El Ecuador está abocado a definir en las elecciones presidenciales y legislativas de este domingo 9 de febrero y es preciso ejercer un voto libre, pero informado, responsable, reflexivo y meditado, debido a que está en juego el presente y futuro del país, de las familias y las nuevas generaciones, que necesitan certezas y no más incertidumbre.

Es importante ejercer un voto libre, pero fundamentalmente un voto útil, que no se desperdicie el sufragio cuando en la elección presidencial estarán en la papeleta 16 candidatos y la mayoría sin opciones, según sondeos serios de opinión. De acuerdo con las posibilidades se ha planteado una disyuntiva: votar por una de las dos opciones que han liderado en el proceso electoral.

Se definiría entre dos alternativas: la sobrevivencia de la democracia y la débil institucionalidad que debe recuperarse; y, la otra, claramente identificada, y así se han pronunciado públicamente, con la búsqueda de impunidad para sus líderes condenados por corrupción, unos en la cárcel y otros prófugos de la justicia.

¡Habló el ‘centennial’!

La reciente visita a Quito del presidente legítimo de Venezuela, Edmundo González, puso contra la pared a los candidatos presidenciales y quedaron al descubierto si respaldaban al pueblo venezolano, a la democracia y a la recuperación de la institucionalidad o si estaban del lado de la dictadura oprobiosa de Nicolás Maduro, que va 25 años en el poder (desde Chávez) y no quiere arbitrariamente abandonarlo.

Los que respaldan al presidente ganador de los comicios del 28 de julio pasado y aquellos que admiran y se solidarizan con la dictadura que usurpó el poder pese a haber perdido las elecciones y que ha conculcado todos los derechos y las libertades, que tiene sumido a su pueblo en la extrema pobreza y la miseria y en la cárcel a presos políticos, e incluso a personas menores de edad.

Resulta lamentable que haya movimientos políticos y candidatos que primero tuvieron vergüenza de reconocer a esa dictadura, pero luego quedaron al descubierto cuando vino Edmundo González. No quisieron ni saludarle y peor declararle huésped ilustre en el Concejo de Quito, con la abstención de diez concejales y la posición digna de ocho concejales.

Ego, el protagonista

Esto pone claro que concuerdan con lo que hace esa dictadura: violar los DD. HH., conculcar las libertades individuales, empobrecer a su pueblo. Venezuela ha sido uno de los países más ricos de la región, con las mayores reservas petroleras del mundo, pero por su pésimo gobierno han fugado ocho millones de ciudadanos.

El Ecuador necesita certezas y certidumbre más allá de los procesos electorales que deben cumplirse periódicamente, con el ejercicio del voto obligatorio, por un futuro promisorio, que la mayoría de políticos y candidatos exhibe demagogia.

Necesita que se afronten con decisión reformas estructurales, que continúe con decisión enfrentando a los grupos delincuenciales organizados, al narcotráfico y a la narcopolítica en medio del conflicto armado interno; que impulse los cambios para la generación de empleo pleno; que lidere con firmeza el combate a la corrupción y que siembre esperanza en el futuro del país. (O)