“El ingeniero”, como conocían muchos a Javier Rosero, fue asesinado por sicarios la mañana de este viernes 13 de enero cuando circulaba por la calle Primera, en Los Ceibos, a pocos metros de su vivienda.

Iba llegando en su camioneta junto a su esposa cuando sicarios en motos se acercaron mientras esperaban el cambio del semáforo y le dispararon.

Dos balas alcanzaron al presidente del comité Los Ceibos, quien llevaba ya varios años impulsando mejoras en su sector, sobre todo en materia de seguridad.

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El presidente del Comité Barrial de Los Ceibos fue baleado por sicarios

Aunque Rosero fue llevado a una clínica cercana, ahí solo se confirmó su deceso.

Personal médico reveló que el hombre de 54 años tenía un impacto de bala en la cabeza y otro en el cuello. Su esposa resultó ilesa.

Minutos después, el carro de Medicina Legal ingresó a la casa de salud para el levantamiento del cadáver. Los agentes de Criminalística y de la Dinased llegaron al hospital para conocer detalles del ataque e iniciar un operativo.

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Primero en la escena del crimen se levantaron al menos ocho indicios balísticos. Ahí testigos aseguran que los gatilleros ni siquiera usaban cascos o gorras, por lo que esperan que las cámaras de la zona permitan identificarlos rápidamente.

Este sicariato ha alarmado a los moradores de Los Ceibos y a quienes conocían a Rosero.

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Muchos pasaban por ahí durante las pericias y al enterarse del atentado en su contra se estacionaba para preguntar por su estado de salud.

Contaban que el hoy occiso había creado chats comunitarios, que trabajaba de cerca con los policías en la zona para mejorar los protocolos de seguridad y que había instalado decenas de cámaras y una especie de sala de monitoreo en las instalaciones del comité barrial.

Un habitante de ese barrio indicó que tiempo atrás Rosero había ayudado a capturar a unos ladrones y que estos lo habían amenazado. Él cree que estos hombres cumplieron su amenaza.

Karina, otra moradora del sector, comentó que Rosero también estaba tratando de abastecer a la UPC ubicada junto al parque.

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“Parece que lo han mandado a matar porque estaba encabezando una lucha contra los delincuentes en Los Ceibos”, expresó la vecina.

Entre las iniciativas de Rosero para mejorar la seguridad en la zona estaba también la carnetización de los recicladores.

Rosero dijo a este Diario el año pasado que así trataban de controlar el ingreso de desconocidos al barrio tradicional de Guayaquil.

El dirigente también mencionó que habían entregado al Municipio local algunos proyectos para regenerar los callejones que unen Los Ceibos y otros sectores como Mapasingue. (I)