Nota del editor: Este perfil es parte nuestras notas exclusivas para suscriptores, pero lo abrimos a todas nuestras audiencias como un aporte a la Democracia a fin de que los electores puedan seguir conociendo a los candidatos que el 20 de agosto buscan la Presidencia de la República.


El saxofón le da el ‘respiro’ que necesita para recargarse de energía. En el sofá descansa hasta que el aliento de Yaku Pérez Guartambel le devuelve su ‘voz’, ese tono agudo y grave que aprendió a moldear desde los 13 años. Al principio tocaba en las liturgias de la iglesia y en los shows de una banda del pueblo; ahora lo hace para complacer a su mamá con un repertorio que incluye Chola cuencana, Pobre corazón o Curiquingue cuando la visita ‘religiosamente’ los domingos en su natal Tarqui, parroquia del cantón Cuenca (Azuay).

Publicidad

“No hay cumpleaños que no nos despierte con sus melodías”, añade Ñusta, la mayor de sus dos hijas, quien postergó su tesis universitaria para acompañar a su padre en un segundo intento de llegar a Carondelet. En los comicios del 2021 llegó tercero (19,4 %), con 1,7 millones de votos, 32.590 menos que el mandatario Guillermo Lasso (19,7 %). Habló de ‘fraude’ por semanas hasta regresar a la cotidianidad.

De 05:00 a 07:00 revisaba sus correos y trotaba o hacía yoga, antes de preparar mote pillo con aguacate, frutas y colada de máchica para desayunar con su esposa Manuela Picq, y sus ‘guaguas’, Ñusta (24) y Asiri (18), fruto de su primer relación. Luego, pedaleaba hasta su oficina jurídica, en el centro, para atender a sus clientes, con una pausa a las 13:00 para almorzar con su familia. A las 19:00 finalizaba su jornada y retornaba a casa para hilvanar los capítulos de su noveno y décimo libro.

Yaku Pérez, precandidato presidencial: De llegar a la Presidencia lo haré sin actitudes de venganza, persecución o revanchas, hay que buscar acuerdos básicos y mínimos para gobernar en un periodo tan corto que es el año y medio

Uno de ellos, que tiene un 90 % de avance, tratará sobre ecología política; y el otro, adelantado en un 70 %, abordará la ‘guerra’ por el agua, escritos que por el momento se quedaron en la ‘congeladora’. Mientras, este líder indígena de 54 años recorre las ciudades del país respaldado por la alianza Claro que se Puede (Partido Socialista, Unidad Popular y Democracia Sí).

Abogado, especialista en Derecho Ambiental, Derecho Penal y Justicia Indígena y magíster en Derecho Penal y Criminología, Pérez ejerce su profesión con su RUC desde hace 24 años. Ha asesorado y forma parte de la Federación de Organizaciones Campesinas del Azuay (FOA); y dirigió la Confederación de los Pueblos de la Nacionalidad Kichwa del Ecuador (2013 al 2019) y la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (2017).

Publicidad

También ha tenido tres cargos públicos: analista legal del extinto Ministerio de Bienestar Social (1993), concejal de Cuenca (1996) y prefecto de Azuay (2019-2020). A este cargo renunció para ser candidato presidencial por Pachakutik, movimiento del que se desvinculó en 2021 porque cree que “hipotecaron” políticamente la organización al llegar a acuerdos con correístas y lassistas en la elección de Guadalupe Llori como presidenta de la Asamblea.

Yaku Pérez, candidato a la Presidencia de la República, recibe apoyo del movimiento Pachakutik. El anuncio se hizo en junio pasado, en la sede de este movimiento, en Quito. Foto: Alfredo Cárdenas.

“Yo les dije: ‘Captemos (la Asamblea), la merecemos, pero sin acuerdos, ni con Lasso ni con Correa’. Y dijeron: ‘No, con el que sea’. Entonces yo les dije: ‘Si ustedes hacen eso, yo me voy de Pachakutik’, y no creyeron, se rieron”, lamenta Pérez, quien asegura que cuenta con el respaldo de las bases de la Conaie, aunque esta organización no le ha dado públicamente su apoyo: “La dirigencia, el presidente (Leonidas Iza) en su tiempo apoyó a (Andrés) Arauz, y ahora entiendo no lo ha dicho, pero probablemente en la práctica esté apoyando al correísmo”.

No tiene empresas a su nombre, pero presidió tres compañías públicas cuando fue prefecto de Azuay. De su gestión, por un año y medio, destaca la eliminación de un impuesto a los vehículos, la disminución de su sueldo a la mitad, el asfaltado de 74 km de vías y la creación de canastas agroecológicas. No obstante, la viceprefecta que lo reemplazó en el cargo, Cecilia Méndez, lo denunció luego por presunto peculado y tráfico de influencias, procesos que se archivaron.

Seguridad, eje central de los planes de gobierno de los ocho binomios presidenciales

El primer caso fue porque —según el proceso— se arrendó a $ 50 un espacio de cafetería que debía costar $ 448. “Nunca habían arrendado antes. Les entregaban ahí para que ocupe, porque era un espacio tan chiquito (...), hicimos un contrato y sí pagó (los $ 50) con mejoras”, refiere Pérez y añade que la segunda investigación, por la contratación de una diseñadora, “no llegó a ejecutarse, nunca cobró un solo centavo”.

Cuando fue prefecto (2019 -2020) tributó $ 4.277 de impuesto a la renta; los siguientes dos años reportó $ 0. “No rebasé la base”, justifica Pérez, y asevera que no cobra las consultas en su oficina jurídica y tampoco casos relacionados con la familia y la defensa del agua y la naturaleza. “Antes le cuestionaba: ‘¡Papá, no vas a cobrar!’, pero ahora que he crecido y caminado por este Ecuador digo: ‘Chuta, no hay que cobrar, hay que dar’. Es un orgullo ser su hija”, dice Ñusta sobre su papá, quien cumplió también el rol de madre cuando su ‘ma’ murió. Ella tenía 12 y su hermana, 6.

“Salvar las fuentes de agua en Río Blanco fue un milagro (...). Por ese juicio podría haber cobrado unos $ 20.000. No cobré ni medio; el mejor pago fueron las lágrimas de alegría de las hermanas indígenas que decían: ‘Dr. Yakito, nunca pensamos que íbamos a quedar libres de minería’”, recuerda este activista, que recibe honorarios como abogado en causas civiles y penales.

Atrás dejó su postura a favor de la redistribución de riqueza, que difundió hace siete años. “La clase media, que somos la mayoría, tenemos un carro: ¿para qué queremos tener dos, tres, cuatro carros?; tenemos una casita: ¿para qué queremos tener diez mansiones?”, dijo en esa época. Ahora, en uno de los mítines, expresó lo opuesto: “Si otras personas quieren tener dos, tres, cuatro vehículos, ¿cuál es el problema?, si es fruto de su trabajo...”.

¿Cuál es la postura de los candidatos a la Presidencia sobre la consulta del Yasuní ITT?

Su patrimonio asciende a $ 346.143, el mismo que reportó a Contraloría al dejar la Prefectura, e incluye dos casas (adquiridas en 2003 y 2006), un auto (2013), equipo de oficina y terrenos. “Pero eso es dividido para dos, porque la mitad tienen acceso mis hijas; y los terrenos son de mis padres, que también debemos dividir con mi hermano”, aclara este activista que ha sido detenido en seis ocasiones y que aprendió a valorar el agua desde los 5 años, cuando —recuerda— caminaba una hora con un cántaro de barro en su espalda, para recoger el líquido del río o del pozo a las 04:00. En honor a este líquido cambió su nombre de Carlos Ranulfo a Yaku Sacha (’agua de selva’) en 2017.

“Yaku es un luchador contra la injusticia social, contra la corrupción de los poderes que ha existido en el Ecuador y un defensor de los derechos del ser humano y de la naturaleza”, considera Marlon Santi, dirigente indígena y expresidente de la Conaie, quien conoció a Yaku hace más de dos décadas, en una marcha en contra de la minería.

Francisco Zhagu, su vecino hace 26 años, cree que “Yaku sabe lo que el pueblo necesita, porque solo el que vive en la pobreza, el que ha sufrido en el campo sabe lo que es trabajar duro y ganarse el pan cada día”, y añade que es un ejemplo de motivación y superación para los jóvenes.

Yaku Pérez Guartambel recorrió el norte de Quito, en días pasados, para promover su plan de gobierno. Foto: Carlos Granja Medranda

Con un collar inspirado en la cruz del sur, que representa los cuatro puntos cardinales, las estaciones y los mandamientos del mundo andino, Pérez destaca algunas propuestas de su plan de trabajo: “Reducir el IVA del 12 al 10 %, no crear más impuestos, mantener los subsidios a los combustibles, fortalecer la UAFE, volver los ojos al campo con la creación de la empresa nacional de almacenamiento y comercialización de alimentos para tener comercio justo, se condonarán las deudas de hasta $ 10.000 a los agricultores afectados por COVID y fenómenos meteorológicos, y crearemos un fondo de $ 500 millones para dar créditos a intereses simbólicos y a largos plazos, a jóvenes y mujeres”.

Dónde me toca votar en las elecciones presidenciales de Ecuador 2023

En la consulta popular votará Sí para defender el Yasuní. “No tenemos un plan B, un planeta B; tenemos un solo planeta, y esa casa grande hay que cuidar para las generaciones venideras”, refiere este “ratón de libros”, como se autodenomina desde su adolescencia: “Leí a Marx, a Tolstói, Dostoyevski... Y antes de terminar el colegio, ya leía a Isaac Newton, a Galileo Galilei, a Copérnico, a Eratóstenes”.

Le fascina la astronomía, porque recuerda que podía contemplar el cielo estrellado en la oscuridad del campo. La energía eléctrica recién llegó a su poblado a los 15: “Yo estudiaba con mecheros de kerosene, cosa que después de hacer los deberes me limpiaba la frente y era más negrito de lo que soy, por el hollín”.

Lejos de quejarse de aquellas experiencias, las cuenta gratamente porque afloran sus raíces, lazo irrompible que lo conecta con la Pachamama y lo regresa siempre a su hogar, cada domingo, para ayudar a su mamá a “ordeñar las vaquitas, deshierbar y cosechar choclos, porotitos y achogchas”.

Atrás quedó el ideal de un pequeño que aspiraba a ser albañil, labores que realizaba en las vacaciones escolares desde los 9 años. Ahora Yaku —que baila y toca el saxofón en los mítines— afirma sentirse preparado para ser presidente: “No pienso en las siguientes elecciones, sino en las siguientes generaciones (...). Tengo el sueño de que podamos recuperar esa paz social, pagando la deuda ecológica y la deuda social. Tengo el sueño de que el Ecuador quede libre de minería metálica en fuentes de agua. Tengo el sueño de que el Ecuador dé un mensaje potente a América Latina y al mundo de que en el Ecuador se cuida la vida en el planeta”. (I)