En la Fiscalía de Pichincha, la Cámara Provincial de Pichincha, la Contraloría General del Estado y en la próxima Asamblea Nacional se investigará la contratación de Soledad Padilla, la exasistente personal del exvicepresidente Jorge Glas, en la Prefectura de Pichincha.

Padilla laboró con Glas por 17 años; primero fue asesora de su despacho en la Vicepresidencia de la República y cuando él estaba en la cárcel sentenciado por casos de corrupción, le asistía en sus temas personales, aparte de llevarle medicinas y comida, actividad que realizaba a la par de cumplir funciones administrativas en la Prefectura de Pichincha, cuya titular es Paola Pabón, de las filas del correísmo.

El fin de semana pasado se conoció de un conflicto personal entre Padilla y Glas que se elevó a la justicia. Ella lo denunció por acoso y él, por extorsión.

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El tema alcanzó también al bloque de legisladores de Revolución Ciudadana porque su excoordinador, Ferdinan Álvarez, es actualmente pareja de Padilla.

La exasesora de Glas laboró en la Prefectura entre noviembre del 2019 y agosto del 2023, primero como asistente de promoción turística 2 y luego pasó a ser directora técnica de apoyo.

Tras conocerse de esta contratación, la Fiscalía de Pichincha le informó a Pabón que inició de oficio una indagación previa por un supuesto abuso de fondos públicos. La notificación llegó al despacho de la funcionaria -que está fuera del país- el martes 24 de octubre.

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En tanto que a las 23:30 del lunes 23 de octubre, el alcalde de Quito, Pabel Muñoz, quien es coideario de Pabón, envió una carta al secretario del Consejo Provincial de Pichincha, Santiago Zurita, en la que solicitó que en la próxima reunión de ese cuerpo colegiado -integrado por alcaldes y delegado de las juntas rurales- se conozca un informe del director administrativo y de Talento Humano del Gobierno provincial en el que se expliquen las actividades y funciones que realizaba Soledad Padilla en esa entidad.

El Concejo Municipal de Quito respaldó este pedido en su sesión del 24 de octubre, y no dio paso a una solicitud del concejal Michael Ibarra para que se exija una fiscalización al Consejo Provincial de Pichincha ante indicios aparentes de ‘piponazgo’ en la contratación de Padilla.

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La Contraloría General, en tanto, informó que entre el 2021 y el 2022 ha efectuado tres exámenes especiales a la Prefectura de Pichincha; estos son:

1- El informe DPPch-0004-2021, aprobado el 25 de enero del 2021, a las operaciones administrativas, financieras y talento humano entre el 1 de enero y el 24 de junio del 2020.

2. El informe DPPch-0013-2020, aprobado el 30 de octubre del 2022, realizado a las operaciones administrativas, financieras y talento humano entre el 14 de mayo de 2019 y el 31 de diciembre de 2019.

3. El informe n.º DNA5-GAD-0048-2023, aprobado el 8 de mayo del 2023, que fue alcance a la gestión de talento humano y pagos por el periodo entre el 25 de junio de 2020 y el 31 de agosto de 2022.

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En este último se realizaron varias observaciones, como la contratación de asesores sin observar el grado jerárquico superior de sus superiores; la contratación de personal para el nivel profesional con sueldos que sobrepasan el techo establecido; supuesto nepotismo entre los consejeros provinciales y la Prefectura de Pichincha; y la incorporación de personal que no cumpliría los perfiles para los cargos; contratos para servicios ocasionales que exceden su plazo de duración; y el uso de manuales de recursos humanos desactualizados.

Desde agosto pasado, la Contraloría indicó que está ejecutando un examen especial al cumplimiento de las recomendaciones establecidas en los dos primeros informes.

El organismo no precisó si en esta investigación tocará el tema de Padilla o si se hará otra diferente.

Por su parte, la legisladora Ana Galarza, de las filas de Construye, indicó que una vez que se instale la nueva Asamblea Nacional hará solicitudes de información al gobierno seccional que dirige Pabón.

Cruce de denuncias entre el exvicepresidente Jorge Glas y su exasesora

“En las últimas horas se han filtrado audios en los que se ventilaban temas personales entre Glas y su exasesora, pero además sale a relucir el hecho de que Glas presuntamente le habría solicitado a la prefecta de Pichincha que contrate a Padilla para que le pague un sueldo, pero para que se dedique a ser su asistente personal. Eso incurriría en el delito de peculado, pero antes de adelantar cualquier criterio es importante hacer solicitudes de información a Talento Humano, como sus funciones, sus horarios, y contrastar si en horarios de trabajo ella acudía a la cárcel de Latacunga o la Cárcel 4 de Quito, donde estaba preso Glas por actos de corrupción... Si es que mientras estaba trabajando en el Consejo Provincial ella se dedicaba a ser su asistente personal de Glas, esto tiene que ser notificado a la Contraloría para que haga un examen especial y determine algún indicio de responsabilidad penal, y si lo hay, la Contraloría debe remitirlo a la Fiscalía y dentro del debido proceso determinar si hubo peculado”, explicó en una entrevista con Radio City el pasado 24 de octubre.

En una carta pública divulgada la noche del 23 de octubre, Padilla defendió su contratación en el gobierno seccional. Aseguró que existen los respaldos, registros biométricos con sus entradas y salidas, fotografías de los eventos institucionales y otras actividades realizadas en la Prefectura de Pichincha.

Pabón, quien se encuentra fuera del país en actividades oficiales- informó a través de un video que la institución que lidera ha recibido pedidos de información de entidades de control sobre la contratación de Padilla. “Brindaremos las facilidades para entregar toda la información necesaria para perseguir delitos, pero no a personas. Basta de revictimizar a mujeres sujetas a violencia de género en cualquier espacio”, indicó. (I)