueblo ya no te reconoce, te quedaste solo igual que tu presidente Lasso”.

Así también, la Feine, presidida por Eustaquio Tuala, se ha mantenido al margen de estas diferencias entre la Conaie y la Fenocin y aún evalúa junto con sus estructuras de base su postura ante un posible llamado a movilizaciones. (I)