El Ministerio del Trabajo registra que en el 2023 se presentaron 682 denuncias de acoso laboral en el sector público. Del sector privado no se hace un desglose de las causas de querellas laborales.

La violencia y acoso en los trabajos fue un tema abordado esta semana en la Asamblea Nacional, donde se aprobó una ley para erradicar conductas como esas.

Los reportes del Ministerio del Trabajo dan cuenta también de los casos cerrados en el sector público. El texto aprobado con 128 votos en el Legislativo incorpora reformas al Código del Trabajo y la Ley Orgánica de Servicio Público con el propósito de “garantizar ambientes laborales seguros, erradicar violaciones a derechos humanos y proteger la dignidad de los trabajadores”.

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Con la publicación de la Ley Reformatoria para la Erradicación de la Violencia y el Acoso en todas las Modalidades de Trabajo se aspira a que empleados y empleadores tengan un marco claro que permita un ambiente favorable para todos y que, en el caso de denuncias, estas sean tratadas con transparencia y severidad para que la justicia sea el fin.

Trabajar en un ambiente de armonía es esencial no solo para la salud humana, sino incluso para la producción. Más allá de que haya una reforma legal debe ser una obligación que en el sector público y en el sector privado no se violenten normas mínimas de convivencia y de respeto a los derechos humanos.

Punto para la Asamblea Nacional, que sin objeciones aprobó una norma que favorece a los trabajadores y a la producción. Ahora corresponde esperar la publicación y la debida ejecución para proteger la dignidad de la gente en el ambiente laboral del Ecuador.

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Los legisladores hacen referencia a que la violencia es concebida como los actos que ocurran por una sola vez o de manera repetitiva en contra de una persona trabajadora, que puedan resultar en daño físico, psicológico, sexual, económico, político, simbólico o digital. Aplica en la presencialidad e incluso al teletrabajo. (O)